La consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, «no supo explicar los motivos que llevaron a su departamento a anunciar la supresión de la Unidad de Hospitalización Domiciliaria a los profesionales sanitarios del Hospital de Alcañiz a finales del mes de octubre y que en menos de 24 horas, le llevó a rectificar». Así lo asegura el Partido Popular a través de un comunicado de prensa emitido este viernes.
Además, desde el PP afirman que tuvo que ser su propia portavoz de sanidad, Ana Marín, quien explique estos motivos durante la sesión de control al Ejecutivo que se celebró este viernes. «De los once internistas que tienen en plantilla en el Hospital de Alcañiz, en la actualidad y cuando hablo de actualidad me refiero a aquellos días, sólo hay seis y medio, seis a jornada completa y un internista a media jornada, y no llegan a todo», aclaró la portavoz popular.
Para el grupo popular, no es la primera ocasión que la deficiente planificación del personal sanitario por parte del Salud provoca un empeoramiento en la calidad de la prestación a los ciudadanos de este servicio público básico. La falta crónica de especialistas en determinados centros hospitalarios, el cierre o la reducción de horarios en varios consultorios médicos locales o la saturación en algunas áreas asistenciales como la Atención Primaria constituyen quiebras que, para el PP de Aragón, el Gobierno autonómico ha sido incapaz de solventar.
Según las palabras que la portavoz Marín trasladó a la consejera Repollés, este intento de paralizar la Unidad de Hospitalización a Domicilio del Hospital de Alcañiz no sólo recibió desde el principio el rechazo de los profesionales sanitarios, sino también el de los usuarios de este servicio, de los vecinos e incluso del Ayuntamiento de Alcañiz que tuvo que dictar una declaración institucional como punto extraordinario en un pleno, defendiendo el servicio de hospitalización domiciliaria y pidiendo al Gobierno de Aragón, a sus propios compañeros, que mantuvieran este servicio.
Asimismo, la portavoz popular de Sanidad reivindicó tanto el trabajo de enfermeras y médicos del centro hospitalario alcañizano como su derecho a expresar el rechazo al recorte de este servicio, y criticó a la titular del Departamento de Sanidad y a la gerente de los sectores sanitarios de Teruel y Alcañiz por calificar de «alarmistas» a estos profesionales o atribuirles afirmaciones falsas. «El problema es que usted no escucha a los habitantes Bajo Aragón Histórico, ese es su gran problema», señaló Marín.
Un servicio que funciona
En el año 2015 el Hospital de Alcañiz fue pionero, junto con otro hospital de Zaragoza, en poner en marcha la hospitalización domiciliaria lo que permitió tratar a los pacientes en sus hogares y acortar su estancia en centros hospitalarios. «Se beneficia al enfermo, aportando calidad de vida, humanidad, incluso beneficios a nivel psicológico», asegura Marín. Y es que para la portavoz popular este sistema responde a una fórmula asistencial especialmente indicada para territorios con alta dispersión territorial y con una gran dispersión entre sus municipios. «Quienes conocemos el medio rural sabemos que son personas, normalmente con una elevada edad que viven en pequeños municipios, que necesitan a alguien, de algún vecino que les traslade a Alcañiz», explicó a titular del departamento de Sanidad.