Las lluvias han dejado al Sagrado Corazón de Muniesa sin una de sus manos. Esta gran escultura de cinco metros de altura se encuentra en lo alto del campanario de la ermita de Santa Bárbara, situada en la zona más alta de la localidad de las Cuencas Mineras.
Ha sido este domingo por la mañana cuando un vecino de la localidad ha visto el desprendimiento e inmediatamente se ha puesto en contacto con el alcalde, José Luis Iranzo, quien a su vez ha pedido a los operarios del Ayuntamiento que acordonen la zona. «El vecino ha recogido todo lo que se ha desprendido y se lo vamos a entregar al párroco», precisa el primer edil.
