Durante el carnaval, varias personas accionaron extintores y ensuciaron las instalaciones
La localidad de Maella amanecía alarmada el domingo después de la celebración del Carnaval por un nuevo acto vandálico que obligó a cerrar las instalaciones del pabellón municipal durante toda una jornada, a pesar de que iba a utilizarse aquel día para distintas actividades públicas.
Los hechos ocurrían la noche del sábado, durante la celebración de la fiesta de disfraces, cuando varias personas (cuya identidad todavía se desconoce a día de hoy), decidieron accionar los extintores de emergencia, provocando una lluvia de polvo químico seco que se utiliza para apagar un fuego, además de molestar y ensuciar a las personas que se encontraban en el lugar. A la mañana siguiente, el pabellón municipal mostraba un aspecto sucio con todo el suelo lleno de este material blanco, nada peligroso para las personas pero sí muy sucio y complicado de limpiar.
Por este motivo, las instalaciones tuvieron que cerrar durante toda la jornada del domingo, lo que provocó la suspensión de varios entrenamientos deportivos, como el del equipo de gimnasia rítmica, y la cancelación de varias actividades que estaban programadas para ese día.
«Esto supondrá un desembolso económico innecesario puesto que ahora tendremos a varias personas de limpieza trabajando durante horas, además del inconveniente de tener que cerrar las instalaciones», aseguró el alcalde de la localidad, Jesús Zenón Gil.
«No es la primera vez que ocurre algo parecido». Gil recordó cómo, hace seis o siete meses, en otra celebración festiva en el mismo lugar, varios individuos rompieron las puertas de varios baños de las instalaciones. «No es el valor, sino el respeto lo que está en juego aquí», aseveró el alcalde.
Además, el representante municipal denunció que durante esa misma noche del domingo, después de la fiesta de celebración del Carnaval de Maella, también se ensañaron con el edificio del colegio público Virgen del Portal, donde rompieron una ventana y la persiana de un lateral. Otro acto vandálico que deberá solucionar el propio centro educativo. «Es una vergüenza que ocurran cosas así», opinó. Las autoridades dudan de si los autores de este segundo acto pertenece a las mismas personas que el primero de ellos.
La autoría de estos actos vandálicos todavía se desconocen, , al no haber pruebas determinadas, aunque la Guardia Civil los ha investigado.