La Tortuga de Gargallo ha encontrado el hueco que merece en su pueblo. Al menos, su historia ha regresado a la localidad en la que un resto fósil fue hallado allá por los años cincuenta del pasado siglo veinte. El empeño de la Asociación Cultural Amigos de Las Calderas, con el apoyo del Ayuntamiento, ha hecho posible que la localidad cuente con una exposición sobre el fósil como primera acción para poner en valor la importancia del hallazgo, contar la historia del pueblo y de la zona, así como seguir creando incentivos de recreo y ocio con recursos propios.
Junto a la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel-Dinópolis, el proyecto se hizo realidad ya en 2020. Hace un año se montaron los paneles y vitrinas pero la pandemia alargó la espera hasta este viernes para proceder a una presentación en sociedad. Se contó con una subvención de 6.000 euros de los Fondos de Cohesión del Gobierno de Aragón destinados al impulso de pequeñas actividades en pequeñas poblaciones. Con este dinero se pudo iniciar una investigación y sacar adelante una exposición muy visual, didáctica y completa. Tanto desde la asociación como desde el Ayuntamiento concurrirán a todas las líneas posibles ya que la exposición es sólo el inicio de un proyecto más amplio.
Impulsar el turismo y la cultura
Además de completar la musealización del espacio, uno de los objetivos es señalizar un sendero que parte desde el Peirón de Gargallo (detrás del ayuntamiento) y llega hasta la Mina La Pintada, el lugar donde se halló el fósil, en un paraje incluido en el Geoparque del Maestrazgo y, por lo tanto, protegido por la Unesco. Son 3,5 kilómetros de senda agradable y para todos los públicos que ya es transitable porque es un GR que pasa por Las Calderas -formación geológica de la que toma el nombre la asociación- pero todavía no están señalados los puntos de interés en relación al hallazgo. La previsión es dotar una decena de puntos con cógidos QR que conecten al visitante con un portal web con toda la información paleontolológica de lo que está viendo.
«Todo lo que se haga desde ahora, queremos que sea una sinergia y suma entre instituciones y participación ciudadana contribuyendo a la difusión de la Cultura, uno de los sectores más perjudicados en la pandemia. Es una apuesta valiente ofrecer diversidad de iniciativas y hay que valorar el impulso de la asociación en un proyecto con visos de continuar porque queremos que la conjunción de exposición y ruta geológica añada diversidad a la oferta lúdica y cultural de la zona. Desde el inicio hemos apostado por el medio rural en el que vivimos viéndolo como un espacio de grandes posibilidades», dijo el alcalde, Javier Gargallo, en la presentación de estos proyectos el viernes en el salón de plenos del Ayuntamiento.
Presidió la cita José Manuel Salvador, director general de Ordenación del Territorio Gobierno de Aragón, quien firmó en el libro de visitas del Consistorio y apoyó las palabras del primer edil. «Los Fondos de Cohesión no pretenden sustituir a nada, son una oportunidad más para los pueblos con menos recursos porque plantea darle importancia a lo pequeño y son unas ayudas especiales en las que se valora la ubicación de las actuaciones, promovidas tanto por empresas, asociaciones o ayuntamientos, donde municipios como Gargallo tienen más puntos de inicio en la valoración que otros más grandes. Se trata de intentar hacer una discriminación positiva hacia los pueblos más pequeños», dijo. «Quizá no es una línea de ayudas muy onerosa en dinero pero sí en la calidad de las iniciativas», añadió.
El proyecto ha ido sumando apoyos, como es el caso de la Comarca de Andorra-Sierra de Arcos desde donde «siempre se apoya a los pueblos en sus decisiones». La presidenta, Marta Sancho, destacó la importancia de iniciativas que fomenten el patrimonio como tal y como recurso turístico que atraiga visitantes y que potencie la economía y vida y los establecimientos del pueblo. «Comenzamos el año pasado con las rutas y se va a incluir la ruta paleontológica sobre la Tortuga en la red comarcal. Siendo de las más pequeñas, Gargallo es una de las localidades que está recuperando sus recursos y poniéndolos en valor, y está ganando terreno en ese sentido, está trabajando muy bien en turismo», añadió.
Desde la DPT, Ramón Fuertes invitó a valorar el éxito de iniciativas de este tipo viendo el respaldo que obtienen. «Es esta pero hay más que hacen que Gargallo progrese y apueste por la Cultura y el Turismo. Hay que valorar el trabajo de la asociación como impulsora de este proyecto que ya es una realidad y va consiguiendo más apoyos y la Diputación también estará ahí porque vamos por la buena senda», dijo.
Una jornada científica guiada por los paleontólogos Alcalá y Mampel
La jornada de presentación contó con dos guías de excepción como son los paleontólogos Luis Mampel y Luis Alcalá, también gerente de la Fundación Conjunto Paleontológico Teruel-Dinópolis. El primero dio las claves de la senda que conecta el pueblo con la zona donde se encontró el fósil y que se quiere dotar de información sobre ello para los visitantes. Alcalá ofreció las explicaciones sobre la exposición, sobre su importancia y sobre cómo se fraguó el proyecto. «Nos hace especial ilusión porque ha partido del tejido social y no hemos sido nosotros los que hemos llevado la iniciativa. Eso es maravilloso porque es la propia gente del pueblo la que tiene esa inquietud por recuperar esta parte de su historia», dijo y destacó la «enorme relevancia de la Tortuga a nivel científico» ya que fue el primer resto fósil que se halló y que ha abierto debate.
El paleontólogo enumeró en seis los objetivos que persigue la exposición. Lo primero era saldar «una especie de deuda con el pueblo» ya que se descubrió el fósil en los años 50 y es muy conocido entre los paleontólogos pero no a nivel social ni siquiera en las zonas vecinas. Por eso, la muestra empieza por dar a conocer el pueblo y su entorno y explicar la relación de Gargallo con el carbón en un recorrido que retrocede en el tiempo. El segundo objetivo se centra en dar a conocer e introducir el Albiense, un piso geológico en el entorno, producto de una zona que era costera en la que se juntaban las aguas saladas del mar con las de río. Producto de un cambio climático se convirtió en una zona de cobijo de fauna y flora muy importante para especies como la protagonista de la muestra. El tercer objetivo es dar a conocer la historia de esta Tortuga y las investigaciones sobre ella a raíz del resto fósil encontrado y que terminó en Salamanca. El cuarto objetivo es dar relevancia al hecho de que Gargallo está en el Geoparque del Maestrazgo, una red mundial. El quinto objetivo era catalogar y mostrar los fósiles que se guardaban en cajas y que recogieron vecinos hace años en el entorno y el sexto objetivo «es canalizar ese interés de la sociedad de Gargallo por dar a conocer todo esto». Hay un objetivo adicional: «dar uso a una sala magnífica con una exposición muy visual y de calidad».
Alcalá se comprometió a ser embajador de la Tortuga de Gargallo y de su exposición allá donde tenga la oportunidad de hablar de ello sean incluso «en conferencias y congresos internacionales».
Desde la Asociación Cultural Amigos de Las Calderas mostraron su satisfacción por lo logrado en esta primera fase producto de «un trabajo en equipo por el bien del pueblo y de Aragón». Por su parte, continuarán promocionando los recursos patrimoniales y culturales de Gargallo.
El panel explicativo de la Tortuga de Gargallo. / B. Severino Foto de familia en la sala de exposiciones en torno a la Tortuga de Gargallo. / B. Severino Buena parte de los fósiles que se recogían en las excursiones escolares en los años 70 se han catalogado y se han expuesto también. / B. Severino La técnico de Cultura y Turismo de la Comarca, Mª Ángeles Tomás, explicando los detalles del mirador y planes comarcales en este sentido. / B. Severino Atendiendo a las explicaciones del paleontólogo Luis Mampel en el punto de partida de la ruta senderista. / B. Severino Presentación del proyecto en torno a la Tortuga de Gargallo entre Ayuntamiento, asociación, Gobierno de Aragón, Diputación Provincial y Comarca de Andorra-Sierra de Arcos. / B. Severino Foto de familia desde el mirador instalado junto al peirón y desde donde se ve la zona del sendero. / B. Severino Atendiendo a las explicaciones del paleontólogo Luis Mampel en el punto de partida de la ruta senderista. / B. Severino