CEPYME Aragón muestra su preocupación y descontento por la «demonización» que, en su opinión, se ha realizado de nuevo sobre determinados sectores con el regreso a la fase 2 modulada anunciado para este viernes en Aragón. La reducción de aforos y, sobre todo, la prohibición del consumo en barra suponen un varapalo para los pequeños hosteleros ya que el 60% de los bares no disponen de terraza. «No ha pasado ni una semana desde que se habilitó dicho consumo, con los cambios organizativos que ello implica para los empresarios, y ya se ha echado marcha atrás», asegura la patronal en un comunicado.
Reclama medidas sanitarias preventivas, como cribados en la población objeto del repunte, en lugar de medidas a posteriori «contra la actividad económica, especialmente en los sectores más castigados por esta crisis, que nada tienen que ver con el origen de los contagios».
CEPYME Aragón recalca que respeta las medidas presentadas, pues la salud siempre ha sido y será lo
primero, pero considera que no se puede culpabilizar a la actividad económica de las cifras de contagios sino a la falta de distanciamiento social y la irresponsabilidad de algunas personas. «El origen de los rebrotes viene de los contactos y reuniones sociales, así como de actividades de ocio ilegal, cuestiones contra las que la organización empresarial pide combatir más duramente y no estigmatizar a la actividad económica. La sociedad aragonesa no debe olvidar que hay mucho empresariado que arrastra una
carga de deudas e impuestos que no van a solucionar de un día para otro, que todavía hay muchos trabajadores que a día de hoy continúan con ERTEs y que, una vez más, serán las pymes y los autónomos los que pagarán la factura de esta crisis sanitaria», afirman.
La patronal califica de «preocupante» la actitud de «aquellos ciudadanos que, haciendo gala de una tremenda irresponsabilidad, no son conscientes del grave riesgo sanitario que conllevan sus actos y,
desgraciadamente, también del importante riesgo económico para miles de personas cuyos
puestos de trabajo continúan en el aire. Son esos contagios los que están contribuyendo a
que nuestras pymes se vean obligadas a bajar la persiana».