Las muestras tomadas por la Confederación Hidrográfica del Ebro en el estrecho de Valloré después de que decenas de peces apareciesen muertos a finales del mes de septiembre han determinado que «no hay alteración en el río». Sin embargo, desde la CHE señalan que todavía faltan los resultados de las muestras tomadas por el Gobierno de Aragón.
«Como complemento a las actuaciones citadas, se han inspeccionado y se ha requerido información relativa a las actividades industriales ubicadas aguas arriba del lugar en el que se detectó la mortandad», han explicado desde la Confederación. El suceso ocurrió en el río Guadalope a su paso por Montoro de Mezquita (pedanía de Villarluengo, Comarca del Maestrazgo); concretamente en una zona turística conocida por su ruta de pasarelas. De hecho, fue un visitante quien alertó a las autoridades policiales.
Hasta el estrecho de Valloré se desplazaron efectivos del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil de Teruel, los Agentes de Protección de la Naturaleza de DGA ubicados en la Oficina Comarcal Agroambiental (OCA) de Cantavieja y los agentes medioambientales de la CHE. Se recogieron muestras del agua, del terreno y de los especímenes muertos. Entre las especies afectadas se encontraban la trucha autóctona, la madrilla y el barbo de montaña.
Ruralillo dice
Mas arriba de Montoro en la zona de Boca Infierno también aparecieron y con un color del agua extraño, tirando a verdoso sucio.