La crisis del coronavirus ha hecho que muchas farmacias rurales se conviertan en la única referencia sanitaria presencial en los pueblos de la España vaciada. Con el cierre de consultorios los farmacéuticos rurales han sido un sustento fundamental para «atender y asesorar» a la población.
Han estado en primera línea durante esta crisis y lo seguirán haciendo de cara al complejo periodo de desescalada. Los profesionales del medio rural siguen sin contar con los recursos suficientes, los demandados materiales de protección que van llegando «a cuentagotas«. «Esta ha sido una reivindicación que hemos hecho desde el principio de la pandemia, de que estamos ahí con un riesgo que se asume por la naturaleza de nuestra profesión, pero no por ello tienen que dejarnos en segunda fila«, ha explicado Rogelio Giner, farmacéutico en la única oficina de Oliete que atiende a unos 400 vecinos de la localidad. «Desde el Colegio de Farmacéuticos se ha suministrado a todas las oficinas de farmacia y todos sus empleados una mascarilla y pantalla de protección, es lo que se ha pedido a nivel de nuestros recursos», ha matizado.
A pesar de todo siente que su labor «es muy gratificante». «Estamos para lo que estamos, dar el medicamento, dar el servicio a la población, informar y asesorar. Tampoco vamos al pie de la letra fijándonos en los costes, importa más dar la tranquilidad de las personas que para nosotros son de la familia», ha destacado. Y es que en todo este tiempo esta farmacia rural, como tantas otras, ha sido un factor de contención del «miedo» y la «ansiedad». «A menudo ha sido el filtro hacia la atención primaria. Desde aquí hemos intentado dar soluciones a todas las personas, aconsejándoles, llamando al médico titular para que hable con la persona en cuestión, más o menos hemos hecho de intermediación entre la angustia y la solución«.
Para este farmacéutico continuar con esta encomiable labor es «la mayor recompensa». «Los reconocimientos no son la finalidad. Nos importan las personas con las que convivimos. Somos parte de la solución y siempre estaremos ahí».
A día de hoy Oliete no registra ningún caso de Covid-19 lo que le da «mayor tranquilidad» a este farmacéutico que aplaude el «comportamiento ejemplar de sus vecinos». «Además de suerte, la gente ha respondido fenomenal. Desde el primer momento se han seguido todas las pautas y desde la farmacia las dudas se han aclarado.»
Poca viabilidad económica
Según datos del Colegio de Farmacéuticos de Teruel, la provincia cuenta con 105 oficinas de farmacia. Casi la mitad de estos establecimientos están situados en poblaciones de menos de 500 habitantes. El 19% de las farmacias se encuentran en una situación de «viabilidad comprometida económicamente». «Están dando el servicio en esas poblaciones con una situación comprometida, por lo que la situación siempre es complicada en la farmacia rural», ha destacado María José Villafranca, presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Teruel.
Las farmacias rurales atienden a una población mayoritariamente envejecida, donde los ingresos casi en exclusiva provienen del medicamento. «No pueden obtener ingresos de productos de parafarmacia o cosmética que sí se pueden obtener en la ciudad o en los pueblos más grandes. A esto tenemos que añadir las continuas bajadas de medicamentos que el Gobierno estipula como medida de contención del gasto sanitario», ha destacado.
Con la regularización del precio de las mascarillas muchas farmacias han tenido que asumir la venta a pérdidas. También han tenido que afrontar la especulación de precios para productos muy demandados y a menudo inaccesibles, como es el caso de termómetros, guantes, o geles desinfectantes. «Para nosotros la finalidad no es ni ganar ni perder, en definitiva estar a cero entre la compra del distribuidor y la venta al público es lo que se prima. Ni ganamos ni dejamos de perder, nos importa dar el servicio y dar la tranquilidad a la personas que para nosotros son de la familia», ha concluido Rogelio Giner.
Desde el Colegio reivindican la importancia del servicio de las farmacias que se ha estado dando a la población durante esta etapa y también las numerosas iniciativas puestas en marcha de cara a implementar medidas de seguridad ante el Covid. «Estamos en primera línea, estamos asumiendo riesgos, llevando medicamentos a domicilio bajo protocolos, hemos conseguido que el paciente no tenga que ir al hospital a por su medicación sino que la pueda recoger en su farmacia evitado los traslados al hospital desde los pueblos», ha destacado la presidenta.
Angeles Pallejà Royo dice
Gracias, por cuidar y tener ese magnífico trato con tod@s personas de Oliete y también con los que vamos