Las gemelas ‘atómicas’, María Pilar y María José Sánchez Alayeto (Zaragoza, 1984), son dos de las jugadoras profesionales de pádel que están participando en el TAU Cerámica Bajo Aragón Challenger Trofeo Alternatic Calanda. Las jugadoras mañas, 15 y 16 en el ranquin mundial, son dos de las grandes favoritas para alzarse con el triunfo en el cuadro femenino. Hablan sobre su preparación, sobre el competir en casa y sobre las adversidades que están atravesando juntas. Hace cosa de un año se diagnosticó esclerosis múltiple a María Pilar.
¿Cómo es para vosotras el competir en casa, aquí en el Bajo Aragón?
Mª. José: Ya llevábamos unos años sin competir por Aragón. Hace años sí que se celebraba el torneo de Zaragoza. Venir a Calanda es para nosotras como jugar en casa. Estamos con muchísimas ganas e ilusión de realizar un buen torneo en nuestra tierra. .
¿Van a desplazarse familiares y amigos desde Zaragoza a veros?
Mª. Pilar: Sí, van a venir familiares nuestros e intentaremos que algún amigo también. Sobre todo esperamos que haya mucho público de la zona y sean uno más con nosotras dentro de la pista.
Han sido tiempos difíciles para vosotras. ¿Cómo habéis afrontado el regreso a la competición?
Mª. Pilar: Es cierto que venimos de unos años un poco adversos. La lesión de hombro, el diagnóstico de mi enfermedad (esclerosis múltiple)… Nos hemos ido reponiendo a todos esos baches y lo bueno es que no hemos caído nunca. Es difícil estar arriba con tantas dificultades, lo hemos logrado y seguimos siendo competitivas.
¿Creéis que es necesario darle mayor visibilidad a la esclerosis?
Mª. Pilar: Sí, al igual que otras muchas enfermedades. Está un poco estigmatizada. Es verdad que tenemos nuestras dificultades en el día a día pero hay que ir hacia adelante, ser positivos. En cierta medida se puede vivir con normalidad.
María José, ¿qué puedes contarnos sobre tu hermana?
Mapi tiene una capacidad de superación admirable. Ya no solo por la enfermedad. Sí que es cierto que en los últimos años se ha acentuado más con la lesión del hombro y el diagnóstico de la enfermedad, que hay que decir fue muy duro para todos. Saber jugar y competir con esa adversidad es de admirar. Esa capacidad de superación es lo que yo destacaría de ella.
¿Y qué destacarías tú de María José, Mapi?
El apoyo incondicional que tengo siempre en ella. Es mi hermana gemela y ese apoyo es todavía mayor que el de cualquier hermano. Como he dicho ya algunas veces, creo que si no fuese con ella ya habría dejado de jugar a pádel.
¿Cómo os organizáis para entrenar?
Mª. José: Depende del momento de la temporada. Los primeros meses, enero o febrero, tenemos mayor acumulación de volumen y de trabajo en pista porque es la época de nuestra pretemporada. Ahora es tiempo de competir en muchos torneos y de apoyarse en esa base que hemos creado. Por ello, actualmente, entrenamos más calidad que cantidad. También cuidamos nuestro estado físico en el fisio y hacemos trabajo psicológico.
¿Es el pádel un deporte con los apoyos suficentes?
Mª. José: El trabajo que venimos haciendo las mujeres ha hecho que se iguale bastante todo con respecto a los hombres. Estamos en el camino correcto pero todavía hay que seguir avanzando y es algo que debemos hacer todos juntos.