Se crearán dos grupos de trabajo: uno sindical, que se reunirá el 12 de marzo, y otro con las empresas mineras
Los sindicatos mineros volvieron a reunirse ayer en Madrid con el secretario de Estado de Energía, Daniel Navia, para abordar los temas de actualidad y de futuro relacionados con el carbón. Para hacerlo de una manera más efectiva y eficiente, se llegó a la conclusión de que lo mejor será crear una mesa de trabajo cuyo objetivo será analizar los retos del presente y futuro de las térmicas españolas. De esta manera, se crearán dos grupos de trabajo: uno formado por los sindicatos y otro por la patronal.
Esta nueva mesa de trabajo se encargará de abordar los problemas actuales de la minería y trabajará para formalizar las líneas generales del nuevo marco de actuación del carbón a partir del año 2019. El secretario de Estado de Energía vio con buenos ojos la idea de crear un nuevo grupo de trabajo, pero también advirtió de que el nuevo Plan del Carbón deberá estar listo en unos tres meses. De esta manera, los sindicatos se han citado dentro de dos semanas para organizar y elegir a los miembros del grupo.
«Se ha decidido crear una mesa de trabajo de tamaño reducido. Hemos acordado que lo ideal sería que fueran cinco personas, que deberán salir de los tres sindicatos del sector (UGT, CCOO y USO Asturias). Nos ha parecido bien, trabajaremos mejor y más rápido», aseguró Antonio Montoyo, representante sindical de Comisiones Obreras en Aragón.
El objetivo es que el nuevo marco de regulación esté listo antes del verano y así evitar problemas del pasado. Cabe recordar que el anterior Plan del Carbón 2013-2018 se acabó aprobando en el mes de octubre del 2013. Ahora, la intención es llegar al próximo año con las bases del nuevo plan bien asentadas. «La prioridad es conseguir que el carbón siga teniendo un peso importante dentro del mix energético y que los planes de reindustrialización sean sólidos. Tenemos que seguir luchando para que la gente de las comarcas no tenga que irse y si no es trabajando en el carbón, que esperemos que sí, se pueda hacer una reindustrialización como dios manda», indicó Francisco Montul, representante sindical de UGT en Aragón.
Para los sindicatos, el nuevo marco regulatorio tiene que seguir defendiendo la presencia del carbón dentro del mix energético, algo imprescindible para asegurar el funcionamiento de las centrales térmicas españolas. «Por el momento las energías renovables no pueden abastecer por sí solas a todo el país y si prescindimos del carbón, el precio de la luz se dispararía», alertó Montoyo.
En este sentido, el representante sindical de CCOO señaló que Daniel Navia les aseguró que el Gobierno de España seguirá negociando con Europa la continuidad del carbón nacional en el mix energético. «No entendemos que a nosotros nos pongan tantas trabas y, sin embargo, sean permisivos con otros países como Alemania, Grecia o Polonia», dijo Montoyo.
La Comisión Europea frena las ayudas
En este sentido, ayer volvieron a llegar malas noticias para el carbón desde Bruselas. La Comisión Europea recordó al Gobierno de España que los estados miembros no están autorizados a conceder ayudas estatales al carbón «con el fin de cumplir las normas medioambientales obligatorias». De este modo, la respuesta europea daba la razón a los eurodiputados de EQUO y Podemos que llevaron ante la Comisión Europea el Real Decreto del Gobierno de España que trata de impedir el cierre de las centrales del carbón en 2020.
La Comisión lo considera «incompatible» con el Acuerdo Climático de París y con la hoja de ruta hacia una economía europea baja en carbono para 2050. De esta manera, Bruselas no ve con buenos ojos las ayudas estatales para que las eléctricas cumplan con las normas medioambientales, por lo que tendrán que ser las propias empresas las que acometan las inversiones necesarias para cumplir las exigencias medioambientales europeas. En caso de no realizar las inversiones, algo que Endesa no parece estar muy por la labor de hacer después de conocer las declaraciones que se filtraron la semana pasada del director general de Generación de la eléctrica, Manuel Morán, las centrales, como sería el caso de la Térmica de Andorra, deberán cerrar en junio de 2020.
En cuanto a este tema, el secretario de Estado de Energía aseguró a los sindicatos que el Gobierno «no ha recibido ninguna notificación oficial» y que solo saben lo que «ha salido por la prensa».
El Real Decreto, todavía sin fecha
Precisamente, el Real Decreto en el que sigue trabajando el Ministerio de Energía sigue siendo una de las grandes esperanzas para la continuidad de las centrales más allá del 2020. En este sentido, el secretario de Estado de Energía explicó ayer a los sindicatos que el documento todavía no tiene fecha de presentación, aunque están muy cerca de poder presentarlo a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), organismo que ya rechazó el documento el pasado año.
El Ministerio ya ha realizado las modificaciones pertinentes y ahora el objetivo es obtener el visto bueno de la CNMV para presentar el Real Decreto como proposición de ley en el Congreso. «Es la principal novedad que nos llevamos. El Gobierno lo quiere aprobar como una Ley y así, evitar que las eléctricas puedan recurrirlo. En cambio, si se aprobara como decreto, se podría alegar y el proceso se podría alargar durante años», explicó Antonio Montoyo. «Para nosotros sería muy importante que lo consiguieran, aunque va a ser complicado. Para lograrlo van a necesitar los apoyos de otros partidos políticos…», indicó Francisco Montull.