Uno de los taludes se vino abajo y provocó la caída de varias rocas encima de la nueva calzada a 2 meses de su inauguración
Las obras del tramo de la N-232 entre Ráfales y La Pobla de Alcolea en Castellón registran un nuevo incidente. Un talud de una de las trincheras por las que discurre la nueva plataforma del vial carretero sufrió hace varias semanas un desprendimiento que provocó la caída de varias rocas sobre la nueva plataforma de la carretera.
El desprendimiento se produjo en las proximidades del cruce de La Cerollera, a una altura considerable en la parte más alta del talud, que está escalonado. Las rocas y la tierra arcillosa cayeron encima del vial que había sido recientemente sometido a las labores finales de asfaltado. Durante estos días la calzada ha sido despejada y continúan los trabajos -aparentemente en fase final- de afianzamiento y estabilización en el talud afectado. Para ello se está procediendo a sujetar y estabilizar el muro con hormigón a través de un camión con grúa, cuya actuación es evidente durante estos días.
La causa, a falta de que Fomento confirme el origen de la incidencia, podría estar en la verticalidad y elevada pendiente del murallón, unido a la inestabilidad del terreno. Los terrenos arcillosos sobre los que discurre gran parte del tramo carretero son susceptibles a este tipo de incidencias geológicas. Cabe recordar que otro talud del túnel de La Consolación tuvo que ser reparado tras venirse abajo después de un temporal de nieve. De igual modo, todavía no se ha corregido el desplazamiento que sufrió recientemente el nuevo viaducto de San Bernardo tras un excesivo asentamiento de los terrenos sobre los que descansa el flanco Sur de dicho viaducto.
Por el momento Fomento mantiene la apertura del tramo carretero para mediados o finales de agosto. Pese a las últimas incidencias que han trascendido, el resto de tramo se encuentra ya muy avanzado. La plataforma de asfalto está prácticamente terminada en buena parte de los 14,9 kilómetros. Asimismo las otras tres grandes infraestructuras con las que cuenta el tramo carretero están prácticamente finalizadas. Se trata del Viaducto de la Val de Luna y los túneles de Monroyo y La Consolación.
Sin plazos para la A-68
Respecto al avance de la A-68, el Senado aprobó una enmienda a los presupuestos presentada por el Par por la que el presupuesto para el tramo El Burgo-Valdealgorfa pasa de los iniciales 1,5 millones a 9 millones de euros.
Sin embargo continúa sin desbloquearse el informe de impacto ambiental y mientras tanto el tráfico entre Zaragoza y el Bajo Aragón Histórico no para de crecer año tras año. Tras unos años de considerable bajón en los desplazamientos de miles de vehículos con destino a la costa mediterránea y la una drástica reducción del volumen de camiones y vehículos pesados debido a la crisis, en los últimos meses se observa un importante aumento del tráfico en la vía.