Las actividades previas a la celebración del Compromiso de Caspe tuvieron lugar este fin de semana en la ciudad. El acto estrella tuvo lugar el domingo, con el Juramento de los Compromisarios, una recreación en la que participan un centenar de actores y figurantes perfectamente ataviados, que revive este acontecimiento histórico. Para todos estos actos es necesario el trabajo y el esfuerzo de varias entidades y agrupaciones como HP Lab, Laboratorio de Desarrollo de la Universidad de Zaragoza, que ha fundado Darío Español. Él mismo ha sido uno de los actores protagonistas.
¿Cómo lo hacéis para conseguir ese retrato tan fidedigno de lo que ocurrió hace ya cientos de años?
Lo que hacemos siempre es investigar los hechos históricos que van a representar y decidimos cómo canalizarlos, sirviéndonos de nuevas tecnologías y otros recursos artísticos, para que tengan impacto en la sociedad. En el caso del Juramento de los Compromisarios, que es el inicio de lo que fue el Compromiso de Caspe, hemos querido representar desde la toma de posesión de la Colegiata y del Castillo; la presentación de cada uno de los aspirantes al trono; y hasta cómo se preparaba para la batalla el futuro rey.
El acto estrella fue el Juramento de los Compromisarios, que ha estado acompañado de otras actividades.
Nuestro objetivo es crear un proyecto de un nivel cultural interesante, no sólo una reconstrucción histórica de alto nivel (porque cuidamos al detalle todo el vestuario, los diálogos, la decoración…), sino también ofrecer otras actividades como conferencias y actuaciones musicales que nos trasladen totalmente al periodo histórico del que estamos hablando para tener una experiencia cultural totalmente plena.
¿Cuál es la clave de todo esto?
Lo importante es que la historia y el patrimonio aporten a las localidades, y nosotros queremos conseguirlo con todo esto. No nos centramos solamente en organizar las propias recreaciones, sino en todo lo que engloba. Queremos contextualizar y también divulgar. Estamos orgullosos de decir que la de Caspe es una de las recreaciones más cercanas a la realidad de todo Aragón.
Ha habido ayuda y colaboración tanto vecinal como de asociaciones y entidades del territorio.
Somos muy conscientes del alto grado de implicación y de voluntariedad de los vecinos de Caspe. Para los talleres, por ejemplo, hemos contado con la Asociación Historica Vestimentum, la mejor de Aragón y para nosotros también de España, que se encarga tanto de vestir y asesorar a los actores, como de explicar al público cómo eran los trajes de la época, tanto de la nobleza como del pueblo llano. En cuanto a las personas anónimas, es increíble las ganas y el trabajo que invierten para que salga perfecto.
No debe ser fácil, y más teniendo en cuenta que los actores no son profesionales.
No son profesionales pero se comportan como tal. Llevan dos meses ensayando y ahora vendrá lo complicado: la preparación del Compromiso de Caspe, que son muchas más horas, más texto, más ensayos… Es envidiable lo que tiene esta localidad, todos esos vecinos que se esfuerzan y dedican su trabajo y su tiempo por y para su pueblo.