El despido de una trabajadora de la limpieza en el Centro de Salud de Caspe, el pasado mes de octubre, dejó a la plantilla de este servicio a la mitad. Desde entonces, Raquel Balsagón, la empleada que se ha quedado al frente de todo el ambulatorio, ha tenido que adaptarse a un nuevo horario a jornada partida y ha comenzado a priorizar unas tareas sobre otras. «No puedo llegar a cubrir el mismo trabajo que antes hacíamos entre dos. He cambiado la fregona por la mopa, por ejemplo, para poder limpiar el suelo todos los días y el sótano o la cochera de fuera que antes limpiaba una vez a la semana, ahora lo hago cuando puedo», explica.
Desde la dirección del Centro de Salud, se trasladó esta situación a la gerencia de Atención Primaria del Gobierno de Aragón que les indicó que pusieran una incidencia. «Esta medida no llegó a ningún puerto y decidimos ponernos en contacto con el Ayuntamiento de Caspe», señala la coordinadora del ambulatorio, Isabel Paúles.
1 hora de limpieza de apoyo al día
Tras la petición de ayuda del Centro de Salud, el Consistorio estudió sus recursos propios del servicio de limpieza diario y destinó un apoyo de una hora por la mañana, de lunes a viernes. «Se ha notado la ayuda aunque preferiría que fuera por la tarde porque a partir de las 20.00 no hay nadie», apunta Balsagón.
La coordinadora, por su parte, subraya que desde el ambulatorio se pide que se restituya el puesto de trabajo eliminado. «Ahora no tenemos a nadie los fines de semana y, aunque solo está abierto Urgencias, se acumula basura de curas, vendajes, por ejemplo, y vienen más pacientes».
La alcaldesa, Ana Jarque, indica que, desde que el consultorio trasladó esta «necesidad», se buscó «maximizar los recursos propios» para destinar parte al ambulatorio. «Los ciudadanos deben encontrarse un Centro de Salud en condiciones y eso empieza por la limpieza», asevera.
El Partido Socialista fue el primero en dar la voz de alarma en el pleno del pasado mes de noviembre. «La medida del Ayuntamiento como solución urgente está bien pero nosotros decimos que la solución es exigir al Gobierno de Aragón que haga cumplir a la empresa adjudicataria de este servicio».
En el Bajo Aragón-Caspe, la Ciudad del Compromiso no ha sido la única afectada por los recortes en la plantilla de la limpieza. En Maella, el Centro de Salud contaba con dos trabajadoras a media jornada y ahora solo dispone de una y a media jornada también.
Sanidad del Gobierno de Aragón afirma a LA COMARCA que no se pueden cambiar las condiciones del contrato, firmado en la legislatura anterior, y que las decisiones laborales competen a la empresa. El departamento, aseguran, recoge las quejas de todos los centros y hospitales y realiza inspecciones aleatorias para supervisar que las condiciones de limpieza estipuladas por contrato se cumplan. Si se incumplen esos mínimos, entonces el Gobierno de Aragón emite una penalización a la empresa.
Gus dice
que vergüenza que recorten en limpieza 🤦 😡. claro,estamos en un país que un politicucho cobra más que un médico