Cuatro trabajadores de Maessa, una de las subcontratas de la Central Térmica de Andorra, irán a la calle este viernes y solo uno de ellos será reubicado en Zaragoza. Además, la empresa, que se reunió este martes con los trabajadores, prevé entre 15 y 20 despidos el 20 de diciembre. En febrero, la contrata de la Térmica despedirá al resto de empleados hasta que la plantilla se quede con media docena de trabajadores. Así, las subcontratas de Endesa inician su proceso de abandono de la Central, que previsiblemente dejará de echar humo en enero.
Son medidas esperadas pero no por ello menos traumáticas. De los cuatro despidos de ayer -dos soldadores y dos montadores de estructuras- solo uno será reubicado en Zaragoza. La empresa alega cese de la actividad para hacer efectivos los despidos.
Reunión con Aliaga
La plataforma de los trabajadores de las subcontratas, apoyados por responsables sindicales de CCOO y UGT se reunirán este sábado con el vicepresidente del Gobierno de Aragón, Arturo Aliaga, en Andorra. La plataforma lamenta que no haya habido ningún avance con respecto a su futuro desde que se confirmó el cierre hace un año.
El sr. Aliaga y su partido PAR eran los que iban a impedir el cierre antes de las elecciones. Que le expliquen el sábado que ha pasado para no cumplir con su palabra.
La cosa no es culpa del PAr es culpa de PSOE Y UNIDAS PODEMOS. Prometieron trabajo público para todos y van desastabilizar España.
Te sugiero mires Youtube . Al Sr Aliaga y al Sr Millán, ( ambos del PAR). defendiendo a capa y espada la Termica. Al final agua de borrajas.
EL TEMA en si mismo es el que este momento estaba anunciado desde hacia años , se ejecuto un denominado PLAN MINER con bastantes millones de € ,, MUY MAL PLANIFICADO , desde el inicio solo fue ,todo un embrollo de muchos polígonos industriales sin PLANIFICACION DE NINGUN TIPO DE FUTURO – que tenga que decir estas cosas un Aragonés Artista Visual .. se como para que se les caiga la cara de vergüenza a muchos políticos ,, pero claro para eso primero hay que tener vergüenza