Ponz delante de un panel en el que se ven Alcañiz y todo el Bajo Aragón. Foto: L. Castel
Manuel Ponz se jubila después de 12 años dedicado a la Comarca del Bajo Aragón, en la que fue 8 años vicepresidente y presidente en los últimos cuatro
Después de tres legislaturas en la Comarca del Bajo Aragón, de la que ha sido presidente y vicepresidente; y concejal en el Ayuntamiento de Alcañiz se retira de la política con 64 años.
Cuando me marche en junio ya habré cumplido los 65 años, la edad de jubilación, motivo más que suficiente. Además, 12 años en política ya es un tiempo importante. Uno también se analiza a sí mismo y cuando ve que no se han cumplido todas las expectativas que tenía en estos cargos entiende que es el momento de dar paso a gente nueva.
¿Por qué entró en política hace 12 años?
Siempre he estado muy relacionado con la actividad de Alcañiz. Durante 8 años fui presidente del Nazareno, tiempo en el que se recuperó el pregón y el encuentro de cofradías ; también 12 años en el Alcañiz Club de Fútbol y entre seis y ocho años en el Club Patín. Me quise involucrar más y eso pasaba por el Ayuntamiento. El año anterior a las elecciones de 2007, al candidato del PSOE le propuse una persona que podía ser muy interesante para el Ayuntamiento y me preguntó por mí. Era gerente de una empresa de prefabricados y me tocaba salir mucho de viaje pero esa invitación me animó. Me afilié para esas elecciones.
Comenzó con 53 años, una edad no tan habitual ahora, cuando parece que la juventud es un valor.
Me apetecía trabajar más cerca de los ciudadanos. Además, el hermano de mi padre fue alcalde en el 38 y eso en mi familia lo tenemos muy presente
¿Qué ha aportado en estos 12 años?
Diálogo e información. Es parte de mi personalidad y ya me distinguía cuando anteriormente trabajé en la empresa privada. En la Comarca del Bajo Aragón a los portavoces de los grupos siempre les he trasladado todo, tanto lo bueno como lo malo. No me ha importado decir si el Gobierno de Aragón, bajo el mandato de mi partido, el PSOE, no cumplía con nosotros. Me voy muy satisfecho.

¿Y respecto al Ayuntamiento? Ha estado siempre en la oposición a excepción de dos años en la legislatura de Amor Pascual, en la que entraron en el gobierno y fue concejal de Cementerios.
Del Ayuntamiento me iré con sabor agridulce. Entré con ilusión y las circunstancias no me han permitido trabajar lo que me habría gustado. Aspiré a ser alcalde en 2011 y los ciudadanos, que no se equivocan nunca, dijeron que debía ser concejal de la oposición. Ahí no he tenido mucha suerte. 10 de mis 12 años he estado en la oposición y en las dos últimas legislaturas el equipo de gobierno no ha sido dialogante, totalmente contrario a mi forma de ser.
¿Y en los 2 años que fue gobierno?
Tampoco tuve una gran relación con la ciudadanía. Me voy satisfecho de toda la gente a la que he conocido pero no de mi gestión porque llegué con muchas ganas y, por distintas razones, mi bagaje ha sido muy corto.
¿Qué le habría gustado hacer?
Estar más veces en el gobierno. Lo que he intentado desde la oposición y no lo he conseguido es crear empleo. La bonanza de la construcción se terminó y faltan puestos de trabajo y no se hace nada para revertir la situación. Me voy sin conseguir que Alcañiz cuente con suelo industrial. Si una gran empresa quisiera instalarse no podría. Es cierto que los pueblos de alrededor, con el Miner, tienen más ventajas.
Ostentó Cementerios, una concejalía que fue más un castigo que una oportunidad para hacer cosas.
La ostenté con satisfacción y como si fuera la mejor delegación. Me habría gustado participar más activamente pero el equipo de gobierno me la asignó y yo soy muy disciplinado. Construí la marquesina de la parada de bus del Cementerio y ejecuté obras de accesibilidad en el interior. En los últimos ocho años he intentado colaborar a través de comisiones pero el gobierno no escucha a la oposición.
¿Cómo lo llevó?
Todo el mundo supo que después de haber sido invitado a participar en el proyecto las relaciones no fueron buenas. No es que fueran malas pero no hubo confianza. Claro que me hubiera gustado tener una asignación más importante. Desde el primer momento renuncié a ser concejal de Obras porque venía de una empresa del sector de la construcción pero en Desarrollo Económico podría haber podido aportar.
Al decir que las relaciones no fueron buenas, ¿está hablando de Ángel Lacueva?
Sí, no tuvimos un buen entendimiento.
¿Cómo fueron los dos años con IU?
No tengo malas vivencias con ningún compañero pero en aquellos años había mucho entendimiento con todos. No siempre pero al terminar muchos plenos nos íbamos a cenar todos los partidos pagando de nuestro bolsillo. Carlos Abril, una persona que había sido alcalde muchos años y que en ese momento era oposición tuvo un comportamiento ejemplar. Siempre intentaba unir a todos. Con Miguel Batanero, Chema Allué,… Ahora se ha ido degradando todo y ya no nos tomamos ni una cerveza e incluso no nos juntamos ni para la cena de Navidad. Ahí debe entonar el mea culpa el alcalde Juan Carlos, que nunca nos ha intentado unir. Hablo desde lo personal, porque en esos encuentros no hablamos de política. Ya perdió fuerza en la pasada legislatura y en la actual es nula total.
¿Cuándo es la última vez que se vieron fuera del Ayuntamiento?
Creo que hace dos años en Navidad. Para las últimas fiestas se pidió pero consideró organizarla. Ha sido muy negativo porque la relación personal no hay que perderla nunca.

Usted fue candidato a la alcaldía en 2011 por decisión del comité provincial pese a que Alfonso Callejero le ganó en las primarias locales por cuatro votos. También se desmontó el Comité local y se optó por una gestora provisional. Ocho años después, ¿cómo ve aquello? ¿sigue abierta esa herida?
Cualquier fraccionamiento dura años, es un tema que aún se recuerda en Alcañiz. En 2011 tuvimos una crisis muy grave y eso nunca se cura del todo, siempre queda.
Hablaba de que le queda la espinita clavada de no haber podido gobernar, ¿cree que las urnas le hicieron pagar la decisión del aparato del partido?
Cualquier crisis y, además, con conflicto, el ciudadano lo valora. Si en tu casa no te aclaras, ¿cómo puedo confiar en ti? No digo que influyera mayoritariamente pero estas cosas repercuten.
El aparato a nivel provincial paró lo que los militantes habían votado, una decisión que ahora se ha repetido pero a nivel nacional echando atrás en Ferraz la candidatura de Urquizu al Congreso.
Lo digo claramente, en aquel momento fui consciente de la decisión que tomé. Esa votación para escoger a nuestro candidato local no eran primarias como tal en aquel momento. Si parte de la Agrupación hubiera puesto a una persona relacionada con Alcañiz y que viviera en el pueblo yo no hubiera aspirado por seguir como candidato aunque no hubieran sido primarias oficiales. Fue un error presentar a una persona que vivía en Fraga, no era el adecuado.
Lleva 12 años en política, ¿de qué se siente más orgulloso?
De dialogar y poner a disposición de los grupos toda la información. De lo que ha ocurrido en estos años estoy satisfecho de Motorland y Technopark, que hacen más llevadera la crisis en materia de empleo y dinamización de la hostelería. También del plan de dinamización turística de la Comarca y los servicios de asuntos sociales.
¿Cuál ha sido su mejor momento?
Me siento orgulloso de mi toma de posesión como concejal. Logré lo que quería, que era trabajar para los ciudadanos aunque, como ya he dicho antes, no ha sido de plena satisfacción. En el ámbito comarcal, la relación con corporaciones y ciudadanos, he procurado estar en todos los actos.
¿Y el momento más triste?
El incendio de los montes de Alcorisa y Andorra, el fuego de La Siberiana y el desprendimiento de Pui Pinos. Tengo grabado en la retina cuando me llamaron del 112 entre las cinco y las seis de la madrugada y vi semejante mole de escombros.
¿Cuánto ha cambiado la política en estos 12 años?
En lo local hay respeto pero a nivel nacional tengo una decepción muy grande. El Congreso es una jaula de grillos en la que un día grita uno y al siguiente, otro. Se busca mucho el personalismo y figurar; y no se piensa en los ciudadanos.
¿Qué opina de la irrupción de nuevos partidos? La política cada vez está más fragmentada.
Hay que respetarlos pero veo extremismo. Podemos llegó con algunas ideas muy agresivas aunque no es lo mismo ser oposición que gobierno. Soy contrario a la prohibición, si algo no te gusta no vayas pero no prohíbas. VOX me preocupa porque se han conseguido muchas mejoras sociales y parece ser que ellos tienen una idea muy distinta. Por el momento todo son anuncios, está por ver.
¿Se valora la figura del político local? Usted es un habitual en todos los actos y muchas veces no se percibe bien este apoyo ni se comprende que resta tiempo a la vida personal.
La sociedad está muy confundida. A los políticos locales y comarcales nos toca los fines de semana acudir a actos en representación de las instituciones a las que pertenecemos. Yo voy encantado pero te priva de estar con tu familia. La gente ve que vives bien pero no que dejas de lado a los tuyos.
Usted ha seguido al pie del cañón pese a sufrir dos cánceres, de colon e hígado, que le fueron diagnosticados en 2015.
He sufrido dos operaciones y sigo con quimioterapia. Las cosas no van mal aunque no estoy curado totalmente. El hecho de que no ir a peor me ha permitido desarrollar mi labor y hago una vida bastante normal. El estar satisfecho con mi trabajo me ha servido de refuerzo. Excepto los dos meses de baja por las operaciones he venido a trabajar y acudido a los actos en los que tenía que representar a la Comarca y el Ayuntamiento.
¿Dónde le vamos a encontrar a partir de junio?
Si las fuerzas me acompañan me voy a mi casa. Quiero seguir participando en la agrupación local del PSOE y acudiendo a los plenos para ver a mis compañeros de todos los partidos. Podré disfrutar más con mi mujer, hijos y nietos; y me he buscado un medio complemento. Llevo jubilado desde los 63, lo que me ha permitido entrar en la Asociación de Jubilados, con la que haré alguna actividad por las mañanas.
Me parece una persona muy respetable y muy preocupada por alcañiz y la Comarca. Le tengo mucho aprecio. Y muy valiente en su vida personal. Q se recupere del todo.
Muchas felicidades Manolo. Alguna charrada hemos tenido y siempre han sido constructivas y provechosas. Deja la política una persona trabajadora, dialogante y siempre con ganas de llegas a acuerdos. Ahora a disfrutar de la familia. Un abrazo
Manolo tu y yo tenemos que seguir con un par, nos veremos paseando por la Glorieta del río, un abrazo.
un beso muy fuerte. Manuel para mi una persona muy cumplida para bueno y para lo malo.
Lo conozco poco, pero unos días que coincidí con el, me pareció un buen tipo,