Balcones, terrazas, corrales, ventanas… cualquier lugar ha sido bueno esta tarde para que el Bajo Aragón Histórico haya hecho sonar sonar sus tambores y bombos, declarados Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2017. Albalate del Arzobispo, Alcañiz, Alcorisa, Andorra, Calanda, Híjar, La Puebla de Híjar, Samper de Calanda y Urrea de Gaén han sonado al unísono aunque a kilómetros de distancia a las seis de la tarde.
A esa hora las nueve localidades tendrían que haber dado comienzo al acto de exaltación de las Jornadas de Convivencia de la Ruta del Tambor y Bombo, que este año se celebraban en Alcañiz. El coronavirus las suspendió pero los bajoaragoneses no han querido perder la oportunidad de tocar hermanados al igual que ya hicieron la semana pasada por Alcorisa, que iba a organizar las Jornadas Nacionales.
En Alcañiz, los tamborileros que han salido a sus balcones y terrazas a redoblar, han recordado a Manolo Ponz que fue presidente de la Hermandad del Nazareno fallecido en la tarde del sábado luciendo en sus tambores un crespón negro.
La suspensión de sus jornadas, al igual que la Semana Santa, han supuesto todo un mazazo para un territorio que tiene en el tambor y el bombo su gran seña de identidad. Sin embargo las ganas de seguir redoblando, aunque sea desde casa, han hecho resurgir numerosas iniciativas durante estos días y para la Pascua.
2020 es un año especial ya que la Ruta del Tambor y Bombo, la asociación que engloba a los nueve pueblos y que trabaja por la pervivencia y el fomento del toque, cumple 50 años. «La valoración es muy positiva porque, aunque no hemos podido tocar unidos, a través de las redes sociales hemos visto que la convocatoria ha sido todo un éxito», ha afirmado Fernando Galve, el presidente de la Ruta, quien se estrena este año en el cargo.
La Ruta decidió suspender las Jornadas y, una vez termine el estado de alarma, la junta, formada por alcaldes y vocales, se reunirá para tomar por unanimidad «la mejor decisión» sobre qué pueden hacer. «Ahora es tiempo es agradecer su trabajo a los sanitarios, fuerzas de seguridad y todos los profesionales implicados en la lucha contra la pandemia y cumplir con el confinamiento. Cuando todo termine, que esperamos que sea pronto, lo valoraremos», ha explicado el andorrano.
Lamentablemente no nos estamos tomando en serio el coronavirus.
Yo estoy en contra de la cuarentena, pero aquí les encanta la idea de estado militar y poner multas al que salga a la calle.
Yo ya no creo que sea de izquierdas ni de derechas, hay países como Suecia u Holanda que han decidido que nada de cuarentena.
Se tendría que inyectar dinero y recursos a sanidad en lugar de joder el país…
Estos pensamientos…