Luis Buñuel ha regresado este año que está a punto de terminar a las pantallas y lo ha hecho de la mano de Javier Espada. Con ‘Buñuel, un cineasta surrealista’, el calandino cierra una etapa que empezó con ‘El último guion, Buñuel en la memoria’, el primer documental y en el que compartió dirección con Gaizka Urresti. Tras este bautismo llegaron otras películas documentales hasta la última película que «es más personal» y en la que presta su voz como narrador. «Son mis opiniones y eso quería que quedase claro», dice. Asegura que no pretende dejar aparcado a Buñuel pero con este último trabajo y el ciclo que cierra, deja su «contribución«. «Ahí está el poso de muchas conversaciones con amigos de Buñuel y de mis propias investigaciones, materiales que he descubierto en diferentes archivos –algunos de ellos inéditos-. Buñuel está lleno de posibilidades y ojalá haya quiénes sigan investigando y aportando también otros elementos», desea.
Tras su estreno en verano en Cannes, ‘Buñuel, un cineasta surrealista’ está entre los cuatro trabajos nominados a Mejor Documental en los Premios Forqué. El ganador se desvelará la noche de este sábado 11 de diciembre en la gala que abre la veda de los premios del cine español del último año. En 2018 ya estuvo nominado como parte del equipo de ‘Buñuel en el laberinto de las tortugas’.
Este documental le está dando muchas alegrías desde que se estrenó en Cannes. ¿Qué le espera?
Para mí, que un documental hecho en casa durante la pandemia que trata sobre Buñuel se estrene en la sala Buñuel en el Festival de Cannes es el lugar en el mundo. No hay otro espacio mejor para este estreno. Hablamos del festival más importante del mundo y para mí ya fue una grata sorpresa vivir ese momento. Que luego fuera seleccionado en el Festival de San Sebastián dentro de la sección que, según ellos recoge lo mejor del cine español, fue una confirmación. También lo fue estar después en festivales como el de Valladolid al que le tengo muchísimo cariño porque tiene una programación muy rigurosa y exquisita y muy potente. Recientemente ha estado en el Festival de Cine de Morelia en México, que creo que ya es uno de los festivales de cine más importantes de América, y va a seguir teniendo un importante recorrido internacional, de eso no me cabe la menor duda.
¿Tiene más destinos en la agenda?
Se están concretando unos cuantos pero también estoy con otros proyectos y, además, la pandemia todavía sigue ahí. Soy bastante selectivo con los sitios a los que viajo porque tenemos que poner nuestro granito de arena para que esto termine, es la responsabilidad individual de cada uno.
¿Cómo surge este documental que terminó por hacer en casa?
Surge a partir de una conferencia que impartí en México coincidiendo con una gran exposición que organizó la Cineteca dedicada al Buñuel mexicano. Me invitaron y hablé de ‘Luis Buñuel, un surrealista en México’ y tuvo un éxito enorme con la sala llena y gente en escaleras y de pie. Para mí fue un éxito esa conferencia por el público pero también por los comentarios y hubo bastante gente que me animó a hacer un documental con esos materiales pero. Dije que no porque una cosa es una película y otra es un documental porque no tienen nada que ver ni en ritmos ni en contenidos ni en nada. Pero llegó el confinamiento y encerrado en casa cuando solo podíamos salir a comprar el pan y poco más me lo planteé como un reto y decidí contradecirme a mí mismo. Quise probar a ver hasta qué punto se puede a partir de una conferencia crear una película en una situación extraña encerrado en casa y en la que disponía de todo el tiempo del mundo y eso me permitió crear un guión a partir de esa conferencia que se transformó enormemente hasta prácticamente quedar unas pocas huellas. Se traslada ese planteamiento que era muy didáctico en un principio, a un planteamiento de película documental o de película de no ficción con muchos elementos. Creo que es un documental bastante denso porque tiene muchas lecturas y muchas capas y a los espectadores les aporta bastantes conocimientos sobre el mundo de Buñuel y sobre la acción con el arte en general y con el Surrealismo en particular.
En este caso, entiendo que lo diferenciador es el material de archivo.
Sí, realmente he podido filmar muy poco, solo en Calanda y Zaragoza y el resto eran materiales ya filmados y de Buñuel. Hay mucho de archivo, fotografías… y con todo eso se arma el documental.
Mucho trabajo a la hora de seleccionar, imagino.
Sí, es un proceso largo, e insisto, son muchas horas pero por culpa de la pandemia tuvimos bastante tiempo y eso ha permitido que se haya podido llevar a cabo tanto en la parte creativa como en la de producción. Esta es otra faceta del proceso que también lleva mucho tiempo y esfuerzo y sin haber contado desde el minuto 0 con el apoyo de la familia de Buñuel no habría sido posible abarcar un documental de este tipo. Luego se fueron sumando el resto de instituciones y eso ha permitido que se pudiera realizar este documental. Desde los ayuntamientos de Zaragoza y Calanda hasta el Gobierno de Aragón por citar los de aquí, pero se han sumado instituciones de México y productores privados. Todo eso ha permitido que por ejemplo, haya materiales inéditos procedentes del Centro Nacional de Arte y Cultura Georges Pompidou de París. Ha sido posible a través de la colaboración con la Cinemateca Francesa.
A la hora de la promoción, ¿con qué respaldo cuenta?
La película afortunadamente cuenta con distribución internacional a través de Latido, y distribución en España con A Contracorriente. De otro modo es muy complicado moverse.
Ha pasado por festivales y también por las salas comerciales. ¿Qué le está llegando del público que la ha visto?
Hasta la fecha el feedback ha sido muy positivo tanto en el festival de Cannes como en el de San Sebastián o México donde las dos salas en las que se proyectó estuvieron llenas. Fue un público que además en el turno de preguntas fue muy activo y generoso con los comentarios y preguntas y eso denota un gran interés. En San Sebastián, por ejemplo, contamos con Ángela Molina y con Iván Trujillo. Molina es una de las actrices de Buñuel, estaba fuera de España y se vino para ver el documental que le gustó muchísimo, los comentarios fueron muy buenos. Confío en que este trabajo haya aportado algo, sobre todo, a la gente joven que no conoce el cine de Buñuel. Espero que a través de este documental lo descubra y pueda acercarse a la obra de un creador único y universal. Creo que es alguien que sigue aportando cosas actualmente a cineastas pero también a fotógrafos, escritores o artistas, en definitiva, a gente que quiere enfrentarse a procesos creativos. Creo que a todos ellos les puede inspirar la obra de Buñuel.
Y más en este momento de pandemia que tanto se ha usado la palabra Surrealismo.
Creo que es buen momento para acercarse a su obra más allá de que a veces usamos la palabra Surrealismo de una forma un tanto… No sé. La usamos para hablar de absurdo o para algo que es ilógico pero no olvidemos que el Surrealismo es un movimiento artístico fundamental en el siglo XX porque es de donde proceden todos los movimientos vanguardistas. Los surrealistas fueron los primeros que cuestionaron el arte tal y como se conocía y además intentaron cambiar el mundo a base de escandalizar y de crear obras que realmente cuestionaran cosas. Ya no era hacer cuadros bonitos sino cuadros que interrogaran al espectador y todo eso se lo debemos a ellos. Creo que sigue siendo un movimiento perturbador y necesario en nuestra sociedad porque alimenta la crítica, nos hace ser espectadores activos y desde luego, nos hace no quedarnos en una simple lectura ya que nos obliga a profundizar en la obra pero también en nosotros mismos, en nuestros sueños y cuestionarnos nuestra propia realidad. Creo que eso es muy importante, Buñuel decía que no vivimos en el mejor de los mundos posibles y que él quería contribuir a que el espectador fuera consciente de esta máxima con sus películas y creo que eso hace que su cine siga siendo necesario.
¿Considera que se ha ido sacando a la luz a Buñuel a lo largo de estos últimos años?
Creo que sí. Cuando empecé a diseñar el Centro Buñuel Calanda en 1999 el conocimiento de Buñuel era muy pequeño, estaba reservado a algunos cineastas y poco más y ni siquiera en Aragón era muy conocido. Ha habido todo un proceso en el que modestamente he contribuido. Se creado un museo, un festival que lleva su nombre, se han publicado obras, se han hecho exposiciones temporales, documentales, conferencias… Todo eso, junto a la labor de otras muchas personas e instituciones y entidades, ha contribuido a que sea más conocido internacionalmente. Y no solo Buñuel, también Aragón se ha proyectado más ahora que por desgracia, se conocen más los jugadores de fútbol que los elementos culturales.
¿Cómo se toma la nominación a los Premios Forqué? No es la primera vez que seleccionan un trabajo en el que participa.
Sí, estuve con otros proyectos anteriormente y para mí es una satisfacción enorme el reconocimiento por parte de la industria del cine en España y, en este caso, que haya apostado por este documental para meterlo entre los cuatro nominados finales. Aunque es un proyecto que comencé yo solo, es evidente que para hacer una película hace falta industria para tener un acabado profesional en contenido y en realización y ese objetivo se pudo cumplir. Que haya sido reconocida por la industria me da una satisfacción enorme porque implica que sí les ha llegado el mensaje de Buñuel y que valoran el esfuerzo que representa crear una película en medio de la pandemia.
¿Qué le parecen los compañeros de nominación?
Son cuatro trabajos muy distintos entre sí. Hay otro proyecto aragonés sobre los Héroes del Silencio (‘Héroes. Silencio y Rock & Roll’, de Alexis Morante); La Tata (‘100 días con La Tata’, de Miguel Ángel Muñoz), que creo que es interesante y entrañable, y un trabajo de Jonás Trueba (‘Quién lo impide’) que está entre la ficción y el documental aunque creo su propuesta es mucho más de ficción. Pero son cuatro trabajos muy distintos y eso también representa una muestra de lo mucho y diverso y rico que es el mundo del documental en España.
¿Ahora está con algún proyecto que se pueda contar?
Estoy con otros dos proyectos y es pronto para decir nada pero parece que están funcionando muy bien.
¿Los desarrolla como productor, guionista o director?
Como productor, guionista, director… Cuando haces documentales va todo en el mismo paquete. Son proyectos muy personales y pequeños aunque nunca sabes la audiencia que puedes tener. Por suerte he conseguido apoyos desde México y otros lugares, así que, estoy convencido de que va a salir adelante.
¿Tiene algo que ver con Buñuel?
En este caso, no. Nada.