Dos días antes de decretarse el Estado de Alarma en el país para intentar frenar el avance del Coronavirus COVID-19, la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ya había dado la orden de restringir las entradas en los 97 Centros Penitenciarios de España. Una medida que ha afectado a más de 58.000 presos.
Inmaculada Sánchez, funcionaria en la prisión de Teruel y miembro del sindicato ACAIP- UGT, acababa de doblar turno justo el día después del anuncio del inicio de las restricciones. «Tuve que atender muchas dudas que tenía e intenta calmarlos», explica Sánchez. Esta experimentada funcionaria considera que si se diese un positivo en Coronavirus dentro de la prisión de Teruel podría provocar histeria entre los internos. «Se podrían llegar a dar casos de plantes o motines», reconoce.
En la cárcel de Teruel hay actualmente cerca de 190 presos y 118 funcionarios, la mitad, entre ellos Inmaculada, están en contacto directo y permanente con los internos. «El Coronavirus está provocando nerviosismo entre los internos, porque se imaginan que sus familiares podrían estar expuestos al riesgo de contagio», explica.
El acceso que los internos comunes tienen a la información del exterior, dice esta funcionaria, provoca más de un problema. «Hay personas que piensan que mejor que no vengan sus familiares pero eso depende ya de las circunstancias personales de cada uno», afirma Sánchez.
La Comisión Técnica de Prevención de Riesgos Laborales de Instituciones Penitenciarias se está reuniendo estos días de manera urgente con el fin de actualizar las indicaciones específicas de prevención de riesgos laborales para los empleados públicos penitenciarios. «A nosotros nos preguntan: ¿Y ustedes que se van a casa y luego vuelven? Les respondemos que venimos a trabajar y volvemos a casa sin pararnos ni entrar en ningún sitio. Evitamos no contagiarnos ni contagiar a los internos», comenta. «Esto no ha sido una orden impuesta pero lo hacemos porque entendemos que es lo que hay que hacer y porque tenemos que volver a casa a descansar y no podemos estar en prisión quince días seguidos», admite.
Sin contacto con sus familiares
Instituciones Penitenciarias ha suspendido los «vis a vis», los contactos físicos con familiares o amigos de dos horas semanales a los que tienen derecho todos los internos, y los ha sustituido por visitas a través de un cristal de seguridad. «No es lo mismo pero es lo que hay; algún interno me decía que por lo menos podían ver a sus familias», afirma.
La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias también ordenó que todos aquellos traslados que lleguen a otras prisiones tienen que pasar un periodo de catorce días de aislamiento en el módulo de traslados. Esos internos deben obedecer esta directriz y permanecer aislado aunque hayan superado positivamente las revisiones médicas o no presenten síntomas. «Ahora mismo en Teruel tenemos a cuatro internos aislados en un módulo simplemente por venir de fuera. Si algún preso tuviese síntomas se le aislaría en su celda y tendría acceso a material sanitario y medicamentos para intentar superar la enfermedad», explica esta funcionaria.
Inmaculada explica que los presos tienen las mismas directrices de limpieza y distanciamiento que tenemos toda la población. Respecto al contacto, dice Inmaculada Sánchez, les surgen dudas. «¿Con los paquetes qué hacemos? Entonces lo trasladamos y la dirección se reúne y piensa alternativas», dice.
Mañana esta funcionaria turolense volverá a su puesto de trabajo y reconoce que lo hará algo más tensa y alerta. «Hay que intentar que la enfermedad no entre sin restringir sus derechos y eso es muy complicado», se sincera.
comentar que todos son personas son vidas y aun estando presos creo que se deberia dar la libertad a los presos y que cumplan en sus casas sus condenas y asi tanto funcionarios o presos deberian de estar en sus casas ya que son vulnerables todos como los ancianos en residencias pues hay que ser humano y esto afecta a toda area terrenal asi de evitar contagios y motines y escasez tanto de mascarillas ni de dinero del govierno para darles sustento cada dia creo que se deberia reflexionar y hacer lo mero posible ante el estdo de alarma en el que estamos TODOS SOMOS HUMANOS Y SOMOS VIDAS NO SE OLVIDEN DE CENTROS PENITENCIARIOS NUESTRO GOVIERNO HAGA ALGO YA POR TODOS LOS CENTROS.
Tengo a un familiar en el centro penitenciario de Teruel y por lo que me comenta, no hay un gran protocolo de seguridad dentro de prisión para evitar el contagio, por mucho mal que hayan hecho son personas, merecen protección y atención igual que cualquier otra.