Vuelta a empezar y una nueva fecha prometida sin cumplir. El Servicio Aragonés de Salud ha iniciado el expediente de resolución del contrato de obra para la construcción del nuevo Hospital de Alcañiz después de casi un año con los trabajos paralizados y de que la UTE haya presentado dos propuestas para reducir costes que han sido rechazadas porque no cumplían con la Ley de Contratos Públicos y el propio contrato de esta obra al rebajar calidades.
Un varapalo importante para el proyecto que en la práctica supone un retraso grave en las obras, que deberían estar terminadas a finales de 2021 y que probablemente se demorarán hasta la siguiente legislatura.
Ahora se abre un periodo de alegaciones en clave administrativa que podría durar hasta un máximo de seis meses. OHL-Dragados tiene un plazo de 10 días para alegar que comienza hoy y el Gobierno de Aragón ya ha anunciado que reclamará una indemización por «incumplimiento grave». Requerirá quedarse con el aval, que equivale a unos 2,9 millones de euros (el 5% del contrato).
Mientras tanto, el Salud podría ir acortando plazos para, una vez concluya la rescisión, contar con el proyecto de obra adaptado para inmediatamente licitar las obras. Se sacarían a concurso por lotes como obliga actualmente la ley y que tan buen resultado ha dado en Teruel, donde el Hospital ya alcanza en ejecución al de Alcañiz pese a comenzar un año más tarde. Aquí la estructura del edificio ya está levantada por lo que hay que cambiar el proyecto con solo los trabajos que quedan por hacer.
El director gerente del Salud, Javier Marión, ha sido este martes muy cauto en una comparecencia pública ante los medios en Alcañiz. La primera vez que DGA se pronuncia sobre el Hospital en la ciudad después de la visita de la consejera de Sanidad, Pilar Ventura, a las obras en febrero. Una visita a la que posteriormente se sucedió el parón en los trabajos. Marión dijo ayer que intentarán ir rápidos ya que quieren construir cuanto antes el centro sanitario.
Sí ha hablado de plazos concretos el alcalde de Alcañiz, Ignacio Urquizu, quien ha pedido a DGA que las obras con la nueva adjudicataria comiencen antes de que termine 2020 y que estén listas antes de que termine la legislatura. Ha sido también muy crítico con OHL y Dragados, de las que dijo que no han estado a la altura de unas constructoras de su embergadura.
El proceso que tiene por delante ahora el Salud es de un máximo de seis meses y no será nada fácil. «Lo normal es que sea un procedimiento con oposición, que requerirá informes de los servicios jurídicos del Gobierno de Aragón, de la Intervención General y del Consejo Consultivo, el más alto nivel consultivo jurídico del Gobierno de Aragón», ha dicho este lunes Ventura durante su visita al aula de estudio del hospital Infantil de Zaragoza. Durante este tiempo no se podrá adelantar ningún trámite administrativo público y podría terminar ante los tribunales si la UTE no queda contenta. La batalla legal ya no no impediría que el Salud sacara a concurso la obra y que se retomaran los trabajos en la ladera de Cantagallos.
El Salud reclamará a la UTE una indemnización por «daños y perjuicios» e «incumplimiento del contrato» por el que se requerirá el aval. «Es el 5% del importe de la obra y se tendrá que determinar la indemnización que procede», especificó la consejera Ventura.
Alega en el expediente para rescindir el contrato «demora e incumplimiento de los plazos parciales que hacen presumir razonablemente la imposibilidad de cumplir con el plazo total de ejecución» así como por el quebrantamiento de otras obligaciones contractuales por parte del contratista consideradas esenciales así como «el pago a subcontratistas o la adscripción de los medios materiales y personales propuestos y valorados en su oferta».
En la resolución se pone de manifiesto que la adjudicataria tan solo ha construido 5,4 millones de euros -un 9,5% del total- cuando debería haberse ejecutado obra por un importe de 23 millones de euros, lo que supone una inejecución de casi 18 millones de euros en el contrato.
Este parón es evidente desde febrero en la ladera de Cantagallos pero el Gobierno de Aragón no podía hacer nada administrativamente hasta no contar con un documento que lo acreditara. Llegó en octubre, cuando la dirección facultativa de la obra constató que la situación estaba llegando a un punto que hacía «inviable» que el Hospital terminara en la fecha marcada por contrato, diciembre de 2021. Con ello se envió un requerimiento formal a la UTE para que pusiera «todos los medios humanos y materiales» para agilizar los trabajos que no significó ningún aumento de trabajadores, unos cinco desde hace meses.
Por contra, OHL y Dragados sí propusieron modificaciones técnicas que equivalían a importantes ahorros que de producirse supondrían un cambio importante en el modelo de Hospital y que en la práctica suponían reducir calidades en espacios como la fachada, los quirófanos y la terraza superior, entre muchos otros. Una situación que el Salud entendía que no podía aceptar pese a que ha estado conversando hasta última hora.
Fue hace dos semanas cuando la UTE presentó la última oferta y desde entonces se han mantenido varias conversaciones. La última se produjo el viernes, cuando el Salud tomó la decisión de iniciar el expediente.
ARAGONES dice
Es lo que se tiene que hacer. A estas empresas mafiosas hay que machacarlas.
Y ahora nueva subasta por lotes para que se lo puedan quedar las Pymes de la zona.
Espero que la DGA haya aprendido la lección.
ARAGONES dice
Lo primero es tener médicos. Para que queremos un hospital, si la mitad de las especialidades no están cubiertas y hay montones de cosas que se derivan a Zaragoza, donde sobran médicos a patadas.
Ahora la DGA tiene que coger el toro por los cuernos y llevar especialistas a los hospitales periféricos. (los que sobran en Zaragoza), que se han inventado plazas a lo largo de los años
Ningún funcionario puede renunciar a la plaza que le toca en un concurso de traslados, salvo los médicos que tienen patente de corso.
Otra cosa que la gente no sabe, es que a los especialistas del Hospital de Alcañiz, se les ofrecen contratos temporales y a tiempo parcial, y en esto tienen toda la razón
Teruel siempre dice
Es vergonzoso que no se tengan servicios mínimos en una localidad que abarca muchísima comarca. Echa la ley echa la trampa, no sé debería permitir el que no hubiesen especialistas en los hospitales, si hay una vacante de debe cubrir te guste o no te guste el sitio de destino, ya está bien de todo esto no puede ser todo bueno y bonito, que parece que los que viven en Teruel seamos neandertales.
J.M.G.R. dice
Muy bien Aragones la `pregunta es los políticos tienen mal de tripa tienen infartos etc etc o solo nos pasa a los ciudadanos de apie o alomejor están esperando que vaya bajando la población para poder decir que un hospital no hace falta aquí duro con ellos Teruel adelante