Las Jornadas de Cultura Íbera ,que cada año organiza la Concejalía de Educación, Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Andorra, Cultura Andorra y la asociación Sedetanos del Cabo, vuelven este fin de semana a la villa minera. Se realizarán actividades entre los días 18 y 19 de junio como visitas guiadas y recreaciones de ritos funerarios.
Las jornadas no tienen nada que ver con la feria Lakuerter, de carácter más festivo y abierta a un gran público, mientras que estas son más didácticas y cercanas. Emilio Gracia, presidente de la Asociación Cultural de los Sedetanos, ha explicado que el objetivo principal de estas jornadas es «dar a conocer la cultura íbera». Las visitas son interactivas y se podrán realizar preguntas a los distintos habitantes del poblado mientras desarrollan sus labores y recrean la vida cotidiana del pueblo íbero.
Sergio Ginés, que interpreta a Sergus, el guardián del pueblo, contaba que para estas jornadas han estado dos semanas con los preparativos, pero que, «después de las restricciones, se ha preparado todo con mucha ilusión«. Este año vecinos de Edeta, Sagunto y Zaragoza visitará también el poblado ataviados como íberos en un fin de semana de convivencia.
Las actividades se inician el sábado a las 10.00 con la apertura del poblado, que tendrá entrada libre a lo largo del fin de semana y se podrá disfrutar de la demostración de distintos oficios por diferentes zonas del poblado, además se mostrará a los visitantes como se elaboran piezas cerámicas y la posterior cocción de las mismas en un horno de barro. A las 11.00 se ha programado una visita guiada teatralizada donde se representará un rito funerario tal y como lo realizaban los antepasados íberos que poblaban la zona.
Por la tarde el poblado permanecerá abierto de 17.00 a 20.00 para que aquellos que no puedan asistir por la mañana puedan ver las demostraciones de los oficios y de la elaboración de las piezas de barro. Al anochecer, a las 21:30, se ha preparado una visita guiada nocturna en la que también se contará con una representación teatralizada por parte de los miembros de la asociación de Sedetanos del Cabo de Andorra, que con sus indumentarias íberas mostrarán como se vivía en la época íbera.
El domingo por la mañana el Parque Arqueológico de El Cabo, volverá a abrirse al público a partir de las 10.00 de la mañana. Los actos programados para el sábado por la mañana se repetirán el domingo, siendo la visita guiada a las 12.00 del medio día, para dar oportunidad a más visitantes a disfrutar de este enclave histórico.
El acceso al poblado contará con entrada gratuita pero, como novedad, se deberá reservar plaza para las visitas guiadas y la visita nocturna en para poder controlar el aforo, ya que será limitado.
Los organizadores de las Jornadas de Cultura Íbera animan a asistir a esta experiencia, tanto a adultos como a niños, pudiendo acudir vestidos de iberos y participar en las actividades.
Esta actividad plantea una doble finalidad, poner en valor el patrimonio artístico de la localidad y a su vez, ilustrar y entretener a los visitantes mediante dramatizaciones con personajes ajustados a la época íbera ofreciendo así una experiencia única de la mano de actores y actrices amateurs, con música en directo e iluminación específica creada para embellecer el recinto.
El poblado de El Cabo, un yacimiento con mucha historia
Los sedetanos,’habitantes de Sedeis’ ( fueron un pueblo íbero del siglo III a. C. situado en el valle medio del Ebro. Están también vinculados al poblado de Azaila. El poblado de El Cabo data del Periodo del Bronce de la Prehistoria reciente. Fue excavado por completo en 1999 por José Antonio Benavente y Fernando Galve.
La ubicación inicial del poblado era otra pero los restos significativos más importantes se trasladaron al Parque de San Macario. El Parque reproduce un poblado ibérico fortificado y de calle constituido por unas 50 pequeñas viviendas dispuestas en dos alineaciones paralelas en torno a dicha calle. Desde hace años se han intensificado las laborales de reconstrucción y ha pasado a ser otro punto turístico de interés en la localidad. De hecho, el proyecto de excavación, traslado y reconstrucción en un emplazamiento diferente al original de un poblado ibérico es pionero en España.
Campamentos de trabajo para la reconstrucción del poblado
Durante el verano el poblado recibe a chicos y chicas de todos lugares de España que acuden como voluntarios para contribuir a la reconstrucción del mismo y realizar diversos talleres sobre cultura íbera y fabricación de ladrillos de adobe. En 2018 los voluntarios del campo de trabajo levantaron el templo de la sacerdotisa y en 2019 la casa del herrero. Próximamente se prevé la recreación de una vivienda edificada como mandaban los cánones hace 2.500 años en la que podrá pasarse la noche. Es algo que el Consorcio Patrimonio Ibérico de Aragón y el Ayuntamiento de Andorra tienen planeado.