Bueno, amigos y perseverantes lectores, ya sé que es algo raro y difícil de creer, pero si hay algo que me ha dejado muy claro la lectura de «LA ANOMALÍA» del frances HERVÉ LE TELLIER es que, en verdad, no está todo escrito. Y es que esta novela, iconoclasta y, decididamente, sin género que la contenga es una auténtica caja de sorpresas. Una novela brillante, inteligente, virtuosa, divertidísima, vertiginosa…, y de una profundidad que socava los límites de la lógica. Con un ritmo endiablado, a caballo entre el relato de aventuras, la novela futurista y la fábula perturbadora, «LA ANOMALÍA» nos invita a reflexionar, con grandes dosis de humor y de ingenio, sobre el destino y los límites de nuestra existencia. Es, en definitiva, diferente.
La trama, someramente, es así: El 10 de marzo de 2021 los doscientos cuarenta y tres pasajeros de un avión procedente de París aterrizan en Nueva York después de atravesar una tormenta. Ya en tierra, cada uno sigue con su vida. Tres meses más tarde, y contra toda lógica, un avión idéntico, con los mismos pasajeros y la misma tripulación, pide permiso para aterrizar en el mismo aeropuerto. No es el mismo avión tiempo más tarde, no…; es el mismo anterior a los tres meses. Es imposible, pero está ahí: está por duplicado. Nadie, en verdad, se explica este increíble fenómeno que va a desatar una crisis política, mediática y científica sin precedentes, en la que cada uno de los pasajeros podría encontrarse cara a cara con sí mismo, o con una versión distinta de sí mismo. Así que se decide adjudicar al caso «El protocolo 42″… Y ya está, no puedo contar más. Porque además de estos hechos principales, el autor nos ofrece las distintas perspectivas de los pasajeros del avión, lo que nos lleva a una suerte de enredo entre los primeros, los segundos, los primeros cuando el tiempo ha llegado al momento de los segundos… y nos deja una novela que uno no sabe cómo catalogarla; sólo sabe que ha habido muy pocos escritores que se hayan atrevido a adentrarse en estas tramas y hayan salido con éxito (Bioy Casares, Philip K. Dick…).
Pero el éxito es lo que le ha sonreído a este escritor, crítico literario, editor y matemático de 63 años, puesto que por esta novela le ha sido concedido el Premio Goncourt, convirtiéndose en la sorpresa literaria del año en todo el mundo. Perteneciente al grupo experimental «Oulipo» -fundado a principios de los 60 por Raymond Queneau y que ha contado con autores tan ilustres como Perec y Calvino-, ha publicado más de 20 obras, entre cuentos, poemas y ensayos, aunque, hasta ahora, ha sido un desconocido para el gran público.
Con esta genialidad, verdaderamente entretenida, LE TELLIER, mientras hace bailar los destinos de sus personajes, nos pone ante el espejo explorando las fronteras de lo real y lo probable. ¡Magnífica!
Miguel Ibáñez. Librería en Alcañiz