Desde hace unas semanas Gerardo Oliver– representante de la empresa Maderas Oliver Sorribas de Cantavieja-, ocupa la presidencia de la Asociación Provincial de la Madera de Teruel, tras la renovación del Comité Ejecutivo el pasado 2 de diciembre. Fomentar la propia asociación entre las empresas del sector, incentivar el asociacionismo y la participación o promover la formación en materia forestal, son algunos de los objetivos que se marca el nuevo presidente para un sector «estratégico» en el asentamiento de la población en el medio rural, pero que en los últimos años ha sufrido una importante reducción de mano de obra.
¿Qué supone esta nueva etapa para la asociación y cuáles son sus principales retos desde la presidencia?
En los cerca de 30 años de actividad de la asociación me propongo dar continuidad a la labor de mi antecesor, Emilio Anadón, además de intentar potenciar la importancia del sector, fundamental para la provincia. Hay una inclusión evidente de toda la segunda transformación en el sector, que engloba la fabricación de muebles, carpintería y comercialización de la madera ya transformada, lo que permite que seamos más fuertes. Hemos ampliado por tanto la participación de un importante subsector de la industria de la madera de la provincia.
¿Cuál es la situación que atraviesa el sector en la actualidad?
En el sector en este momento, en el caso de la primera transformación de la madera, hemos tenido una época en la que ha habido un aumento considerable de demanda en el requerimiento de las materias primas. En general es un sector que por las crisis vividas se ha quedado en muy pocas empresas. Antiguamente estábamos sobre medio centenar de aserraderos en toda la provincia de Teruel y en la actualidad no superamos la decena. El número de empresas ha ido muy a menos lamentablemente.
¿Qué es lo que necesita potenciar el sector de la madera?
La coyuntura actual nos hace ver que es un sector que tiene potencia y que está generando empleo y el consiguiente asentamiento de población en el medio rural. Creemos que es un sector estratégico para la provincia. Una de nuestras principales líneas de trabajo es llevar a cabo una buena labor medioambiental. Al final nosotros ayudamos en la limpieza de montes y todo lo que ello conlleva. Es necesario que el sector de la madera deje de tener una mala imagen y deje de estar criminalizado. Los aprovechamientos forestales que hacemos se realizan de forma sostenible y legal con todos los procedimientos que marcan las Administraciones competentes. Son trabajos positivos para el terreno, finalmente estas empresas son gestoras del medio rural y medioambiental.
¿Cuántas empresas están adscritas a la asociación provincial y qué relevancia tiene el sector bajoaragonés en el sector de la madera?
Contamos con empresas que pueden abordar todos los procesos de la madera desde la primera a la última transformación (rematantes, fabricantes, carpinteros etc.). Estamos en torno a medio centenar de empresas en toda la provincia de Teruel dedicadas a la primera o segunda transformación. En el territorio bajoaragonés algunos ejemplos son Alcomobi en Alcorisa, empresa de fabricación de muebles; o Maderas Casas, empresa de distribución de madera sobre todo a carpinteros; también está Maderas Ariño en Calanda, fabricante de pallets, o el mismo Aserradero de madera Cantavieja y fabricante de pellets. Son algunas de las empresas que tienen peso dentro del territorio. Lo bueno que tenemos en la provincia es que al final el sector está muy diversificado y tocamos todos los procesos de la madera. Desde la tala de la madera en el monte hasta el final, es decir, hasta la fabricación de los muebles que tenemos en nuestras casas.
¿Qué características tiene el tejido empresarial de la provincia en este sector en cuanto al número de trabajadores?
La empresa más grande que tenemos en el sector desde luego es Finsa (Cella) que oscila entre los 300-400 trabajadores. El resto son empresas familiares que pueden manejar 20, 15,10 o 5 puestos de trabajo, dependiendo de cada una. Si ampliamos el espectro hacia el sector de la carpintería también hay muchos autónomos, a los cuales de alguna forma representamos desde la asociación. Nuestro sector no deja de ser al final como el agrícola o el ganadero. Se transmite de padres a hijos y no suele haber empresas de nueva generación, es por eso que las empresas que ya existimos nos tenemos que adaptar a los nuevos tiempos.
¿Qué tipos de madera se producen, se procesan o se consumen en Teruel?
En la provincia predomina el chopo y el pino. El chopo es un tipo de cultivo, se planta para cortar. El pino se genera de forma silvestre, es una riqueza que tenemos en varias partes de la provincia como Sierra de Gúdar, Maestrazgo o Bajo Aragón… En el caso del pino si no trabajamos esta madera se perdería el recurso, porque hay que ir cortando para que los montes sean productivos. De lo contrario se quedaría una zona frondosa que daría lugar a mucho riesgo de incendio y sería poco transitable. El pino se trabaja básicamente en los aserraderos mientras que el chopo tiene otro proceso, se utiliza para chapa o laminado.
¿Es necesario ampliar los aprovechamientos forestales para hacer crecer los recursos disponibles?
Es una de las peticiones a la Administración. Vemos que incluso se podría sacar algo más porque la masa forestal está ampliando su superficie por lo que sería bueno contar con más aprovechamientos. Aunque en estos momentos creo que tenemos suficientes recursos, es importante que no vaya a menos.
¿Ha afectado la falta de mano de obra o de suministros al sector de la madera?
En el último tiempo ha habido una mayor demanda de materias primas y las empresas han aumentado su trabajo en este sentido para poder cubrir la demanda de otros sectores como es el caso de la construcción. Es verdad que desde hace muchos años padecemos una ausencia de mano de obra en nuestros trabajos. Son oficios que antiguamente realizaba mucha gente en las zonas forestales y ahora no hay quien se dedique a esto. Desde la asociación queremos hacer un llamamiento a las administraciones en retos tan importantes como la promoción de la formación en materia forestal. También hacemos un llamamiento al posible personal, que vean que este es un trabajo que dista mucho de lo que era antiguamente ya que ha evolucionado de acuerdo a los avances tecnológicos. Ya no es tan peligroso ni tan pesado.
¿Cómo es la relación con el Gobierno de Aragón en cuanto a las reivindicaciones del sector?
Administraciones y empresas vamos de la mano. Ya se hizo un trabajo de contacto y diálogo con el Gobierno de Aragón en la anterior etapa, creo que al final nuestras demandas deben ser consensuadas con la Administración, que tiene que escucharlas en la medida de lo posible. Por ejemplo en el proceso de primera transformación hay que tener en cuenta que el gestor del monte es medio ambiente. Todo nuestro trabajo debe ser consensuado con el departamento en este caso. En otros procesos de la madera tenemos que tener contacto con Industria… En definitiva es importante recibir el apoyo necesario para la formación de personal, gestión forestal, o la parte pedagógica para que la sociedad entienda que tenemos un potencial en la provincia que podemos y debemos explotar. Se trata de recursos endógenos muy valiosos.
maestrazgo dice
12 parques eólicos van proyectados en las sierras de Mosqueruela, Cantavieja, Iglesuela y Fortanete dentro de esta masa forestal que hay entre estos pueblos, con sus respectivas líneas de evacuación eléctrica que atraviesan estos montes y subestaciones eléctricas, y el INAGA sin levantar la mano para parar esto; ya veras el recurso de la madera donde va a ir después de que se levanten estos parques
Uno del maestrazgo dice
A los señores de forestalia les interesa muy mucho las zonas de grandes masas forestales por qué no se sabe solo que el interés suelta un tufo y los señores del inaga miran hacia otro lado