El paro coincide con la conocida 'Operación retorno' de las vacaciones de muchos vecinos, y tiene lugar el 30 de agosto y 1 de septiembre
Algunas localidades de las comarcas del Bajo Aragón-Caspe y el Bajo Martín se van a ver afectadas por la huelga nacional de Renfe que va a tener lugar durante la jornada de este viernes, 30 de agosto, y el próximo domingo, 1 de septiembre.
Los paros coinciden con la llamada 'Operación retorno' de las vacaciones de los vecinos del territorio. Muchos de ellos optan por volver en transportes públicos como el autobús o el tren, y tendrán que tener en cuenta estas afecciones. Los paros tendrán lugar entre las 12.00 y las 16.00 y las 20.00 y 24.00 de ambos días.
En la Ciudad del Compromiso, por la que pasan trenes dirección Zaragoza y Barcelona, habrá servicios mínimos desde el viernes y hasta el domingo. La estación de Caspe es utilizada por todos los habitantes de la Comarca del Bajo Aragón/Caspe que la utilizan de manera habitual.
Lo mismo ocurrirá en el Bajo Martín, para los trenes que pasen por La Puebla de Híjar y Samper de Calanda. Todas estas líneas que se conectan no contarán con el tren que pasa a las 20.15 de Zaragoza, con destino Mora La Nova.
Para más información y conocer casos más concretos, los usuarios pueden acceder a la página de Renfe o llamar a Atención al Cliente de la empresa.
Reivindicaciones
Las reivindicaciones de los miles de trabajadores de Renfe de todo el país se recogen y sostienen en el lema «Defensa del ferrocarril público y social». Lo que piden es un aumento considerable de su personal y una negociación «sin imposiciones» de reducción de jornadas para conciliar su vida familiar y privada.
«Uno de los principales motivos de estas movilizaciones son el aumento del nivel de contratación para mitigar la falta de plantilla existente en todas las áreas de Renfe, lo cual está repercutiendo negativamente en el servicio», explica Benjamín Casanova, ferroviario miembro de la Confederación General de Trabajadores (CGT), la cual ha convocado la huelga.
«Los viajeros se ven afectados por la falta de personal, de taquillas, limitación de horario de apertura, falta de atención e inseguridad en muchas estaciones totalmente cerradas», continúa Casanova.
Muchos de los usuarios, por su parte, lamentan las afecciones aunque están de acuerdo con la huelga. «Esta es una línea muy precaria, aunque considero que es importante que siga llegando el tren al medio rural», opina Laura Fillola, usuaria habitual del tren en Caspe. «Seguramente será necesaria esta huelga, pero no me parece correcto que hagan huelga durante el periodo de regreso de vacaciones, que es cuando más gente utiliza este servicio».
Y este periodo es exactamente el idóneo según los trabajadores, al ser el momento en el que los viajeros y clientes van a notar más la necesidad de tener un servicio de calidad.
Esta falta de garantías de seguridad para quien viaja, explican, se convierte en temeridad con la gran cantidad de trenes que van sin interventor. Además de quedarse los viajeros desprotegidos en caso de incidencia, se suma la merma económica de la empresa por la falta de personal para prestar un servicio «público y de calidad».
Llamada al Ministerio de Fomento
Desde CGT denuncian que ante las necesarias mejoras en el ferrocarril convencional y las necesidades de personal, lo cual conoce el actual Ministro de Fomento, reconociéndolo públicamente, «se intenta parchear pasando militares a Renfe, por acuerdos interministeriales, como un atajo totalmente insuficiente y ante la necesaria convocatoria de empleo público abierto a toda la ciudadanía».
Por otro lado, la imposición por parte de la empresa de la reducción de la jornada laboral, publicado en el BOE el 4 de julio del año pasado, nos ha llevado también a la movilización como única salida. La falta de diálogo y la imposición es la que según CGT «les ha llevado a convocar 4 jornadas de paros». «Es su responsabilidad las consecuencias que acarrea», explican. «El silencio por parte de la Dirección de Renfe a negociar unida al autoritarismo e intransigencia por parte de la empresa no hacen sino hacernos ver que están más preocupados en mantener su estatus ante las condiciones laborales de los trabajadores y el bienestar de los usuarios».
Consideran que los Servicios Mínimos impuestos por Fomento son «abusivos y limitan el Derecho de Huelga». El porcentaje para los trenes AVE es del 78%, cercanías entre el 75% y 50%, y trenes de Media Distancia el 65%.
Se trata de la 3º y 4º jornada de paros todo el país. Ya ha habido paros similares los pasados 1 y 15 de agosto. Los trabajadores, y también usuarios, esperan que los de este fin de semana sean los últimos.