Ante la oleada de robos producida durante la primera mitad de abril en cinco de los seis pueblos del Bajo Aragón-Caspe, tanto los vecinos como la Asociación Unificada de la Guardia Civil en la provincia de Zaragoza reivindican más efectivos para aumentar la seguridad en la zona. Marcial Álvarez, portavoz de AUGC, explica que llevan años denunciando la situación que se da en el medio rural.
¿Falta seguridad en los pueblos del Bajo Aragón-Caspe?
Lo que falta son agentes que puedan dar esta seguridad en el medio rural. Venimos denunciando desde hace tiempo la falta de efectivos que tiene la Guardia Civil, concretamente en la labor de seguridad ciudadana. Es una situación que se da no solo en la provincia, sino en toda la comunidad autónoma. Se ha trasladado a Delegación de Gobierno y a la cadena de mando, pero no se ha dado aún solución. La respuesta efectiva sería aumentar considerablemente las plantillas o, por el contrario, nosotros también defendemos la reorganización de unidades. Habría que concentrar cuarteles y que haya uno por comarca y varios en la comarca central, en función de los ejes que la componen. Llevamos desde hace tiempo denunciando la falta de personal que sufre el medio rural. Además, también pone en riesgo la seguridad del propio agente, porque cuando tiene que hacer una actuación, la unidad que le puede apoyar a lo mejor tarda una hora en llegar.
¿Cuál es la respuesta que han recibido por el momento desde Delegación del Gobierno?
Es cierto que se han aumentado las patrullas de la Guardia Civil, pero son insuficientes. No es que lo diga yo, es que se puede ver y preguntar a cualquier ciudadano del medio rural, donde pasan días sin ver a ningún agente.
¿Las medidas la que nombra en cuanto al aumento de la plantilla o la centralización de los cuarteles solucionarían el problema actual?
El aumento de plantilla sí que es una solución. El problema es que estas son unas plantillas del siglo XIX, por lo que habría que actualizar esa cantidad, pero también reorganizar el funcionamiento, porque la sociedad ha avanzado y la población ha cambiado. Hay que puntualizar también que en muchas ocasiones se establece el número de efectivos por la ratio de habitantes. Pero, en el entorno rural habría que incluir la ratio de extensión. Porque hay que tener en cuenta que la Guardia Civil cubre el 97% del territorio de la Comunidad Autónoma de Aragón y si se tiene solo en cuenta el número de habitantes de cada zona, las áreas despobladas quedarían desprotegidas.
¿A qué se refiere cuando habla de actualizar estas plantillas?
Habría que hacer un estudio de la delincuencia que existe hoy en día, de los habitantes y de la extensión que hay que cubrir. Una vez se tuvieran esos datos, habría que distribuir los efectivos en función de los parámetros resultantes. Estamos viendo que el catálogo está cubierto en poco más del 90%, o sea que falta menos del 10% por completar. Pero, se está viendo que no son suficientes.
En cuanto a la centralización de los cuarteles en las cabeceras comarcales, ¿se seguiría dando buena cobertura a todos los pueblos?
Efectivamente. Hay que tener en cuenta que hoy en día nos trasladamos en vehículos, no vamos a caballo como en el siglo XIX. Por tanto, si concentramos los efectivos se podrán hacer más patrullas y hacer cada cuartel más potente. Entonces, se cubriría todo el territorio. Así, se podrían hacer más rotaciones de los turnos y que todos los horarios estuvieran bien cubiertos.
¿En qué punto está la reivindicación?
Todo depende de los presupuestos, para incorporar a más personal o no. Insisto en que, efectivamente, se están incrementando los efectivos, pero no es la única medida necesaria, porque estamos viendo que las oleadas de robos no solo pasan en esta comarca, está ocurriendo en muchas otras. De hecho, la semana pasada mantuvimos una reunión con el presidente de la Federación y le hemos pedido que se haga una labor didáctica con los alcaldes de las localidades en las que se eliminaría el cuartel por la centralización. Esta es una pequeña solución a medio plazo antes de que se aumenten considerablemente las plantillas. La respuesta definitiva es el aumento de efectivos, porque cuantas más patrullas hay, el índice de delincuencia es menor.
Entre la semana pasada y la anterior, se llevaron a cabo diversos robos en varios pueblos de la comarca del Bajo Aragón Caspe. ¿Ha aumentado la vigilancia en estos pueblos?
Con lo que contamos es con lo que podemos dar el servicio. Los agentes que hay son que pueden salir. Leo que sí tiene que tener en cuenta la sociedad es que no se les deja desamparados. La Guardia Civil sigue trabajando, pero en determinados casos, los agentes tienen que recorrer hasta 100 kilómetros para cubrir las incidencias que les reclaman. Entre eso, y los pocos turnos que hay por falta de efectivos, no se puede dar el mejor servicio.
tanto que defienden el medio rural, está más que abandonado.
las leyes también se tendrían que revisar, que los robos o intentos salen impunes.
es una vergüenza el pasotismo y la dejadez!!! de las leyes ni hablar!!