Del negro del carbón al verde de las renovables. Las energías limpias son el futuro y la provincia de Teruel quiere convertirse en un referente apostando por un sector que también cree empleo y aporte beneficios económicos directos a los ayuntamientos del territorio con los que a su vez, se desarrollen nuevos proyectos.
Teruel capital ha sido este lunes el escenario de la presentación de los proyectos que va a desarrollar Forestalia en los próximos años en la provincia. La empresa aragonesa proyecta 3.000 megavatios de energías renovables en 50 municipios de la provincia para desarrollar 66 parques eólicos y fotovoltaicos en los próximos cuatro años con una inversión prevista de más de 2.400 millones de euros. Esto se traduce en 12.000 empleos directos e indirectos durante los años de construcción, y más de 450 en la explotación. A ello se suma la mayor planta de producción de pellets de España, que se ubicará en Andorra.
Aún no se han detallado los municipios beneficiados pero sí sus comarcas: Bajo Aragón, Maestrazgo, Bajo Martín, Andorra-Sierra de Arcos, Cuencas Mineras, Gúdar y Comunidad de Teruel. Tan solo tres se quedan fuera (Matarraña, Albarracín y el Jiloca).
Forestalia tiene previsto desarrollar una cartera de 34 parques fotovoltaicos y 32 parques eólicos que suman respectivamente 1.640 y 1.300 MW con capacidad para ampliarse a los 6.000 MW. Una cifra para comparar, la Central Térmica de Andorra tiene capacidad para emitir 1.000 MW.
La inversión total de estos proyectos es de más de 2.400 millones de euros con una previsión de ingresos en el territorio de más de 408 millones en 30 años -13,6 millones anualmente- mediante impuestos municipales y alquiler de terrenos. Por cada megavatio se obtendrán 2.000 euros de alquiler y otros 2.000 en impuestos. El horizonte de trabajo para el desarrollo y ejecución de los proyectos es de cuatro años.
«La apuesta por Teruel es porque vimos que tiene recursos suficientes en sol y viento y nos pusimos a trabajar en esa dirección. Aquí era posible hacerlo y en Zaragoza es más complicado exponer este modelo. Teruel es la punta de lanza de un proyecto que creo que es el mejor de Europa y que a partir de ahora se lanzarán otros similares», dijo ayer Fernando Samper, presidente de Forestalia.
Nuevo modelo de reparto de beneficios
Estos proyectos traen consigo un innovador modelo creado en la provincia para el que el establecimiento e implantación de parques de energías renovables que promueven empresas privadas se haga en terrenos municipales para que el pago de los alquileres se quede también en el territorio.
Este modelo, inexistente hasta ahora, aglutina en un primer momento a 42 municipios (el 18% de toda la provincia) en cuatro asociaciones. Ya está en marcha Viento Alto con 11 municipios; en trámite Altiplano (9) y Majalinos (12); y en proyecto: Mudéjar (9), en cuyos proyectos intervienen empresas como Samca, Galaxy, Forestalia, Endesa, Cobra, Energías Renovables de Teruel y Renomar, entre otros.
Uno de sus objetivos es actuar de forma solidaria y conjunta para la tramitación de los expedientes de autorización correspondientes y socializar parte de los ingresos, a través de un fondo común, en beneficio de todos los ayuntamientos, independientemente del número de molinos o placas instaladas en sus términos municipales. Una vez instalada la actividad que genere ingresos a las arcas municipales, por alquiler y los correspondientes impuestos, será posible la generación de empleo, preferentemente femenino, y la actividad económica, a través de fórmulas empresariales-pymes con formula público-privada y gestión profesional.
Si se sigue el modelo de Viento Alto, la única asociación ya constituida desde finales de 2017 y formada por pueblos del Maestrazgo, el acuerdo con la empresa es el siguiente: el 60% del alquiler lo obtiene el propietario (se intenta que sean los ayuntamientos); el 25% el Consistorio del municipio donde está ubicado el parque y el 15% del alquiler más el 15% de los impuestos (IBI) al común, la asociación.
En este caso Viento Alto está formada por 11 pueblos: La Iglesuela, Cantavieja, Fortanete, Villarluengo, Bordón, Mirambel, Castellote y La Cuba.
Esta fórmula ya ha recibido el visto bueno del Ministerio para la Transición Ecológica y lo ha tramitado debido a que una de las asociaciones también se realiza con el municipio de Morella (Castellón). La producción energética trasciende el ámbito de la propia región, lo que precisa la tramitación ministerial.
El Gobierno de Aragón trabaja en promover esta forma solidaria de asociaciones municipales desde 2017, cuando en septiembre de dicho año pidió autorización al ministerio para evacuar energía en la subestación Mudéjar que, hasta entonces, no contaba con ella. Dicho permiso se obtuvo el 25 de julio de 2018 en Consejo de Ministros, que también permitió ampliar el nudo de Morella con más de 1.000 MW. Posteriormente, en agosto de 2019, Red Eléctrica dio el visto bueno al reparto de megavatios a las empresas.
Esto ha permitido que Forestalia inicie este modelo, como en el futuro lo harán otras empresas.
Funciona el 40% del mapa
Ayer durante el multitudinario acto el Presidente de Aragón, Javier Lambán, puso el acento en la urgencia de actuar contra la despoblación y en que la Agenda 2030 presida las políticas autonómicas y recordó que entre las 132 medidas de gobernabilidad de este Gobierno se contempla continuar apoyando y mantener el liderazgo de Aragón en energías renovables, sector estratégico, apostando por la diversificación, así como a impulsar una transición energética justa. Puso en valor y dio cuenta de los pasos seguidos para llegar a esta presentación de las asociaciones de municipios pionera en España para la instalación de parques eólicos y fotovoltaicos, en un modelo de colaboración público-privada.
De hecho, la provincia de Teruel cuenta con un mapa de renovables que se encuentra en funcionamiento en un 40%, con 1.300 millones de inversión y 234 empleos creados, una realidad que se ha venido generando desde la anterior legislatura, en la que también surgieron proyectos de muy distinto calado y tipología.
A estos hay que añadir la puesta en marcha, ya fueran instalaciones de nueva creación o ampliaciones de otras, de 55 proyectos que generaron una inversión de 150 millones de euros y 740 empleos en iniciativas agroalimentarias, sociales, industriales, relacionadas con la aeronáutica o el motor, entre otras.
Actualmente hay 28 proyectos empresariales más en tramitación y otros 45 en cartera, según avanzó el presidente Lambán en una exposición en la que ha seguido manteniendo la discreción necesaria sobre algunas de estas iniciativas en elaboración, pero en la que ha infundido ánimos sobre la buena marcha de la provincia de Teruel, lo que le hace insistir en que «Teruel funciona y cada vez mejor».
Por su parte, el vicepresidente del ejecutivo, Arturo Aliaga, también subrayó que «es la hora de Aragón» y animó a trabajar en común entre el Gobierno central, el Gobierno de Aragón, las empresas y los ayuntamientos, implicando a todos los actores. Igualmente, ha planteado que además de lo ya hecho, quedan retos por delante como las autopistas eléctricas.
Espero que las empresas que trabajarán en estos proyectos de placas solares sean más formales con los trabajadores y que no pase lo que pasó en chiprana o escatron