Tengo casi 80 años y me entristece mucho ver que los bancos se han olvidado de las personas mayores como yo. Ahora casi todo es por internet», así arrancaba la petición de recogida de firmas de Carlos San Juan de Laorden, urólogo y cirujano de 78 años que ha lanzado un alegato en la plataforma digital change.org que ya cuenta con más de 350.000 firmas.
Inmersos en la velocidad de la transformación digital hay algo que, como bien apunta San Juan, acabamos olvidando. En concreto, pasan a un segundo plano nueve millones de personas en España mayores de 65 años. El cierre masivo de entidades bancarias ha provocado una exclusión financiera que, entre otros, afecta a las personas mayores con bajo nivel económico y escasos conocimientos financieros. Una ausencia que se hace especialmente patente en zonas rurales, con menos densidad de población y, por lo tanto, menos rentable.
Adiós a la atención humana. Atrás quedan esos días en los que mi abuelo, libreta en mano, aprovechaba para ir a ver «al de la caja» para acceder a sus ahorros. El abuelo Eulogio, pasaba de ser «El Pajaritos» para ser tratado como Don Eulogio. Entraba en el banco, con su camisa de domingo y el director de la sucursal salía amable a recibirle, como a tantos otros.
Ahora, cuando Don Eulogio quiere acceder a sus ahorros, hacer un ingreso o simplemente comprobar cuánto dinero tiene debe pedir cita previa, llamar por teléfono o ir al cajero. Para un octogenario no es tarea sencilla interactuar con la pantalla, ni con el batiburrillo de aplicaciones, contraseñas y autenticaciones que conforman la operativa digital de los bancos.
Por el momento los «Dones y Doñas» demuestran que son una generación fuerte y ejemplar, tanto que, el Gobierno ha urgido a los bancos a garantizar la inclusión financiera a los mayores en respuesta a la petición de Carlos San Juan de Laorden.
Isabel Esteban. Las cosas que importan
Pascual F. dice
Comenzare diciendo que lo que dices es así, ciertísimo.
Pero quiero añadir lo que yo creo que es nuestro comportamiento y el de los mandamases de los bancos. Entiéndase por mandamases los que deciden las líneas maestras de lo que va a ser el funcionamiento y estrategia del banco, no el que esta de director de oficina, aunque a veces algunos de esto también podrían hacer algo mas por los clientes, pero repito, no me refiero a estos.
Comenzare por estos últimos. Su visión hacia los clientes pobres, es de total desprecio, somos chusma y como a tal nos tratan.
Los clientes somos la leche, arremetemos con nuestra mala leche contra el de la ventanilla, que es tan pringado como nosotros. Si sale el director el tono se suaviza. Si viniera el de Madrid le invitaríamos a café. No se me molesten es lo que se ve, hacia unos y hacia otros.
Esperemos que el gobierno de turno tome nota y les obligue como poco a una atención suficiente, digna y eficaz.
En cuanto a la iniciativa de Carlos San Juan, diré que es digna de todos los agradecimientos posibles, pero para que ello funcione ni un solo españolito debería de dejarse de aportar su firma, mas aun los de los pueblos, que estamos mas jodidos, pero claro si esperamos a que protestes tu para aprovecharme yo, pues a joderse tocan.
JCB dice
Una buena solución , seria sacar todo el dinero de las cuentas, de todos los bancos que no den un servicio, correcto y educado como debe ser, a las personas mayores.
Ya veriais como iba a cambiar la cosa……