La Unidad Clínica Multihospitalaria de Oncología Radioterápica de Aragón (Ucmora) ya ha atendido a más de 100 pacientes en el Hospital de Alcañiz en lo que va de año. Los especialistas se desplazan hasta la capital bajoaragonesa cada semana para atender primeras consultas y realizar seguimientos oncológicos evitando así que sean los pacientes quienes deban ir hasta Zaragoza.
A su vez, de este mismo proyecto también forma parte el tratamiento de radioterapia intraoperatoria específico para cáncer de mama. A través de este procedimiento, que solo puede llevarse a cabo en ciertos casos concretos, un equipo médico se traslada y el paciente recibe el tratamiento de radioterapia en el quirófano de su hospital de referencia. En Alcañiz ya se han beneficiado 25 personas. En el resto de las patologías, los pacientes sí deben continuar desplazándose hasta Zaragoza para realizar las sesiones de radioterapia, sin embargo, gracias a Ucmora sí evitan ir hasta allí para otras cuestiones como los seguimientos.
Arantxa Campos, especialista en oncología radioterápica, es una de las profesionales que cada martes se desplaza hasta el hospital de Alcañiz junto al resto de su equipo para otorgar estos servicios. El proyecto, según afirma, cumple un papel clave en la descentralización de los servicios sanitarios.
¿En qué consiste la Unidad Clínica Multihospitalaria de Oncología Radioterápica de Aragón?
Este proyecto lleva en marcha desde 2018, y se basa en la unificación del servicio de oncología radioterápica para todos los hospitales de Aragón. Esto permite que sea el especialista quien se desplace a diferentes centros desde la ‘sede central’ de Zaragoza con un equipo y los medios necesarios para ofrecer este tipo de consulta. En mi caso yo siempre me he desplazado más a Alcañiz, pero algunos compañeros van a Teruel, Calatayud, Huesca o Barbastro. Son desplazamientos semanales que, en el caso de Alcañiz, se realizan cada martes.
¿Cómo se benefician los pacientes?
Al acudir al hospital de forma semanal evitamos que sean ellos quienes tengan que venir hasta Zaragoza. Es algo que beneficia especialmente a las personas más mayores a las que quizás ya les cuesta desplazarse o dependen de familiares que los lleven en coche. Es cierto que para realizar las sesiones de radioterapia sí deben acudir a Zaragoza porque es ahí donde se encuentran las máquinas necesarias (aceleradores). Pese a ello, que nosotros podamos realizar las primeras consultas, diagnósticos y seguimientos en su hospital de referencia ubicado en su pueblo facilita mucho el proceso para todos los pacientes.
¿Y los profesionales?
También salimos ganando. Podemos trabajar mano a mano con el resto de especialistas del centro, o participar en otras labores fundamentales como son los comités multidisciplinares de tumores. También se evita que muchas de las decisiones importantes tengan que ser tomadas a distancia. En Alcañiz, por ejemplo, hemos hecho especial equipo con los compañeros de oncología médica. Decidimos muchos tratamientos en conjunto, siempre procurando otorgar el mejor diagnóstico para cada paciente, lo cual también supone un avance en la calidad de la atención médica. Estar presentes en hospitales más pequeños también permite que la radioterapia tenga más visibilidad, consiguiendo que más personas puedan conocerla y beneficiarse de este tratamiento.
Dentro del proyecto también se encuentra el tratamiento de radioterapia intraoperatoria específico en cáncer de mama, ¿en qué consiste este procedimiento?
Este tratamiento únicamente se da en casos concretos y seleccionados dentro del cáncer de mama. Tras revisiones previas, un equipo de radioterapia intraoperatoria formado por médicos y equipamiento portátil se desplaza a hospitales como el de Alcañiz para administrar el tratamiento de radioterapia en los quirófanos del propio centro. Este es el único caso en el que el paciente, además de no tener que desplazarse para consultas, también se evita tener que ir a Zaragoza al ser intervenido en el mismo momento.
¿Cuántas personas se han beneficiado de este último tratamiento y el resto de consultas médicas en Alcañiz?
En cuanto a intervenciones de radioterapia intraoperatoria en cáncer de mama se han realizado unas 25 hasta la fecha. Si hablamos de las valoraciones realizadas durante la primera visita sumamos ya 61 personas atendidas. En revisiones posteriores para ver cómo ha ido el tratamiento y para comprobar que la enfermedad está controlada hemos atendido a 200 personas.
¿Cómo ha afectado la pandemia a la oncología radioterápica?
Durante el punto más fuerte de la pandemia se evitaba realizar todo tipo de desplazamiento, lo que generó bastante paralización en las consultas. Por ejemplo, en 2020 tuvimos 292 revisiones de seguimiento, y en 2021, cuando ya la situación mejoró un poco, acabamos el año con 369 personas atendidas. Ahora las cifras ya se han regularizado, aunque yo creo que todavía quedan secuelas. Hay pacientes que llegan con tumores muy avanzados o muy agresivos que posiblemente se encuentren en ese nivel como consecuencia del miedo que hizo que la gente evitara acudir a las consultas o al hospital en estos años.
¿La falta de profesionales es otro problema añadido?
En nuestro caso no, pero es verdad que a lo mejor otras especialidades siempre tienen esa dificultad para encontrar personal, especialmente en los hospitales más alejados de la capital. También es cierto que el mayor handicap de nuestro caso es que los aceleradores solo se encuentran en el Hospital Clínico y el Hospital Miguel Servet de Zaragoza, por lo que las sesiones, sin contar con el procedimiento específico para cáncer de mama, deben realizarse allí. Aunque también es cierto que en un futuro cercano está previsto que los hospitales de Huesca y Teruel dispongan de un acelerador.
¿Qué otras cuestiones quedan por mejorar?
Creo que lo más importante es seguir trabajando para que este proyecto siga beneficiando al mayor número de pacientes. Hemos podido comprobar que la satisfacción es total tanto entre profesionales como entre quienes recibimos en consulta. Debemos seguir trabajando para dar el mejor tratamiento y seguir reivindicando servicios como este entre todos los pacientes de Aragón, independientemente de su código postal. Es tarea de todos trabajar para que poder beneficiarte más o menos de un tratamiento no esté condicionado según la zona en la que uno elija vivir.
¿Diría que el nuevo hospital de Alcañiz es una oportunidad para ello?
Definitivamente. Será una nueva oportunidad para tener un hospital más nuevo, más acogedor y con tecnología más puntera. En cuanto a la radioterapia, nos permitirá seguir con nuestras mismas consultas, revisiones y quién sabe si en un futuro también nos facilitará el contar con más tecnología.
«Hay pacientes que llegan con tumores muy avanzados o muy agresivos que posiblemente se encuentren en ese nivel como consecuencia del miedo que hizo que la gente evitara acudir a las consultas o al hospital en estos años.»
Ya, la gente prefería morir de una metástasis que pasar un catarro. Me imagino que los protocolos no influyeron, el hecho de que las consultas fuesen por teléfono tampoco…