El automovilismo nacional está de luto tras conocerse el fallecimiento de Juan Fernández a los 89 años de edad. Nacido en Sabadell en 1930, el veterano piloto fue todo un referente en los deportes del motor en España, especialmente en el automovilismo de montaña.
Fue diez veces campeón de España de esta modalidad y diecisiete de Cataluña, además de dos veces Campeón de Europa en los años 1973 y 1974. También fue campeón de España de rallyes en tres oportunidades y logró tres títulos del nacional de velocidad en circuito en 1967, 1983 y 1986. Estuvo muy unido a Alcañiz y a sus carreras en el circuito urbano del Guadalope disputando el Gran Premio Ciudad de Alcañiz los años 1967,1969, 1970, 1983, 1984, 1986 y 1987 consiguiendo numerosos triunfos o puestos de honor a los mandos de los Porsche Carrera 6 o con el Porsche 908.
Pero sin lugar a dudas lo que ha quedado para el recuerdo de todos los aficionados fue que en 1984 al volante de una barqueta Osella BMW -conocida como «Danone» por su rotulación publicitaria- estableció el récord de vuelta rápida al trazado urbano de 3.900 metros parando el cronómetro en un tiempo de 1»33»»67 a una media de 142, 299 km/h. alcanzando puntas de velocidad de 240 km/h. El hecho aconteció en el transcurso de la carrera del campeonato abierto que ganó su pupilo Fermín Vélez que compitió con una barqueta Lola BMW finalizando Fernández en segunda posición. Un récord que jamás ha sido batido.
De su calidad humana y deportiva dejó constancia tanto pilotando como también en el momento en el que se bajaba del coche. Los aficionados que le vieron competir lo tenían como un ídolo y así se lo transmitían siempre que regresaba a Alcañiz. Precisamente una de sus últimas apariciones por la capital bajoaragonesa fue en 2011 cuando tuvo el honor de ser el pregonero de las Fiestas de septiembre.