La Lonja de Alcañiz ocupó un papel importante en la segunda edición de estas Jornadas sobre patrimonio e identidad
Las II Jornadas del Centro de Estudios de Arte del Renacimiento (CEAR) acaban hoy con la sesión «propuestas museológicas para un territorio. Gestión y difusión del Patrimonio». El Auditorio del Palacio Ardid acoge desde el pasado lunes una serie de conferencias y mesas redondas cuyo objetivo principal ha sido ensalzar el rico patrimonio de Alcañiz y El Bajo Aragón y debatir sobre la forma de articular su conservación.
El tema de la última jornada de estudio girará en torno a las diferentes propuestas de musealización. Carmen Morte, directora del CEAR, adelantó que se tratarán las diferentes «alternativas» relacionadas con la colección Quílez Llisterri y también con otros ámbitos que ofrece Alcañiz y que puedan ser objeto de una «musealización integral». Todo ello para que el visitante pueda recorrer los diferentes puntos de interés de la localidad.
Esta segunda edición viene a recoger lo sembrado hace tres años en la I Jornada y ha pretendido crear una conversación sobre el patrimonio y su trascendencia. «Lo importante en estas jornadas es el debate para ver si se puede llegar a alguna conclusión o modos de actuar», subrayó Morte.
En las jornadas han participado 16 profesionales. No obstante, la asistencia de personas interesadas en saber más sobre estas cuestiones no ha sido la esperada. «Nos hubiera gustado que se hubieran implicado también personas de Alcañiz porque es la ciudadanía la que tiene que resolver este patrimonio. La gestión la podemos hacer los profesionales, los poderes políticos, pero si la ciudadanía no responde es difícil», lamentó Morte.
Durante estas jornadas se ha rendido homenaje a Agustín Bustamante García y Joaquim Garriga Riera, dos catedráticos de historia del arte que desde el año 2009 estuvieron muy implicados con el CEAR.
La Lonja de Alcañiz
«Las lonjas de Aragón» fue el tema de la conferencia ofrecida por la Dra. Carmen Gómez Urdáñez, de la Universidad de Zaragoza. En la sesión, que tuvo lugar ayer entre las 12:30 y las 13:10 horas, el edificio de la Lonja alcañizana ocupó un papel destacado. Esta construcción responde a una tipología abierta y data de finales del siglo XIV.
Gómez aseguró que actualmente la Lonja se encuentra descontextualizada por la pérdida de edificios que hubieran ayudado a entender su importancia y el lugar que ocupó dentro de Alcañiz. El paso de la historia o la orografía del entorno son cuestiones que podrían ayudar a comprenderla mejor. «Ha quedado como suelta, cuando de lo que se trata es de lograr entender el conjunto que la rodeaba en su momento», subrayó.
Gómez también trató de explicar la Lonja de Alcañiz en el contexto del resto de edificaciones similares, no solo en Aragón, sino en el resto del territorio español, para comprenderla de una manera más «natural y sencilla». «Si abrimos el foco de la cámara, abrimos el zoom, entonces la vemos más normal. Si nos ponemos a mirarla tan de cerca perdemos la perspectiva», concluyó. La historiadora también apuntó que la palabra «misterio» únicamente esconde «desconocimiento» sobre este edificio.
«Lo que en todo caso aportará una información directa, puntual, importante, serán los que intervengan en esta coyuntura que es la de tocar el edificio». Se refería así a la rehabilitación y reforma previstas en interior de la Lonja.