Alacón sigue caminando para convertir sus deliciosas conservas en referentes gastronómicos; productos gourmet 100% locales que empezaron a ponerse en valor en la anterior legislatura. El último paso dado ha sido poner a la venta los primeros botes de alcachofas en colaboración con Apadrina un Olivo. La iniciativa olietana ha introducido en su ecommerce lotes de «alcachofas asadas a la leña con aceite de oliva virgen extra» bajo su marca propia «Mi olivo». «Vamos a ir poniendo poco a poco todos los productos, para que se conozcan. Están deliciosos y tenemos que ayudarnos entre nosotros. En el primer día de ponerlos a la venta ya vendimos 50 botes de alcachofas», explica Alberto Alfonso, de Apadrina un Olivo. «Trabajar en la comercialización con ellos es muy importante porque ya tienen herramientas y un nombre. No estamos partiendo de cero, que sería mucho más complicado», añade el alcalde de Alacón, Ricardo Alquézar.
A través de dos talleres de empleo titulados « Tierra y Vida», Alacón ha apostado por recuperar la tradición conservera de la localidad, aportar productos de calidad al mercado gastronómico y mantener la población. Además, el Instituto Aragonés de Empleo (Inaem) ha aprobado un tercer taller, que comenzará en la primavera de 2020.
Hasta ahora trabajaban en unas instalaciones particulares. Pero en este tercer taller de empleo, los alumnos comenzarán a usar la nueva conservera municipal, un espacio que se abrió al público durante el puente de la Constitución y para el que el Ayuntamiento busca fórmulas de explotación. El primer edil explica que barajan tres posibilidades: que se haga cargo la asociación local Cómete tu pueblo, llegar a un acuerdo con Apadrina un Olivo o encontrar a algún emprendedor interesado. «La cooperativa la hemos descartado porque los propios alumnos de los talleres sí están dispuestos a trabajar pero no quieren hacerse cooperativistas», indica. A priori, la opción de Apadrina un Olivo sería la más viable, ya que la asociación «Cómete tu pueblo» está formada por muy pocos socios.
La conservera se encuentra a las afueras de la localidad, en una antigua nave conocida como nave de la piedra porque se construyó junto a una cantera, y en ella se han invertido en los últimos años más de 100.000 euros del Fondo de Inversiones de Teruel.
Todo el ciclo, en el territorio
Este ambicioso proyecto partió del Ayuntamiento de Alacón con el objetivo de sacar al mercado un producto artesano de máxima calidad sin salir del municipio. Así, se cultivan los vegetales (pimiento, puerro, berenjena, tomate…) en los campos yermos de la localidad usando variedades propias y mediante procesos ecológicos, se asan en horno de leña (también cortada en la zona) y se embotan en la conservera con aceite de los olivos abandonados de la localidad.
En los dos talleres de empleo impartidos hasta ahora, una decena de alumnos han llevado a cabo plantaciones en terrenos yermos municipales y han trabajado en su asado, limpieza, preparación y embotado. Además, han recuperado del banco de semillas de Aragón un tomate exclusivo de la localidad que todavía aporta mayor exclusividad a los productos.