La CHE y los Ministerios de Defensa y Fomento deben elegir la solución al problema
Casi un mes llevan los vecinos de la urbanización Playas de Chacón de Caspe sin agua en sus cañerías a causa del bajo nivel del embalse de Mequinenza. Toda esta zona se está viendo gravemente afectada por la sequía, que ya comienza a notarse en los alrededores del río, donde queda un pequeño hilo de agua de un par de metros, donde antes el Ebro ocupaba casi un kilómetro de ancho. Actualmente, más de cien personas que viven en esta zona, a pocos kilómetros de la Ciudad del Compromiso, se ven obligados a utilizar agua embotellada y a aprovechar las pocas horas de las que les abastecen los Bomberos de Caspe cada día. Los ingenieros del regimiento de Pontoneros, que ya han estudiado el problema, aseguran que existe una solución a corto plazo, aunque lo ideal sería construir un azud, según los propios vecinos.
«Solamente tenemos un par de horas por la mañana para ducharnos, limpiar, lo básico», explica José García, uno de los afectados. Junto a su esposa, llevan acudiendo a la urbanización desde 1978. «Nunca habíamos visto algo igual, es intolerable y no podemos seguir así».
«Venimos aquí cada año a disfrutar del verano y a olvidarnos de las preocupaciones, y en esta ocasión ha sido todo lo contrario», comenta la mujer de José, Araceli. «Contando con unas pocas horas de agua corriente no se puede vivir, ni hacer nada».
Varios efectivos del Parque de Bomberos de Caspe se acercan cada día, a primera hora, para abastecer a la zona afectada con más de 24.000 litros de agua. «Es insuficiente, a partir de las diez de la mañana ya se ha acabado el agua, y tenemos que utilizar la que tenemos en cada casa embotellada o almacenada, hay mucha crispación entre los vecinos», asegura el presidente de la urbanización, Luis Ignacio Tapia. «La parte positiva de todo esto es la ayuda que hemos recibido tanto del consistorio caspolino, como de bomberos, como de la DPZ».
Primeras soluciones
El regimiento de Pontoneros estuvo estudiando el problema en el lugar a principios de septiembre gracias a una petición del Ayuntamiento de Caspe. «Nos han dicho que la única solución pasa por la limpieza y el mantenimiento de las tuberías, que están ahora llenas de fango y limo, sin embargo, esto no soluciona el problema a largo plazo», asegura el presidente.
El regimiento no puede acceder al río para realizar sus tareas con unas condiciones de seguridad necesarias y, por ello, está esperando órdenes superiores del Ministerio de Defensa o de Fomento, además de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) como intermediaria. Instituciones que, hasta día de hoy, no se han pronunciado.
«Lo que buscamos los vecinos es una solución de futuro, que pasaría por la construcción de un azud, para que la situación no vuelva a repetirse», afirma Tapia. La previsión a corto plazo no es optimista para los habitantes de Playas de Chacón, ya que la sequía continúa, y solamente pueden esperar a que se les dé una respuesta desde la CHE o desde el Gobierno de España para que tomen una decisión definitiva, o que vuelvan las lluvias.
Óscar dice
Esta el Ebro como para hacer trasvase.
Esperemos k algún experto, no enchufado, comience a comportarse como experto y transmita a las autoridades correspondientes, la verdad del Ebro
Jesus dice
Es una vergüenza que en los tiempos qué estamos vivamos una situación de este tipo, nosotros un país que nos desvivimos por ayudar a otros.
,