El I Festival de Cultura Urbana de Alcañiz ha servido para mostrar, entre otras cosas, el talento que atesora la ciudad en esta modalidad. Uno de esos talentos se parapeta en el nombre de Atlantes del Free, una agrupación «abierta y de colegas» que sobre el escenario hizo lo que mejor sabe: rapear. Llevan ya unos años en estas lides, aprendiendo y puliendo su trabajo como guardianes de la palabra tanto escrita como cantada y, desde luego, rimada.
Este grupo de alcañizanos tiene en los parques y las calles sus lugares de encuentro para rimar e improvisar. Y es eso, el fruto de estas quedadas, lo que llevaron al escenario del teatro dentro del primer Festival de Cultura Urbana que organizó el Ayuntamiento y que comenzó el viernes con la apertura de un punto de BookCrosing en el colegio Juan Sobrarias. «Poder mostrar a la gente lo que hacemos es un sueño hecho realidad. Estar aquí es un punto de inflexión, vamos a seguir con proyectos y, desde luego, todo aquel que se quiera sumar es bienvenido, no somos una asociación oficial sólo un grupo de colegas», dijeron antes de saltar a escena.
Los de mayor edad tienen 18 años y ya buscan «nuevas generaciones» para asegurar una disciplina que vive un buen momento. Ellos mismos se preocupan de buscar esos talentos, principalmente a través de su Instagram donde van informando de sus pasos y de los torneos que organizan. Uno de ellos es «Promises», pensado para dar la oportunidad a los más jóvenes. De hecho, algunas de las nuevas incorporaciones de Atlantes del Free se dio así. «Lo que más nos gusta es juntarnos con más gente y hemos hecho cosas con Alcorisa o Zaragoza. Nos gusta conocernos, rimar juntos, hacer amistad y seguir aprendiendo», dijeron. «Estamos muy contentos de tener la oportunidad para poder transmitir lo que es el rap, que siempre ha sido algo muy tabú y no es nada malo. Venimos a demostrar que somos chavales normales y que nos gusta el rap cada uno con su corriente: unos vienen con sus canciones y otros, a improvisar», reflexionaron.
En Alcañiz lo dieron todo y en dos modalidades con la presentación de Markus Monteiro, alcañizano veterano en los escenarios. El público pudo disfrutar de las canciones de Mario Pellicer y Juan Antonio Lop, que ya tienen sus temas en plataformas, y de las batallas entre parejas de los Atlantes. Duelos de rimas improvisadas en el momento, de estilo libre pero argumentadas.
El baile: exhibición de lujo
La primera parte del festival fue una demostración de cultura urbana en la modalidad de baile con nombres de peso en el sector. Las compañías aragonesas Circle of Trust, Peace of mind y la pareja formada por Pitu y Samuel dejaron a la gente bailando y animando desde las butacas ante semejante despliegue.