«Estoy muy orgullosa de haber hecho esta película en Aragón, con gente de Aragón y que sea aragonesa. Me quiero acordar del servicio de catering, alojamientos y tantos servicios que empleamos… Porque eso es hacer cine: crear industria. La creamos y me alegro de que haya sido en mi tierra». Pilar Palomero iniciaba así su último turno de palabra en la gala de los Premios Simón del Cine Aragonés. Seis reconocimientos recibió la película y cuatro de ellos, los recogió ella misma. «Las niñas» lo han conquistado todo desde Berlín hasta Málaga pasando por los Goya. Faltaba Aragón y esta vez sí que han sido profetas en su tierra y con los Simón se cierra una especie de círculo que comenzó con ese rodaje en Zaragoza.
Mejor banda sonora original a Carlos Naya; Mejor actriz a Andrea Fandos –que con 13 años ya tiene dos Premios Simón-, Mejor Vestuario, Mejor Guión, Mejor Dirección y Mejor Largometraje son los galardones que suma a las vitrinas. «Un premio precioso por la película en la que está inspirado», añadió en referencia a la estatuilla basada en «Simón del desierto», de Luis Buñuel.

En la terna de Mejor Largometraje se las veían dos producciones únicamente: «Las niñas» y «Uno para todos», de David Ilundain quien también acudió a la cita y que rodó en Caspe. No pudo ser el Simón pero la película que protagoniza David Verdaguer está presente en todas las quinielas y no causa indiferencia.
El primer premio en entregarse fue el de Mejor obra por su contribución social. Fue para «Otra forma de caminar» de Laura Torrijos-Bescós, quien agradeció a la ACA la creación de la categoría porque «el cine sirve para reivindicar y quedan muchas cosas por reivindicar». Los Mejores efectos especiales fueron para Juan Remacha, Paul Lacruz y Javier Toledo por ‘En racha’; Mejor sonido recayó en José Manuel Herráiz por «Nebra, el triunfo de la música». Mejor dirección artística recayó en Cristina Vílches, Paloma Canónica y Alicia Bayona por «Souvenir», un premio muy celebrado por los protagonistas que confesaron ser los fans de Segundo de Chomón que había entre el público. La noche fue un homenaje al pionero turolense en el 150 aniversario de su nacimiento, y cada vez que sonaba su nombre, alguien desde el público lo coreaba. «Somos los que gritamos su nombre desde las butacas», dijo Vílches despertando los aplausos. «Recibir un premio a Mejor dirección artística y en Teruel, tierra de Chomón… ¿Qué más se puede pedir?», se preguntó agradeciendo el reconocimiento. No es la primera vez que Vílches pasa por Andorra, en marzo fue una de las participantes en las proyecciones y coloquios.
El largometraje de Germán Roda, «Marcelino, el mejor payaso del mundo», se llevó tres galardones: Mejor montaje, Mejor fotografía y Mejor documental.
«En racha», de Ignacio Estaregui ganó tres Simón: Mejor cortometraje, Mejor actor para Saúl Blasco y Mejores efectos especiales.
Mejor maquillaje y peluquería fue para Esperanza López y Yolanda Real por «La mujer que soñaba con números», trabajo que también se llevó el de Mejor dirección de producción para Ana Esteban.
Reacción en tiempo récord y una embajadora encantada y encantadora
La noche comenzó media hora más tarde de lo previsto. Poca demora teniendo en cuenta el laborioso trabajo que hubo tras bambalinas para trasladar absolutamente todo lo preparado en San Macario hasta el Espacio Escénico de la Casa de Cultura. La lluvia torrencial arruinó todas las intenciones de continuar con el plan de celebrar la gala en el parque al aire libre con todo el entorno empapado. Eso obligó a cambiar de ubicación, lo que conllevó una severa restricción de asistentes para cumplir con los aforos de un espacio cerrado.
«Hasta que no pisé Andorra no había escuchado hablar de San Macario y os aseguro que desde hoy no se me va a olvidar en mi vida», dijo el presidente de la Academia de Cine Aragonés, Jesús Marco, en el inicio de su intervención. El patrón fue mencionado en varias ocasiones a lo largo de la gala donde al final se puso «al mal tiempo buena cara». Esfuerzo de técnicos de Aragón TV, que lo retransmitieron en directo y más tarde en diferido, sumado al de todo el personal de organización de la Academia, además del municipal, hicieron posible una reubicación en tiempo récord en apenas hora y media.
Capacidad de reacción también sobre el escenario con Ana Roche como presentadora. La actriz se descubrió como la mejor guía para la noche al hacer que todo pareciera fácil, que ahí no había pasado nada, y la noche transcurrió como estaba planeado: como la gran noche del audiovisual aragonés. Hubo risas, baile, interacción con el público, con la audiencia en casa, con los nominados y los entregadores de premios; hubo reflexión, reivindicación, recuerdos y gratitud. Desde el anfiteatro, los guionistas de la gala, Fernando Malo y Daniel Tejero, no perdieron detalle y rieron con las aportaciones de quienes fueron subiendo al escenario e hicieron gala de su desparpajo añadiendo más momentos divertidos a la noche siempre arropados por la música en vivo y en buen rollo de músicos andorranos.
Caja Rural de Teruel, Universidad San Jorge, Corporación Aragonesa de Radio y Televisión o Endesa fueron algunas de las entidades que entregaron galardón como patrocinadoras de esta décima edición. También compañeros del sector como representantes del festival de Huesca o David Chapín, como uno de los organizadores de los Premios de la Música que una semana antes se entregaron en Alcañiz. Miembros del sector o medios especializados, además de varias autoridades, fueron subiendo como entregadores.
Entre ellas, el director de Cultura de la DGA, Víctor Lucea, que reafirmó «el compromiso del Gobierno de Aragón con el sector tendiendo puentes en un año tan complicado». También el presidente de la Diputación de Teruel, Manuel Rando, que enumeró en cuatro las producciones que lleva la provincia en lo que va de año siguiendo la senda iniciada meses atrás como provincia escenario de rodaje. «En la DPT, a través del Instituto de Estudios Turolenses, estamos apostando por la Cultura y especialmente por el cine», dijo y agradeció la valentía de la ACA por sacar la gala de Zaragoza y llevarla al medio rural. Agradeció especialmente a la embajadora, Miriam Díaz-Aroca, su entrega. «Me lo estoy pasando bien por partida doble: por el acto en sí y por verla a ella cómo está disfrutando de la ceremonia», añadió.

«He estado en los Óscar y en los Goya pero si allí pasa esto, la gala se aplaza… ¡Pero aquí no, aquí ha salido adelante!», dijo Miriam Díaz-Aroca recogiendo las palabras de Marco para presentarla al aludir al Óscar que recogió por «Belle Epoque» junto al resto del reparto en Hollywood. Expresó su ilusión por ser embajadora, algo que nunca ha sido, del cine aragonés y en un sitio donde recibió «mimos constantemente» desde que bajó del tren en Zaragoza y emprendió viaje a la villa minera. «Seguimos haciendo cultura a pesar de la incultura», dijo y destacó el papel de la mujer «de cualquier edad» en una profesión con altibajos. «Los premios nos los tenemos que dedicar a nosotros porque esta profesión es muy caprichosa y se sufre mucho cuando no te llaman», añadió. Sin apagar la sonrisa con la que estuvo toda la gala disfrutando desde la primera fila, se despidió con un «aquí me tenéis de embajadora, a sus pies y su servicio» arrancando un sonoro aplauso.
La cuadrilla de la Ruta en el In memoriam
Los tambores y bombos no podían faltar y una representación de la cuadrilla de la Ruta la mitad debido a los aforos- hizo retumbar el Espacio Escénico. Lo hizo en un momento tan especial como es el In memoriam que en esta ocasión recordaba al célebre músico y compositor turolense Antón García Abril y a Jaime Fontán, jefe de producción de Aragón TV recientemente fallecido a los 52 años. Muchos de los que subieron a recoger sus premios tuvieron sus palabras de recuerdo para quien les acompañó en el inicio de sus proyectos.

Los tambores salieron entre el premio a Mejor Dirección para Palomero y el Simón de Honor que en esta ocasión recayó en Pedro Aguaviva. El veterano cineasta y fundador de numerosas agrupaciones culturales en torno al cine, no acudió ya que de momento prefiere evitar lugares concurridos pero envió un mensaje y al crítico y miembro de la Tertulia Perdiguer, Roberto Sánchez para recoger el galardón y hacérselo llegar a quien definieron como «un enamorado del cine».
Suspense con final feliz
El alcalde de Andorra y anfitrión, Antonio Amador, fue el último encargado de entregar premio y lo hizo a Mejor Largometraje. Comenzó agradeciendo a los artífices de la reorganización y a la Academia por haber pensado en Andorra. «Esta es vuestra casa y si queréis volver, yo ahí lo dejo», dijo. Aludiendo a la rápida reacción para hacer los cambios, Amador hizo referencia a la capacidad de reacción y reinvención de su pueblo, un territorio que se está enfrentando a una transición que «seguro que conseguirá».
Tiró de ironía para definir la noche y la situación en sí misma y confesó que sintió que homenaje se lo hacía el cine a Andorra. «Todo empezó como una película familiar en la que todo es precioso y teníamos un montaje perfecto; luego se convirtió en un thriller con la lluvia que empezaba y paraba y volvía a empezar y no paró y todo fue un drama», reflexionó recibiendo la aprobación del público que celebró lo acertado del símil. «Ya lo veis que todo ha salido bien, así que, el drama ha tenido un final feliz como estoy seguro de que también lo tendrá Andorra», concluyó.
José Manuel Herráiz recoge el premio a Mejor Sonido por ‘Nebra, el triunfo de la música’. / B. Severino ‘En racha’ se llevó el premio a Mejor Cortometraje que entregó el presidente de la DPT, Manuel Rando / B. Severino Mª José Moreno y Luisa Gavasa, dúo que reivindicó el papel de las actrices ‘setenters’, entregaron a Pilar Palomero el premio a Mejor dirección. / B. Severino Germán Roda recogió de manos de la Universidad San Jorge el premio a Mejor Montaje por ‘Marcelino, el mejor payaso del mundo’. Fue también Mejor documental y fotografía. / B. Severino Roda, Mejor documental, premio que recogió del director de Cultura de la DGA, Víctor Lucea. / B. Severino El crítico Roberto Sánchez representó a Pedro Aguaviva en la recepción del Premio Simón de Honor. / B. Severino Pilar Palomero y Valérie Delpierre recogieron el Premio Simón a Mejor Largometraje por ‘Las niñas’ de manos del alcalde de Andorra, Antonio Amador. / B. Severino Laura Contreras, nominada a Mejor actriz. / B. Severino Representantes del festival de Huesca y de los Premios de la Música Aragonesa entregaron al equipo de ‘Souvenir’ el Simón a Mejor dirección artística. / B. Severino Parte de la corporación municipal pasó por la alfombra roja. / B. Severino Ediles de Crivillén, Alloza, Alcorisa y Andorra con Esther Peirat -diputada en Cortes-, en la cita con el cine. / B. Severino Andrea Fandos, Mejor actriz de los Simón 2021 por ‘Las niñas’. Recogió la estatuilla de Ignacio Montaner, director general de Endesa en Aragón. / B. Severino Una representación de la cuadrilla de la Ruta puso la banda sonora al In Memoriam por Antón García Abril y Jaime Fontán. / B. Severino Autoridades locales, provinciales y autonómicas antes de entrar al Espacio Escénico. / B. Severino Carlos Naya, Andrea Fandos, Pilar Palomero y Valérie Delpierre parte del equipo de ‘Las niñas’ que recogieron los seis Premios Simón. / B. Severino La embajadora, Miriam Díaz-Aroca, en un baile con el presidente de la ACA, Jesús Marco. / B. Severino