Salvador Berlanga con Eva Defior, Fernando Pérez Valle y Ana Belén Andreu en la presentación de Como esos viejos árboles. / Foto: Javier Vílchez
Defensor a ultranza del Bajo Aragón, el polifacético Salvador Berlanga presentó en Alcañiz su primera novela
Uno de los mayores defensores del Bajo Aragón, maestro, polifacético cantautor y ahora escritor, Salvador Berlanga, presentó este lunes en la sede de la Comarca del Bajo Aragón su primera novela titulada «Como esos viejos árboles». El libro es un homenaje a su tierra y los valores de libertad. Berlanga llenó el salón de plenos de amigos y antiguos alumnos del CRIET de Alcorisa venidos de todo el Bajo Aragón Histórico.
La presentación contó con varias lecturas públicas y terminó como colofón con el canto a la libertad «Somos» de Labordeta, con Berlanga a la guitarra acompañado de la exalumna Carmen José Giner. La vicepresidenta comarcal del Bajo Aragón presentó a Berlanga, la directora del Grupo La COMARCA resumió el contenido de la obra y su valor simbólico para los bajoaragoneses y el coordinador regional de Cruz Roja (olietano y exalumno) puso de relieve el fin solidario de la novela, así como el papel de Berlanga a favor de la educación rural.
¿De qué trata la novela «Como esos viejos árboles»?
La novela describe el encuentro de un grupo de personas de un programa de termalismo social que se encuentran en el Balneario de Ariño. Allí hay dos personajes que no se conocen de nada, uno de Ariño y otro de Albalate, que finalizan teniendo una relación muy especial que les lleva a resolver una historia en el antiguo seminario de Alcorisa. Pero además se van a ver representados otras muchas personas del territorio.
Escribir esta novela, ¿era ya algo que tenía pensado?
Así es. Tenía una historia que contar sobre mis pueblos más queridos, Ariño, Alcorisa y Albalate; aunque es una novela en la que hablo extensamente de nuestro territorio. Es en definitiva un auténtico canto al Bajo Aragón Histórico.

¿Y cuál es el fondo de la publicación?
En ella salen reflejados los temas que más me preocupan como por ejemplo la importancia de la mujer en el sostenimiento del medio rural, la problemática de la despoblación, la importancia de la inmigración que llega a nuestros pueblos. Es una novela muy fácil de leer porque desde el principio me propuse que fuera emotiva, divertida y que sorprenda al lector en algunos momentos, pero que al mismo tiempo haga reflexionar, pero en la que me he negado a matar a alguien en la página 25.
Esta es una novela que habla del territorio, ¿cree que se necesitan otras para darlo a conocer mucho más?
Creo que este territorio necesita de muchas novelas. No solo de realidad, sino también un poco de ficción, para que nos sigan conociendo, para que deseen venir con nosotros, y muchas veces la literatura es un medio que contribuye en la búsqueda de esos objetivos.
Es su primera incursión como escritos en este género, ¿que le ha aportado el haberla escrito?
Era un campo de la literatura en el que tenía ganas de adentrarme desde hacía tiempo. He de reconocer que durante los tres años de trabajo para escribirla me he divertido.
La elección del título, ¿a qué se debe?
El título es el verso suelto de la canción de José Antonio Labordeta «Somos» con lo que también he querido homenajear a una persona a la que admiro, leo y canto con mi grupo Araboas. «Como esos viejos árboles» habla de unas personas mayores que vuelven a su infancia. Me centro en ellos porque son el punto de interés, porque la novela es también un juego de miradas y espejos entre mayores y jóvenes. En definitiva, contiene amor, reivindicación y humor.
Además tiene un fin solidario.
Exacto. Los beneficios de las ventas de la novela se donarán a un programa de Cruz Roja Aragón conocido como «Promoción del éxito escolar» que consiste en ayudar a los educandos en sus refuerzos educativos. Ya vamos por la tercera edición con más de mil libros vendidos, no esperaba semejante apoyo. Me siento emocionado.