La sede de la Comarca del Bajo Martín en Híjar inició este lunes la rehabilitación de su actual fachada tras haber lucido durante más de un año una tela metálica como consecuencia del desprendimiento de varias placas de alabastro que recubrían su pared. Su reforma, que pretende evitar posibles nuevos desprendimientos, corre a cargo de la empresa Millan Plasol S. L. y consistirá en la sustitución de este material por vidrio templado laminado serigrafiado que imite su aspecto actual.
Tras quedar desierta la licitación de este proyecto de obras en una primera convocatoria, este volvió a licitarse y finalmente fue adjudicado a la empresa Millan Plasol S. L. por un importe de 83.509,92 euros que serán aportados por la institución que ya dispone de un aval anterior para hacer frente a alrededor de la mitad del importe. Además, la reforma también cuenta con la colaboración de Vidrios Ariño, empresa encargada de facilitar las diferentes piezas que se emplearán para el nuevo revestimiento.
Esta es una rehabilitación que supone «un gran alivio» para la sede comarcal, tal y como afirmó Narciso Perez, presidente de la Comarca del Bajo Martín. El edificio ya sufrió los primeros desprendimientos de placas de alabastro poco después de su inauguración y las condiciones climatológicas a las que está sometido las 24 horas del día durante todo el año no han puesto fácil su mantenimiento. Desde entonces ya han caído otras varias piezas como efecto de esta exposición provocando que la fachada completa haya durado menos de diez años, por lo que se espera que esta nueva alternativa esté completa a finales de esta semana pese a no tener una fecha exacta para acabar el proyecto.
Como se detalla en el documento de rehabilitación, la actual fachada está compuesta por una hoja exterior de placas de alabastro de dos centímetros de espesor y sobre esta hoja hay un laminado con vidrio extraclaro antirreflectante de cuatro milímetros de espesor. Está fijado mecánicamente mediante soportes de acero inoxidable a una subestructura de tubulares de aluminio lacado. Detrás de la hoja de placas hay una cámara de aire donde se encuentra la estructura del edificio. La hoja interior de esta fachada también está compuesta por placa de alabastro de dos centímetros de espesor fijado mecánicamente mediante soportes de acero inoxidable a una subestructura de tubulares.
El trabajo a realizar en la fachada principal es, en primer lugar, el desmontaje de estas placas exteriores de alabastro. En segundo lugar, se dispondrá la subestructura de perfiles tubulares para la colocación de las piezas para la fijación de vidrio templado para su posterior sellado perimetral en frío con silicona neutra resistente a los rayos UVA.