Los daños por el temporal siguen lastrando el día a día del sector primario bajoaragonés. El olivar está gravemente dañado, con pérdidas del 50%, y numerosas granjas siguen paradas a la espera de la tramitación de los seguros. Para paliar los daños piden respaldos concretos, apoyos fiscales y ayudas finalistas.
Así se lo han hecho saber este lunes los afectados en varios pueblos que ha recorrido una delegación del Partido Popular de Aragón encabezada por su máximo responsable, Luis María Beamonte. El líder del PP ha reclamado ayudas directas para el sector primario tanto al Gobierno de Aragón como al de España. Para los populares, los créditos blandos sin intereses anunciados por DGA se quedan cortos y no ayudan a salir adelante en casos como los ganaderos que tienen que reconstruir los tejados o los agricultores que han perdido la mitad de la cosecha del olivar en los próximos tres o cuatro años.
Después de reunirse en los últimos días con diversos sindicatos del sector, los populares han registrado una iniciativa parlamentaria en las Cortes de Aragón para que se aprueben las medidas que reclaman los productores, como la reducción de módulos al 0% en la renta de Personas Físicas para actividades agrícolas para todos los cultivos leñosos de las comarcas afectadas, bonificaciones en los pagos de la Seguridad Social y que se compense a los ayuntamientos que reduzcan el Impuesto de Bienes Inmuebles de carácter rústico.

El presidente del PP de Aragón ha recorrido por la mañana un campo de olivos en Castelserás y después se ha reunido con las comunidades de regantes de la zona en Alcañiz. Por la tarde, ha conocido las afecciones en Valderrobres y se ha reunido con afiliados y cargos públicos en la capital bajoaragonesa. «Con la cantidad de afecciones que deja el temporal, el Gobierno de Aragón no puede cumplir tan solo con 10 millones de euros para créditos blandos porque es dinero que los agricultores después deben devolver. Se necesitan otro tipo de incentivos para ayudarles», dijo Beamonte, quien hizo una férrea defensa de la importancia del sector primario tanto en la actualidad como durante la última crisis económica y puso el foco en la necesidad de una PAC seria y de garantizar unos precios que sean justos.
Dijo que los gobiernos deben comprometerse con los agricultores y ganaderos, un sector que «ha aguantado el tipo en los momentos difíciles de la crisis y seguir fortaleciéndolo porque es uno de los pilares básicos de nuestra economía».
«No queremos ser monos de feria»
El alcalde de Castelserás, Óscar Soriano, ha sido el cicerone de sus compañeros populares en la Comarca del Bajo Aragón y las Cortes. Ha llevado a la comitiva liderada por Beamonte a un campo con muchas ramas en el suelo para ejemplificar que en su localidad se va a perder alrededor del 50% de la producción de los próximos 3 ó 4 años. «El 52% de los vecinos de Castelserás se dedican al campo, van a tener problemas serios. Nos gusta vivir del sector primario, no queremos depender del turismo rural ni ser monos de feria para que vengan a ver nuestras costumbres. Queremos vivir de lo nuestro, que es el campo, pero nos encontramos con una importante indefensión de las autoridades, que se han olvidado de nosotros», dijo Soriano.
En un tono mucho más duro y sarcástico, Soriano reclamó ayudas directas y no solo créditos blandos que calificó de «medida trampa». «El precio del dinero va barato, a DGA les sale medio gratis. Las olivas del suelo se pagan a 18-20 céntimos y para recogerlas hay que sacar antes las ramas, lo que supone un sobrecoste por la mano de obra. Podemos pedir crédito para eso pero, ¿vale la pena para recoger a 18 céntimos el kilo? Seria ridículo y contraproducente», se preguntó el alcalde de Castelserás, quién pidió que «de una vez» se cuide a los agricultores «si de verdad se quiere salvaguardar la población» en los pueblos».
Soriano también puso el foco en que la administración no dio suficiente tiempo para que ayuntamientos y particulares evaluaran los daños antes de mandar la cifra de daños a DGA. En su caso, recibió una llamada el domingo 25 por la tarde en la que, después de pedirle «disculpas», le urgían a que remitiera un balance de perjuicios públicos y privados al día siguiente antes de las once de la mañana.
A su vez, el Sindicato Central de Riegos del Guadalope y las comunidades de regantes de Valmuel y el Canal Calanda-Alcañiz (estaban todas invitadas) trasladaron al PP las afecciones que sufrirán a partir del próximo año por el cierre de la Térmica. El canon más el coste de la elevación supondrá un extra de 103 euros por hectárea que, en el caso de que Endesa no quiera abonar su parte de la obra de Santolea, ascenderá a 207 euros/hectárea.
Ahora veremos si hay para la gente trabajadora. Creo que se lo han llevado todo los de mí empresa existe