DGA se niega a pagar medio millón de euros por las expropiaciones al Ayuntamiento de Alcañiz
Los chalecos amarillos de los trabajadores que hasta hace unas semanas llamaban la atención en las obras del nuevo Hospital de Alcañiz ahora son complicados de ver en la ladera de Cantagallos. Los trabajos de construcción del nuevo centro sanitario se han ralentizado a la mínima expresión. Tan solo trabajan cinco personas en el encofrado más el encargado y el capataz.
De la media de 50 a 60 personas que levantaban el Hospital en el mes de abril tan solo quedan siete. Una situación que se puede comprobar tan solo dando una vuelta por la ladera. Además, ahora ya no trabajan los sábados. Sin embargo, desde el Gobierno de Aragón siguen sin querer realizar declaraciones aludiendo a que se cumplirá la fecha de fin de obra, finales de 2021; que mientras que la empresa vaya certificando mes a mes no hay problema y que la nueva ley de contratos no permite realizar modificados que aumenten el coste a no ser que se produzcan circunstancias «muy extremas». La UTE tampoco se pronuncia al respecto.
Lo cierto es que las obras están prácticamente paradas. Actualmente, se encuentran al 10% de ejecución y se ha gastado el 6,21% del total presupuestado. Es decir, la UTE ha certificado 4,1 millones de los 66 que cuesta el Hospital. En enero, cuando aún había actividad, gastó 307.000 euros frente a los 367.000 y 508.600 que ejecutó en noviembre y diciembre. Teniendo en cuenta que este mes de marzo ha reducido la actividad a la mínima expresión, es muy complicado que este año gaste los 12,4 millones previstos en el plurianual. Por ejemplo, en caso de seguir el ritmo que llevó en enero tan solo llegaría a los 3,6 millones, ni una tercera parte del total presupuestado.
La UTE tenía más de cuatro años para levantar una obra prevista en tres según el proyecto que concentra además, en los dos últimos años la mitad de su coste total, 34,5 millones. Por ello, es previsible que sea a partir de 2020 cuando los trabajos se vuelvan a reflotar y ahora lleven un ritmo ínfimo.

De ello se prevé que de cuenta este viernes la consejera de Sanidad, Pilar Ventura, quien comparecerá en la comisión del ramo de las Cortes a petición del grupo PAR. Así lo anunció ayer la diputada aragonesista portavoz en la materia, Berta Zapater, quien en rueda de prensa denunció los «reiterados incumplimientos» y puso en entredicho que Ventura no supiera cuando visitó las obras del Hospital el 18 de febrero que un par de semanas después, con el cambio de mes, las obras iban a sufrir un parón drástico. Entonces los trabajos sufrieron una importante reducción de personal que obligatoriamente ralentizó el ritmo. Ya se prescindió de una parte importante de trabajadores, todos ellos de subcontratas pero, sin embargo, a lo largo de la semana pasada la UTE aún despidió a más personal de las contratas avisándoles de un día para otro quedándose tan solo con los siete citados anteriormente.
Zapater criticó ayer que no es suficiente con repetir que las obras «estarán» a finales de 2021 y dijo que DGA «tiene herramientas para hacer que la obra vaya mas rápido». «Entendemos que hay intención por parte del ejecutivo autonómico de no cumplir plazos y alargar la obra. Se ha ralentizado porque el Gobierno de Aragón no quiere ir más rápido», afirmó la diputada alcañizana.
En este sentido, también denunció que DGA «incumple» año tras año, desde que comenzó la legislatura, el compromiso de ejecutar la partida presupuestaria destinada a la construcción del Hospital de Alcañiz. «Ha pasado de un 86% de ejecución comprometida al inicio a tener ejecutado menos de un 8% en 2018».
Según apuntó Zapater, el contrato no solo establece un plazo de 52 meses para terminar las obras sino un programa de trabajo que se revisa en reuniones periódicas que quieren conocer porque desde el PAR entienden que no se está cumpliendo. «Solo nos cabe pensar que la consejera conocía el recorte cuando vino a Alcañiz, no entendemos que en estas reuniones no lo dijeran», afirmó la diputada alcañizana.
DGA debe medio millón de los terrenos
De lo que sí ha hablado ya la consejera Ventura es de los 467.000 euros que el Ayuntamiento de Alcañiz reclama por acuerdo de pleno al Salud por el pago de los terrenos del Hospital, una infraestructura de la que se beneficiará no solo la ciudad sino todo el Bajo Aragón Histórico. Por ejemplo, en Motorland DGA asumió íntegramente las expropiaciones.
En la Cámara autonómica, la responsable del Salud respondió a una pregunta del PP que en 2013 el Consistorio acordó una «cesión gratuita» por lo que DGA no debe pagar nada. Aseguró que «en ningún caso» el departamento compra suelo para realizar sus infraestructuras sino que todas se construyen o bien en terrenos de titularidad o en suelos cedidos gratuitamente por los ayuntamientos aunque sí que reconoció que se habían dado «subvenciones».
No obstante, este compromiso de cesión se realizó para no retrasar el proyecto y porque DGA en la anterior legislatura abonó 800.000 euros de los terrenos mediante el Fondo de Inversiones de Teruel. Sin embargo, faltan por pagar 247.000 euros que el Consistorio abonó en 2010 y 220.000 de 2015 que aún no se han recibido.
De la media de 50 a 60 personas que levantaban el Hospital en el mes de abril tan solo quedan siete.
El principal problema que no se aprecia en la noticia es la licitación de los 12 millones que se habían acordado este año y que tendremos que licitar de nuevo para el próximo año en caso de no gastarlos, lo que retrasa toda la obra pública en un año ya que las licitaciones se realizan con la aprobación de los presupuestos.