Después de varias semanas recogiendo la almendra en los campos de regadío del Bajo Aragón-Histórico, concretamente de la variedad Guara, los agricultores y cooperativas ya calculan que sacarán menos kilos de los que se esperaban. No obstante, en Fabara han dado la vuelta a las cifras gracias a la gran producción que están logrando con los nuevos regadíos.
La comarca del Bajo Aragón-Caspe, concretamente Caspe, Maella y Fabara, es una de las zonas del territorio donde más se va a recoger este fruto seco. Con todo ello, desde el Bajo Aragón-Caspe confirman que seguramente será una campaña con menos kilos de los que se esperaban, «pero con muy buena producción aún así». En Fabara, concretamente, uno de los pocos municipios donde existe cooperativa que trabaje y comercialice la almendra, ha aumentado exponencialmente su producción en los últimos años, gracias a la introducción de nuevos regadíos.
Por ello, en este municipio se espera que se recojan unos 3 millones de kilos de almendras, «posiblemente, la más importante de los últimos años». Esta cifra es la que se calcula en la cooperativa fabarola San Isidro, que consta actualmente de 120 productores de este fruto, de los cuales 80 trabajan principalmente en el regadío. Esa es la principal cuestión que ha generado la gran producción que se está recogiendo. «No es la mejor campaña en cuanto a climatología, pero lo hemos compensado con la introducción de numerosos nuevos regadíos en los últimos años», detalla Cervera.
Campaña en el Bajo Aragón Histórico
«Este año preveíamos una campaña mucho más buena de lo habitual, con una recogida potencial de 22.000 toneladas, pero finalmente estamos viendo que van a ser unas 16.000 toneladas aproximadamente. Eso lo hemos percibido en la recogida de los campos de regadío, pero si ahí ha ido un poco mal, en el secano será peor», aseguró David Andreu, responsable de UAGA Teruel. Esta pérdida la achacan, principalmente, a la ola de calor que se vivió durante unos días de la primavera, la cual fue perjudicial en la formación de las cáscaras. Las altas temperaturas también hicieron que se adelantase la cosecha unas semanas a los primeros días de agosto.
No obstante, el granizo que vivió el Bajo Aragón Histórico a finales de junio también dañó parte de los frutos. Y la sequía también ha hecho mella en los campos que no cuentan con sistemas de regadío. Por todo ello, «los agricultores están percibiendo que no están recolectando tanta almendra como esperaban en un inicio», señala Alberto Cervera, gerente de la cooperativa San Isidro de Fabara.
Además, las almendras también se han visto afectadas por las altas temperaturas que han marcado los termómetros durante los últimos días de agosto. De hecho, el calor ha acelerado los últimos pasos del proceso, haciendo que esta sea una campaña más rápida de lo normal.
Precios en el mercado
Una vez la almendra que se está recolectando se lleve al mercado, se sabrá cuál es el precio que se establece en función de la oferta y la demanda. No obstante, ya hay algunas sospechas de las cifras que puede rondar. Por su parte, el agricultor fabarol Alberto Cervera ya piensa que será un precio más bajo que los costes que supone la producción. «Las expectativas no son muy buenas por el momento, pero tenemos que esperar a ver cómo va la cosecha a nivel nacional. Por su parte, a nivel mundial, en California es donde se produce el 80% de este fruto, por lo que en función de cómo les vaya, tendrá más o menos valor la nuestra», explicó Cervera.