El déficit de agua se acentúa y los bomberos actúan de urgencia para asegurar el suministro de todos los vecinos
Aguaviva está cada vez más cerca de resolver su problema con el agua. Desde noviembre bombean agua de un pozo subterráneo por culpa del vertido de lodos al Guadalope, que hizo imposible recoger el agua del azud de Abenfigo, y los últimos sondeos del futuro pozo que dará suministro a la localidad han dado los resultados esperados. El caudal es suficiente para abastecer a todos los vecinos y el pozo podría estar funcionando antes de que acabe el mes de marzo.
La buena noticia choca con la alerta que esta semana ha llegado hasta Aguaviva. El pozo del que actualmente bombean aguas está en las últimas y en estos momentos se consume más agua de la que se extrae. Por ese motivo, los bomberos de Alcañiz han acudido hasta la localidad para asegurar el suministro. A lo largo de toda la semana los trabajos en la zona del Barranc Ample han funcionado a destajo con el objetivo de dar con el caudal deseado en el pozo que se construye en Aguaviva. «El aforo es estable y tenemos un caudal estabilizado en 10 litros por segundo. Es cierto que esperábamos encontrar 15, pero es un volumen adecuado para nosotros», comentó Aitor Clemente, quien recordó que en el mes de agosto, con el pueblo lleno, Aguaviva consumió una media de ocho litros por segundo.
En este sentido, se siguen dando pasos importantes para la puesta en funcionamiento del pozo. Este jueves se bajó la cota del aforo del acuífero con el objetivo de encontrar un mayor volumen de caudal y está previsto que la próxima semana se comiencen a colocar las tuberías que llevarán el agua del pozo hasta el depósito municipal. «Si conseguimos tener la tubería ensamblada la próxima semana, quizás a la siguiente podríamos comenzar a bombear agua hacia el pueblo», indicó Clemente.
Al mismo tiempo, está previsto que la próxima semana lleguen nuevas piezas de la futura potabilizadora de Aguaviva, cuyo objetivo será limpiar el agua turbia que llega desde el azud de Abenfigo del río Guadalope. Esta opción, secundaria y temporal para el Ayuntamiento, avanza según lo previsto y, si todo marcha sin ninguna complicación, podría entrar en funcionamiento dentro de dos semanas, coincidiendo con la puesta en marcha del pozo.