Alcorisa custodia uno de los mayores tesoros de la provincia y más allá como es el Museo de la Escuela de Teruel. Ha sido desde el seno de esta asociación que preside Salvador Berlanga desde donde partió la idea de recaudar fondos para seguir mejorando este espacio que no deja indiferente a ningún visitante. Esa forma de conseguir apoyos ya ha visto la luz y lo ha hecho en forma de libro, una publicación que se presentó de manera oficial en la tarde-noche de este viernes en el Centro Cultural Valero Lecha de Alcorisa. Lleva por título ‘Ecos y voces de infancia. Del blanco y negro al color’ y recoge los relatos de sus etapas de infancia y juventud de casi un centenar de personas.
La primera parte la componen los Ecos, que son 70 relatos que aporta un grupo de escritores, periodistas, personas del mundo de la empresa, del deporte o del espectáculo, entre otros ámbitos. El prólogo lo firma el periodista, escritor y docente Luis Alegre. A partir de ahí, siguen 194 páginas con las historias de Andoni Cedrún, Luisa Gavasa, Javier Zaragoza, Miguel Ángel Tirado ‘Marianico’, Sheila Herrero, Ignacio Martínez de Pisón y un largo etcétera hasta alcanzar los 70.
La segunda parte está construida por 26 Voces. Son 26 alcorisanos y alcorisanas nacidas entre los años 1950 y 1975 que ofrecen sus vivencias con el fin de hacer un relato conjunto del cambio y evolución de la sociedad y la vida en general. El prólogo de esta parte lo escribe el catedrático en Historia Contemporánea Julián Casanova, natural de Valdealgorfa.
Una parte de estas Voces tomaron parte activa en la presentación al salir a leer un fragmento de sus relatos. Berlanga recordó sus tiempos de docente y director del CRIET de Alcorisa para pasar lista y sacar a leer a voluntarios y «pillados sin aviso previo». Todos aceptaron de buen grado y despertaron los aplausos de sus vecinos en el público. Muchos recuerdan «trastadas de niñez», otros a sus maestros y maestras y otros recuerdan cómo era el día detrás del mostrador de la tienda de sus padres. Hay tantas historias como Voces y en todas, lugares en los que sentirse identificado.
De «día grande» calificó el momento el alcalde, Miguel Iranzo, quien dio la bienvenida con unas palabras desde la mesa. Día grande «porque la presentación de un libro siempre lo es«, dijo y destacó la labor de Berlanga y de un pueblo como el de Alcorisa que tiene 55 asociaciones en activo.
Próximas presentaciones
Como se destacó en la presentación, donde las sonrisas afloraron en más de una ocasión, con la edición de la publicación, el nombre de la localidad se proyecta todavía más, ya que la de este viernes fue la primera presentación de muchas que hay en previsión. De momento, las próximas serán en Zaragoza en dos actos abiertos a todo el público que desee asistir. El 11 de noviembre se presentará en el Centro Cultural Universidad y el 16, en el Paraninfo. En ambos actos se venderán ejemplares.
Todo por el Museo de la Escuela de Teruel
La Asociación de Amigos del Museo de la Escuela se encargó de preparar un un escenario acorde a la ocasión con pequeños detalles como juguetes o artículos de escuela, muestra de lo que alberga ese museo. «Hay proyectos, ideas que se han hablado con el ayuntamiento para mejorarlo y darle vida porque un museo es un espacio vivo. Nos gustaría añadir una zona dedicada a la tecnología y seguir ampliando ese legado que empezó con donaciones de más de cien escuelas de toda la provincia que son los objetos que dan forma al espacio, por eso es el museo de Teruel y lo tenemos aquí, en Alcorisa«, dijo Salvador Berlanga en la conversación que se generó junto a Beatriz Severino, periodista de La COMARCA, durante el acto de presentación en el que también se visionaron pequeños vídeos en los que se puso rostro a todas las personas que participan.
Este libro ha salido adelante con el empeño de Berlanga y la Asociación de Amigos del Museo de la Escuela que coedita la obra junto al Instituto de Estudios Turolenses de la Diputación. El Ayuntamiento de Alcorisa y las empresas Maderas Casas y Agropal, también colaboran en que esta obra coral sea una realidad.