Andorra retornará a sus orígenes en el siglo II a.C. y se convertirá en un auténtico poblado íbero este fin de semana; los días 8, 9 y 10 de noviembre. Lakuerter Íbera, que nació con el objetivo de poner en valor el pasado andorrano y dinamizar el comercio en un mes «flojo» para el sector, cumple ya su XI edición como una de las fiestas más destacadas en el calendario local.
Más de 2.000 personas se repartirán entre once Clanes, cada uno con su propia organización interna (príncipe, sacerdotisa, sabio, guerreros, agricultores…), y el grupo de Romanos. «Cada clan está representando por un animal emblemático -culebra, cuervo, ciervo, cabra, búho, buitre, caballo, jabalí, lince, lobo y toro- y se encarga de montar su decoración de la manera más versátil posible», ha explicado el concejal de Ferias y Festejos del Ayuntamiento de Andorra, Joaquín Bielsa.
Son estos grupos los que dan forma a la programación del recinto íbero y se encargan de las actividades que complementan el mercado. Organizan desde talleres de cerámica ibérica hasta asados populares. «Prácticamente todo el pueblo se traslada al recinto de clanes y hace vida durante estos tres días. Estamos allí disfrutando de las actividades y de la comida y bebida», ha señalado Bielsa.
El acto de apertura será este viernes a las 18.00, sin embargo ya «están a tope preparando la feria para que la cita sea perfecta». El concejal de Festejos ha subrayado todas las cosas «chulas e importantes» que hay y espera a «todos los vecinos y no tan vecinos que quieran ir con los brazos abiertos».
Para ir haciendo ambiente les recomiendo la lectura de Una oveja para Trebopala de SB Francisco. Seguro que disfrutarán como nunca viéndose trasladados a esa época fascinante y saber lo que ocurrió de la forma más amena.