Los Amigos de Iranzo, indignados, piden que se investigue. Norbert Feher asegura que tuvo cómplices que le ayudaron a escapar de Italia y que empleó varios vehículos
Las últimas informaciones que han trascendido acerca de Norbert Feher, el autor confeso del triple crimen de Andorra, han sido recibidas por los Amigos de José Luis Iranzo con profunda indignación. En la última declaración realizada por videoconferencia ante el juzgado de Italia desde la cárcel de Zuera, Igor el Ruso aseguró que llegó al Bajo Aragón para «hacer negocios». También, que varios cómplices le ayudaron a escapar de Italia y cruzar Francia hasta llegar a España.
En la información, a la que ha tenido acceso el diario digital «El Español» y que firma la periodista andorrana Ana I. Gracia, se explica además, que Feher aseguró que su destino antes de viajar a Valencia era llegar hasta Híjar porque «tenía asuntos que hacer allí». Cabe recordar que entre los enseres encontrados por la Guardia Civil durante su detención, se localizó un mapa europeo que tenía marcada una ruta que arrancaba en Bolonia y finalizaba, precisamente, en la capital del Bajo Martín.
Desde la plataforma Amigos de Iranzo señalan que estas declaraciones no hacen más que confirmar que todavía quedan muchas cosas por aclarar. «No sabemos nada sobre ello y la pregunta es ¿por qué no investigan y no informan? ¿No les dejan?, ¿la verdad les compromete?, ¿por incompetencia?…», se pregunta uno de los portavoces de la plataforma, Luisma Alquézar.
Igor el Ruso continúa con la declaración y fija Valencia como su destino final, una zona donde tiene «muchos amigos». Conocidos a los que no puede delatar porque son los que ahora pagan a su abogado. En este sentido, hace unas semanas la Audiencia Provincial de Teruel desestimó, de nuevo, investigar si Feher tuvo cómplices que le ayudaron durante su huida. «Esto se está convirtiendo en algo inaguantable. Que tengan ser periodistas y la gente de a pie quien intente saber qué pasó en esos días, mientras los que tendrían que hacerlo se limitan a callar, la verdad es que se torna inaceptable y vergonzoso», añadió el andorrano que aseguró que se pierde más tiempo en tapar flagrantes responsabilidades que en saber detalles. Consideran que se podría comprometer más aún a este asesino si hay gente que podría haberle dado soporte. «Es inaceptable, la gente estaba inquieta por la situación de esos días y no se le hizo caso».
La plataforma continúa recibiendo adhesiones a su manifiesto. Con todos los apoyos por escrito irán de nuevo a Subdelegación para reivindicar que se investigue lo sucedido y el dispositivo que se desplegó entre el 5 y el 14.
Una huida de Feher con teléfonos, cómplices y vehículos
Hechos como que entre el 5 y el 14 de diciembre ardiera una furgoneta siguen sin esclarecerse. «Llevaba matrícula extranjera y nadie la ha reclamado ni se ha investigado de dónde pudo salir», lamentó el portavoz. En la última información de la que se hace eco «El Español, Feher tampoco entiende el motivo por el que debía abandonar Albalate tras el intento de asesinato. «¿Por qué? La naturaleza es mi casa», añade. Da a entender que llegó a España en un vehículo en el que podía llevar su bicicleta.
También revela que El Ruso usaba varias líneas de teléfono a la vez y distintos tipos de mensajería para contactar con aquellos que le daban soporte en su marcha. Mismo método que también utilizaba para comunicarse con su familia, a la que afirma que no ve desde que en 2001 escapó de Serbia acorralado ya por la justicia. Asegura que cruzó España en bicicleta «y con otros medios», -vehículos destartalados facilitados por «amigos»-, los mismos que utilizó para escapar de Italia y atravesar Francia. Dice que en cuanto le dieron el vehículo tras asesinar a una persona en Italia, se fue. Esta versión contradice la única línea de investigación que mantiene hasta hoy la Guardia Civil: que pasaba por Teruel de casualidad cuando fue sorprendido por sus víctimas, que siempre estuvo solo, que no usó los teléfonos ni su Facebook personal y que únicamente se abasteció de una bicicleta para cruzar España.