Camino Ivars, freelance especializada en cultura y cine; Loreto Sánchez Seoane, jefa de Cultura en El Independiente; y Berna González Harbour, periodista de El País y encargada de su newsletter diaria, han cerrado la segunda mañana del IV Curso de Periodismo Especializado de Alcañiz, «Cultura eres tú. Un periodismo de cine».
Su debate, ‘Periodismo con rostro. Seguir siempre una buena historia‘ se ha centrado en una de las claves principales para el periodismo cultural: ponerle rostro a las historias para que el lector se interese por ellas y las siga. «El formato no es lo importante, sino cómo vives la historia y cómo la cuentas», ha explicado Ivars, que trabaja como periodista y también como productora. «Tengo dos pasiones: Aragón y las historias. Busco buenas historias a pie de calle, pero en realidad son ellas las que me encuentran a mí», ha comentado reflejándolo con ejemplos como su reportaje ‘El Ángel de las bicicletas vive en el Gancho’, a quien encontró de camino al taller de una amiga y estuvo persiguiendo seis meses hasta conseguir la entrevista. «Ser freelance es complicado, pero te permite centrarte en lo que a ti te gusta y te parece importante e interesante. Es muy importante cómo nos mentemos en las historias, yo acompaño a mis lectores a conocerlas», ha detallado. Durante la pandemia, incluso le llamó una televisión polaca para dar a conocer una de sus historias.
Ante las palabras de Ivars, «siempre he sabido que era periodista», Loreto Sánchez ha asentido y ha explicado que cree que «es algo que nos pasa a todos los periodistas, nos empeñamos en seguir con ello porque en el fondo es lo que somos». La jefa de Cultura en El Independiente ha defendido que los que se dedican a esta profesión viven con la necesidad de transmitir lo que creen que puede ser interesante y que, al final, la cultura representa a la sociedad y hay que investigar y contar qué hay detrás. Por ejemplo, ella comenzó a presentar en el periódico historias de mujeres que no se conocían, se habían olvidado o se malinterpretaban. «Tuvo mucho éxito y me llamo una editorial. Me propuse no escribir sobre ninguna de las anteriores y me di cuenta en el trayecto de que todas tienen un nexo porque compartían un mismo interés», ha contado la ponente.
«Me maravilla escucharos porque me doy cuenta de que la pulsión de ser periodista vibra igual en todas las generaciones. Transmitís una emoción igual a la que yo sentí y sigo sintiendo», así ha comenzado su intervención Berna González. «Yo elegí periodismo porque me di cuenta de que abarcaba todo lo que yo quería conocer. Concentraba todos mis deseos, me permite no elegir y, aún así, alcanzar todos los temas», ha comentado al explicar su trayectoria.
Además, ha añadido que ella también es escritora y que la literatura de ficción le da libertad, imaginación y diversidad, «todo lo contrario que el periodismo». Sus libros le permiten dar un final adecuado a conflictos que en la realidad no se pueden resolver. «La literatura y el periodismo son la cara y la cruz de una misma moneda, que es la realidad», ha añadido. Entre las 10 más leídas de El País siempre hay una historia humana, porque la gente ve rostros y empatiza con ellos. «Cuando cuentas verdades humanas donde hay sentimientos es imbatible a nivel audiencias», ha contado González sobre su reportaje acerca de la historia de amor de Almudena Grandes, su trabajo más leído.
Por último, las ponentes han querido recalcar dos temas importantes. Por un lado, que el ámbito digital actual ha supuesto un impulso para el periodismo cultural al demostrar a través de visualizaciones y tiempos de lectura que esas historias tienen un gran público e interesan. Por otro lado, que el multimedia es vital para narrar una historia, las fotografías, videos y audios dan algo esencial y es que «una imagen vale más que mil palabras».