Hace ya un mes que Elena Sava Colipca se ha puesto al frente del Multiservicio ‘La Vega´ de La Cañada de Benatanduz revitalizando así la actividad económica de la localidad. Después de que el antiguo encargado, Juan Bautista Notari, se haya jubilado tras ostentar su cargo durante once años y tras varias entrevistas con diversos candidatos para ocuparse de la gestión, Elena resultó ser «la afortunada».
La gerente se trasladó desde Tronchón junto a su marido para poner en práctica su amplio conocimiento y experiencia en el sector hostelero. Una decisión que tras las primeras semanas de actividad califica de «muy acertada». «Me gusta trabajar en este negocio, conociendo el pueblo y a sus vecinos me he presentado a la entrevista y he sido seleccionada. Me encanta este trabajo porque me permite comunicarme con la gente», asegura. Además de la gestión, tiene gran conocimiento de cocina. «Hago comidas de puchero y de cuchara y los clientes están encantados. Los mayores prefieren venir cada día a comer aquí con un precio justo», destaca la nueva gestora.
El espacio cumple una función «imprescindible» en esta localidad del Maestrazgo de 34 habitantes empadronados en la que tan solo la mitad son los que viven en el pueblo durante el invierno. Además de bar y restaurante, el establecimiento dispone de tienda. Una avería ha impedido abrir de momento el servicio de alojamiento en sus siete habitaciones pero pronto se pondrá en marcha. «Ya tengo llamadas de clientes que quieren venir y alojarse», destaca Elena.
Reabiertas sus puertas, es sobre todo un lugar «de encuentro». «Somos pocos, pero en comparación con otros establecimientos que he llevado, la gente utiliza mucho el bar. Se juntan para almorzar, comer, cenar, se organizan celebraciones y viene gente de paso y turistas. No tengo tiempo para sentarme» reconoce Elena entre risas. De hecho, la temporada de verano tendrá que contratar personal, aunque de momento «se apaña». Los vecinos ya pudieron celebrar en el establecimiento reabierto al público los carnavales.
Elena lleva más de veinte años viviendo en el territorio y reivindica la importancia de sus pequeños pueblos y de que sus multiservicios continúen generando actividad. «Los vecinos son conscientes de que su pueblo tiene que salir adelante y lo utilizan muchísimo. Recibo mucho apoyo de parte del Ayuntamiento y los pocos habitantes», resalta. Uno de los servicios que más agradecen los vecinos es la provisión de pan cuatro veces a la semana desde Fortanete. «El panadero viene personalmente para traer el pan y la gente está encantada por contar con este servicio».
El multiservicio es propiedad del Ayuntamiento desde que se abrió en 2004, y en él los vecinos compran el pan, los medicamentos y pasan consulta médica, entre muchas otras funciones de las que dispone. Las instalaciones del negocio cuentan ahora con mucho más equipamiento gracias a los 15.000 euros de inversión que se han obtenido a través del proyecto MultiServicio Rural de Cámara de Teruel financiado por la Diputación de Teruel.