«¿Cómo se puede ser tan feliz con un poco de música de fondo, un trozo de madera y alguna herramienta?» Esta es una pregunta que formula el músico Pablo Morales. Este caspolino de 34 años vive por y para la música y los instrumentos.
«Siempre me ha gustado la música folk. Desde pequeño la escuchaba y sentía curiosidad por los instrumentos y quienes los hacían sonar así, quería saber cómo podría yo hacer lo mismo», cuenta este joven licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Valencia, que aplica sus conocimientos artísticos a la fabricación artesanal de instrumentos.
Él ha conseguido, a base de trabajar y ser creativo, convertir lo que fue muchos años su pasión en su profesión. Pero además de artesano, Pablo Morales es músico, escultor, artista, profesor de dibujo y de música, y también ha dado clases de forja. Él mismo se autodefine como un ‘luthier’ (una persona que construye o repara instrumentos de cuerda). Fabrica principalmente gaitas, flautas, dulzainas, y violas. Sin embargo, como músico sabe tocar esos instrumentos y muchos más, como el piano, la guitarra, el violín, o el chelo. Su estilo musical es tradicional, folk, medieval y celta.
Trabaja mayoritariamente con la madera, con boj y olivo (propios de la zona de Aragón), el cocobolo y el granadillo africano. Situado en el Poblado de Pescadores, a escasos kilómetros de la Ciudad del Compromiso, se encuentra su modesto taller. En él trata con cariño y esmero la materia prima, que poco a poco con la maquinaria y proceso específico necesario, va tomando forma de instrumento musical. Ha llegado a fabricar hasta 200 instrumentos en los pocos años que lleva dedicándose a ello de manera profesional.
Pero no solo utiliza los métodos tradicionales sino que últimamente va más allá y está experimentando con nuevas maneras de fabricación, como las impresoras 3D, y también le fascinan los instrumentos más innovadores como las gaitas eléctricas. «Hay gente que todavía le cuesta entenderlo pero hay que evolucionar e ir más allá de lo convencional, entonces conseguimos otras ventajas que antes eran impensables», explica el artesano caspolino.
Una gaita de boto aragonesa fabricada por Pablo Morales, en un escenario gallego. Una viola y fídula en 8, elaboradas por Pablo Morales.
Amigo de Carlos Núñez y familiar de Ara Malikian
Personas de su entorno y de su familia también se dedican al mundo de la música. Es primo de Augusto González, de B Vocal, también de la productora y actriz Natalia Moreno (esposa del famoso violinista Ara Malikian), y es muy amigo del conocido gaitero Carlos Núñez.
Este último es uno de sus principales referentes, junto a los grupos Luar na Lubre, El mantel de Noa, o Lurte. Caspe es todo para él: «Es mi vida, mi lugar, mi gente, la familia…». Le gustaría quedarse en su pueblo natal y poder trabajar desde allí en su taller. Envía sus instrumentos a muchas partes de España y también fuera de nuestras fronteras y se está haciendo un nombre poco a poco.
Es un vecino muy activo y colabora durante el año en un gran número de eventos y actividades con asociaciones locales. También participa en conciertos y exposiciones por todo el país. La pandemia ha afectado gravemente al sector musical, aunque Morales quiere ser positivo: a pesar de cancelarse muchos conciertos y actuaciones, ha podido fabricar un gran número de instrumentos (unos 40 en el 2020).