El profesor titular de Medio Ambiente y Sociedad de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Nacional a Distancia (UNED), Emilio Luque Pulgar, acudió al acto inaugural del nuevo curso 2019-2020 de su delegación caspolina el pasado mes de noviembre. En el encuentro, el profesor impartió una conferencia titulada «La cuestión intergeneracional en el cambio climático».
Hace unos años usted impartía la interesante conferencia ‘El silencio climático’. ¿Cree que en la actualidad hay más toma de conciencia en la sociedad?.
Nos ha pasado el ‘efecto Thunberg’ en alusión a esa niña sueca llamada Greta Thunberg. Ella ha conseguido catalizar lo que lleva ocurriendo desde hace muchos años, ha puesto una cara pública al problema y eso es muy positivo. De ahí que hable ahora de la ‘Cuestión intergeneracional’. Son ahora los jóvenes los que han cogido la voz cantante y los que están avisando y culpando a sus mayores del planeta que han dejado. Todos hemos visto ese discurso de Greta Thunberg en el que nos interpela enfadada, de parte de los jóvenes, y nos pregunta cómo nos hemos atrevido (los adultos) a robarles su futuro.
¿Los jóvenes tienen a día de hoy una mayor conciencia ecológica que los mayores?.
Creo que sí. Los adultos han reaccionado a ese discurso de Thunberg, algunos de manera negativa, pero la verdad es que ella tiene toda la razón. Efectivamente ahí hay una cuestión intergeneracional de una generación como la mía, que ha hecho muy poco a pesar de estar cada vez más avisada del problema. En realidad estos avisos ya comenzaron en el año 65. Por eso tienen todo el derecho estos niños de criticar que su futuro va a ser mucho más complicado (en el mejor de los casos). Si todo va bien, el futuro va a ser muy diferente de lo que hemos visto hasta ahora.
¿Cree que somos conscientes de la gravedad del problema?.
Es algo tan complicado, tan grave y tan global, que seguramente ninguno estamos lo suficientemente capacitados a entender la magnitud del problema. Realmente es un reto.
¿Confirma lo que dicen los científicos de que estamos en un punto de ‘no retorno’?.
Si hablamos desde una perspectiva científica y climatológica, sí que es cierto que habrá factores que hagan que el cambio climático sino imparable, irreversible. Eso es algo que tenemos ya más o menos cerrado. La cuestión es que tenemos muchas posibilidades en cuanto a futuros. Lo importante es pensar que no está todo perdido: en absoluto. Todavía podemos reaccionar, hay muchos puntos distintos de ‘no retorno’, y dependiendo de al que lleguemos, tendremos que enfrentarnos a mayores y menores sacrificios.
Ya vemos las consecuencias del cambio climático en lugares de costa con el cambio de nivel del mar, se derriten los casquetes polares, hay más huracanes… Aquí, en nuestra zona en concreto del Bajo Aragón Histórico, ¿cómo las percibimos?
No es que vayan a ocurrir cosas distintas a lo que pasaba antes. Sino que ahora ocurrirá con mucha más frecuencia, intensidad y gravedad. Eso es lo que tenemos que percibir. En esta zona son los agricultores, las personas dedicadas al campo son las más conscientes por ejemplo del cambio de temperaturas. No es que estén subiendo o bajando décimas todos los días, sino que cada vez hay más jornadas en las que las temperaturas se vuelven extremas. Lo mismo con las precipitaciones, las heladas… Vamos a ver que hay más sequías, más intensas y más prolongadas. Ya sabemos que estos cambios extremos afectan negativamente a las cosechas.
Todavía hay personas que dudan de que esto esté ocurriendo de verdad.
Lo que está claro es que es un hecho demostrable y que ya estamos viendo las duras consecuencias que está teniendo. Quien a día de hoy lo está negando probablemente lo que le ocurre es que no quiere cambiar su estilo y forma de vida, o el tipo de políticas que se están llevando a cabo. Es más una resistencia reactiva de esos cambios, que deberían ser obligados.
¿Qué podemos hacer al respecto?, ¿cuáles son las soluciones?.
Por un lado está la tarea de científicos y expertos, que ya la están haciendo y de manera muy notable. Luego está la de los políticos y la ciudadanía. Creo que hay una tendencia que viene dada del ‘ecologismo ascético’ de los años 70-80. Se trata de reciclar, consumir menos carne… de lo que podemos hacer todas las personas de a pie. Diría que la capacidad de acción que podemos hacer como ciudadanos es inmensamente mayor que todo eso. Como colectivo tenemos que creer que hay un problema muy grave, tenemos que aceptar esa urgencia e informar a los políticos que tienen que cambiar muchas cosas y muy rápido. Ese es nuestro primer trabajo: entender esa urgencia y aceptarla. Eso es lo que necesitamos.
Jose Luis del Valle-Iturriaga dice
Es tiempo de acción y no de más palabras
Acción de los gobiernos y empresas desde luego, pero sobre todo acción de las personas como tú y yo… hay que cambiar los hábitos de consumo y de ocio.
El clima es responsabilidad nuestra.