Se están colocando 37 pilotes de compactación de hasta 14 metros de profundidad para sostener la estructura del Cuartelillo en el marco de las obras del cerro Pui Pinos, que en unos días cumplirá seis años de su desprendimiento.
Las obras de estabilización del cerro caminan hacia la mitad de su ejecución, según precisó el Ayuntamiento este jueves en una nota de prensa. Todo el hormigón inyectado en la montaña a través de los 37 pilotes cimentará la instalación posterior de 87 pantallas protectoras con las que se concluirá la parte más delicada de estas obras, iniciadas hace nueve meses. Alrededor de 5 millones de euros se invertirán en esta fase, de la que aproximadamente se encuentran certificados un 40%, y que en estos momentos centran su atención en el entorno de la muralla del Cuartelillo, donde se están llevando a cabo labores de recalce para reforzar el asentamiento de los pilares.
La estabilización del cerro concluirá a la vuelta de este próximo verano y «mucho antes» se realizará la reapertura del Corcho, para la que se está analizando ya el plan de tráfico correspondiente; aunque aún no se ha concretado fecha.
El factor fundamental de este plan estriba en la convivencia del tráfico alcañizano habitual con el volumen de vehículo pesado que realizará el traslado del escombro que se va generando con las obras y que se seguirá generando durante los próximos meses, toda vez que para la instalación de las futuras pantallas protectoras se removerá más material de la montaña. La tormenta con granizo y tornado que descargó sobre Alcañiz el pasado junio ocasionó desperfectos de consideración en numerosos lugares de la ciudad, entre ellos más afecciones en esa ladera sur del cerro que se derrumbó parcialmente en abril de 2017.
Las primeras labores, durante los primeros meses de ejecución, se centraron en la demolición de material del propio cerro, aquellas partes que quedaron más dañadas tras la tormenta del verano pasado, una limpieza y desescombro que permitió dibujar espacios diáfanos paralelos a Muro de Santiago con los que se pudo abrir espacio de trabajo para desescombrar e instalar esos 37 pilotes de refuerzo así como las infraestructuras anexas de mejora del estado de Pui Pinos con los que el Ayuntamiento de Alcañiz espera que se minimicen los riesgos en el futuro.
Tras ese primer desescombro, la perforación de esos 37 pilotes ha permitido inyectar una relevante cantidad de hormigón y compactar los espacios más inestables de Pui Pinos, estructura que permitirá además levantar hasta 87 pantallas que abrazarán por completo el costado sur del cerro.