Potenciar las actividades en torno a la escalada y reforzar los vínculos del territorio con esta disciplina deportiva. Fue el objetivo de Molinos Roc, la séptima edición de un festival ya consolidado que se celebró el sábado con una jornada llena de actividades y «disfrute». Se saldó con una afluencia de entre 200-250 personas, según momentos, de acuerdo a la organización, que calificó esta nueva edición de «éxito total» y sin ningún tipo de incidente. Para este festival, desde la Asociación Deportiva Molinos Roc se organizó un día entero alrededor de esta disciplina deportiva y se invitó a todo el mundo a participar de una manera u otra.
Unos 30 escaladores participaron en la competición en el rocódromo municipal, en torno a la cual también se ofrecieron otras llamativas propuestas como una tirolina de 50 metros habilitada en el barranco San Nicolás. Además de la escalada, también se pudo practicar slackline, basado en mantener el equilibrio sobre una cinta que se sujeta entre dos puntos de anclaje.
A partir de las 16.00 dio comienzo la escalada popular para pequeños y mayores, para dejar paso posteriormente, a partir de las 18.30, a la competición para los más experimentados.
La jornada, tras la primera fase clasificatoria de la competición, acabó con la fase final en la que las escaladoras y escaladores con mayor puntuación compitieron en una final nocturna para obtener el primer puesto.
Unos 12 voluntarios sacaron adelante todas las actividades programadas. «Esta es la séptima edición y hacemos un balance súper positivo de la iniciativa. La comarca del Maestrazgo tiene un potencial enorme en torno a la escalada. No deja de ser un deporte minoritario, aunque en los últimos años ha crecido un poquito más. Es importante que los pocos escaladores que estamos aquí tratemos de mostrar toda la diversión y lo que hay alrededor de esta práctica para disfrutar de nuestro entorno», señaló Pablo González uno de los organizadores y escalador.
Rocódromo municipal
El rocódromo municipal fue el escenario principal de la competición que experimentó este año un ligero crecimiento de participantes. La animación del público no faltó. «El festival va a más. Cada año va creciendo el llamamiento y se va consolidando el evento. Molinos se vuelca mucho con las actividades. Contamos con la implicación de todo el pueblo además de la gente que viene de fuera», resaltaron desde la organización.
Molinos Roc contó con la colaboración del Ayuntamiento de Molinos y la Comarca del Maestrazgo, además de diferentes empresas locales. Precisamente se habilitaron varios tenderetes abiertos al público asistente con una gran variedad de productos entre cremas para la recuperación de las manos, magneseras o elementos de artesanía.