El 2 de diciembre de 2021 no se olvidará ni en Utrillas ni en el todo el territorio bajoaragonés con el pitido final del partido copero que anoche enfrentó al Utrillas con el Valencia, una cita en la que los mineros plantaron cara en los 90 minutos sobre el césped. Y es que, llegar al descanso solo con un gol en contra ante un Primera, «no está nada mal».
El conjunto minero vivió su gran noche y con ellos, miles de personas que llenaron las gradas para el gran momento. «¡Vamos Utrillas, sí se puede, esto es La Vega!», así, con cánticos como este, la afición local caldeó el ambiente desde horas antes del inicio del encuentro. De hecho, estuvieron animando durante buena parte de la tarde hasta que a las 19.30 el balón comenzó a rodar en La Vega y el sueño copero del C.D. Utrillas empezó a sumar minutos. En ese preciso momento, el ambiente se convirtió en ambientazo durante 90 minutos.
En una fría noche con una sensación térmica de -4º, más de 2.000 utrillenses en las gradas se encargaron de dar calor a un equipo local que durante el inicio, completamente motivado trató de competirle de tú a tú al Valencia, conjunto ocho veces campeón de la Copa. Eso sí, poco a poco, como es lógico, el visitante fue imponiendo su ley aunque sin crear demasiado peligro en la meta utrillense.

Con esta situación el partido iba a llegar al 30», momento en el que los visitantes se adelantaron con un gol de Marcos André a un remate de un centro lateral proveniente de la derecha. El gol no arruinó la noche a nadie ya que el Utrillas y su gente estuvieron dispuestos únicamente a disfrutar de lo que viniese.
Pasaron los minutos pero grada y equipo siguieron siendo uno. Y justamente esa es la clave para un Utrillas que continuó haciendo su partido y dejando unas buenas sensaciones, especialmente en aspecto defensivo.
Con el 0-1, con La Vega protestando cada una de las jugadas interpretativas e incluso con un segundo gol anulado por fuera de juego a Marcos André en el 42», se llegó al descanso en el municipal.
En la reanudación, la historia siguió igual. El Utrillas, concentrado y muy motivado por su gente, continuó dejándose todo en cada disputa. Aún así, la suerte no acompañó a los de las Cuencas Mineras ya que un remate del valencianista Cheryshev desde la frontal en el minuto 50 se convirtió en un penalti en contra del equipo local por mano de uno de sus defensores.

Desde los 11 metros, el jugador ruso del Valencia se enfrentó a Lainez, que terminó convirtiéndose en un héroe local parando el disparo y haciendo vibrar a toda la grada minera. Eso sí, no duró mucho el subidón en La Vega ya que Yunus Musa alcanzó el rechace y anotó el 0-2 de manera inmediata.
Ese 0-2 sí que hizo más daño al equipo de Pitu Lerga, que ya iba acusando los minutos y la intensidad inicial. De esta manera, ya en el último cuarto de partido, el Valencia echó el resto y comenzó a asediar la portería del equipo minero, que acumuló muchos minutos sin pasar de cambio propio. Ante tal panorama, el que siguió luciéndose fue Lainez, el meta local que fue sin duda el más destacado del conjunto utrillense.
La sentencia goleadora del conjunto che llegó en el minuto 71. Salió de las botas de Koba de una falta directa que pasó por encima de la barrera y entró en la red local.

Más allá de eso, el partido se enfrió en los últimos 20 minutos en los que no ocurrió mucho más. Finalmente, en torno a las 21.20, el partido se cerró con el 0-3 favorable a los ches y con la fuerte ovación de los aficionados locales a sus jugadores. Vítores a los que se sumaron afición y equipo rival.
Utrillas cerró una noche que se queda para el recuerdo y en la que su imagen fue proyectada a miles de televisores a través de la emisión en directo de las cámaras de Mediaset y la retransmisión de todas las emisoras de radio nacionales.
Hermanamiento entre equipos
El ambiente inusual en las calles se palpó desde primera de la jornada. Incluso a mediodía sonó por la megafonía municipal el himno del C.D. Utrillas. Los aficionados de ambos equipos se vieron por primera vez las caras a las 16.00 en la plaza del Ayuntamiento, donde se citaron para hermanarse.
Humildes, Pero valientes.
viva utrillas y su gente.