Jordi Amenós cuenta su visión del modelo educativo y destaca la importancia de dar libertad a los niños para imaginar, fabular y soñar
El terapeuta y formador en creatividad Jordi Amenós visitó el sábado por la tarde el colegio Escolapios de Alcañiz. Ante un salón de actos lleno hasta la bandera, ofreció la charla «El poder de las historias en la educación». Centrado en la pedagogía y autor de dos libros infantiles, atiende a La COMARCA minutos antes del inicio de la conferencia.
¿Qué quiere transmitir hoy aquí?
Voy a explicar la importancia del uso de la ficción como herramienta para conocernos. No nos damos cuenta de la importancia de los cuentos y, en cambio, el inconsciente de un niño los necesita para saber quién es. Mantengo la teoría de que el sistema educativo se salva gracias a la generosidad y la entrega de los maestros, pero como modelo educativo es un sistema muy mejorable; se basa en la extraña idea de tener al alumno sentado y evaluado durante años. Así es muy difícil ser creativo, y si encima vamos retirando las humanidades del aula estamos quitando a los niños el patrimonio de crear y fabular.
¿Por qué es importante fomentar la fabulación en los niños?
Cuando un niño fábula se construye a sí mismo y deja que un río enorme de creatividad llegue al mundo. En sus primeras fabulaciones empezará a construir el criterio propio que tendrá de adulto, por eso es tan importante acompañar al alumno durante el proceso educativo para que sea libre y tenga derecho a expresar lo que necesite con teatro, cuentos, poesía, matemáticas, tecnología… Que el alumno no sea un desconocido en clase, sino que se le invite a sacar el alma de artista que todos los seres humanos llevan en el corazón.
«Hay que invitar al alumno a sacar el alma de artista que todos los seres humanos llevan en el corazón»
¿Cómo se puede conseguir esto?
Es tan sencillo como convertir el aula en una pista de circo de vez en cuando, donde además de las materias tradicionales entren en clase la poesía, el teatro, la meditación, la música… Que el aula se llene de espacios no evaluados. Novalis, un pensador alemán, defendía que además de la asignatura de ética también se debería enseñar «fantástica», donde una hora por semana fuera digno soñar, imaginar y expresar. Poder dignificar la experiencia emocional.
¿Cómo sería el mundo si se fomentara más la creatividad?
Creatividad y vulnerabilidad van de la mano. Estamos construyendo una sociedad en torno a la extraña idea del yo ideal, de ser perfectos y algo que no somos. En realidad, cuando rascas un poco detrás de las historias de cualquier persona encuentras que todo el mundo tiene miedo y todo el mundo querría amar. Si recuperamos esa vulnerabilidad y la belleza que hay en esas heridas el mundo gana en humanización y compasión. Nadie empieza una guerra cuando recita poesía, cuando dignifica su ser vulnerable y ve compasivamente a los otros. Es un trabajo profundo pero puede aportar mucha belleza al mundo.
«Estamos construyendo una sociedad en torno a la extraña idea del yo ideal, de ser perfectos y algo que no somos»
¿Hay algún momento en el que se tenga que poner límite a la capacidad de fabular del niño?
Solo si hubiera alguna patología psíquica de desconexión con la realidad.

¿Educamos bien a nuestros hijos en casa?
No puedo responder mucho porque no tengo hijos (ríe), pero creo que todo el mundo hace lo que puede, que ya es mucho. Muchos padres van a actividades y buscan conferencias sobre educación porque se nos está acabando un determinado modelo de sociedad y hay un punto de desorientación; no sabemos hacia dónde vamos.
Habrá padres, quizá de la vieja escuela, que no casen con la idea de dar al niño libertad para fabular e imaginar. ¿Qué tiene que decirles?
Respeto cualquier opinión y me gusta escucharlas, pero creo que detrás de todo adulto encontramos un niño fabulador, vulnerable, que sigue allí esperando que le vayamos a buscar. Tengo claro que esto es un problema generalizado de nuestra sociedad, quizá por el estrés, la cotidianidad, las prisas… Más allá de si el modelo es bueno o malo ha llegado el momento de ponernos serios para recuperar al niño que fuimos como fuente de inspiración, de bondad y de compasión.
«Detrás de todo adulto encontramos un niño fabulador, vulnerable, que sigue esperando que le vayamos a buscar. Ha llegado el momento de ponernos serios para recuperar al niño que fuimos como fuente de inspiración, de bondad y de compasión»
Los profesores están empezando a trabajar en este ámbito. ¿Vamos en la buena dirección?
No lo sé porque hay retos muy grandes que nos deshumanizan demasiado, pero tengo claro que si esto se salva es únicamente por la enorme entrega y generosidad de los maestros. Esta mañana he trabajado con un equipo de profesores de Escolapios excelente, completamente entregado, motivado y curioso. Tienen un potencial enorme para seguir haciendo una gran labor.
¿Hay diferencia entre la educación de las grandes ciudades y la del medio rural?
Totalmente, pero no es un tema de la educación. El medio rural tiene todavía el gran tesoro de que la idea de comunidad está más establecida, todo el mundo se conoce más. La gran ciudad siempre deberá pagar el precio de ser anónimo en un lugar donde hay cientos de miles de personas más, y esto es una gran pérdida.
«El medio rural tiene todavía el gran tesoro de que la idea de comunidad está más establecida, todo el mundo se conoce más»

¡Enhorabuena, Jordi! Se necesitan muchos profesionales como tú. Y, tienes razón, la mayoría de nuestros maestros salvan la Educación.
Hola Jordi!!!!
Me encanta lo que dices y me gustaría que vinieras a la escuela de mi hijo
Pare manyanet de Sant Andreu
Barcelona!!!
Sería bueno conocer más sobre tu propuesta. Mandas información o existe una modalidad virtual. Soy de Argentina una provincia al norte (Tucumán)