Después de las fiestas de julio por Santiago, con la presentación de las Mozas y actos centrados en el barrio de la Estación, este sábado por fin llegó el turno de San Roque en la Puebla de Híjar. Los actos empezaron por la mañana, cuando el calor abrasador no impidió que cientos de poblanos se echaran a la calle para recibir por todo lo grande a sus fiestas patronales. Lo hicieron con el esperado pregón que este año se encargó de realizar Ana Asión, un momento que la joven vivió «con gran emoción y orgullo, aunque tranquila y feliz al ver en la plaza a tantas caras conocidas».
Asión salió con nervios al balcón del Ayuntamiento, pero decidida en que su pregón transmitiera la importancia que temas como la cultura o la educación e incluso las festividades patronales tienen en el mundo rural. De hecho, estas son unas premisas que la joven tiene siempre presente. Prueba de ello es la divulgación que ha realizado de la historia de su pueblo, La Puebla de Híjar. Entre otras cosas, por ejemplo, con el audiovisual ‘El sueño de Ezequiel’, un trabajo con el que documentó las últimas horas del Casino antes de su derribo en la misma plaza que este sábado pregonó. «Poder ser pregonera de tu pueblo es el mayor reconocimiento al que cualquiera puede aspirar. Lo he vivido con tranquilidad y apoyada por mis seres queridos«, dijo.
Su compromiso con el pueblo fue reconocido a lo largo de esta mañana. El Ayuntamiento entregó a Ana aun reconocimiento que avala su labor en el fomento de todos estos valores del mundo rural. El documento le fue unos minutos después del chupinazo en un pequeño acto en el que estuvieron presentes el alcalde, Pedro Bello, todas las mozas, y la atenta y cálida mirada de su familia. Y mientras esto ocurría, la fiesta se desataba en las calles de la localidad. «El 12 de agosto siempre es un día especial para los poblanos. A partir de este momento los demás días son un no parar de disfrutar«, afirmaba Ladis Royo, miembro de la junta directiva de Interpeñas.

La música de la orquesta y la convivencia en las calles se alargó hasta por la tarde, cuando los vecinos de La Puebla volvieron a sacar sus mejores galas para darlo todo en unas divertidas carrozas.